La situación del teniente general Javier Salto Martínez-Avial, al mando de del Ejército del Aire, marca la excepción. Es el único jefe de la cúpula militar que en su día nombrase María Dolores de Cospedal que se mantiene al frente de su cargo. Margarita Robles ya ha movido las piezas en el Ejército de Tierra -este martes, en el Consejo de Ministros- y en la Armada Española. El general Salto supera los cuatro años en su puesto y, si bien se espera su relevo en fechas próximas, fuentes consultadas por Vozpópuli consideran que el cambio no es urgente ni será inmediato.
Apunta la tradición militar que, con el nombramiento de un nuevo ministro de Defensa, se renueve la cúpula militar: los jefes de los respectivos Ejércitos y Armada, además del Jefe del Estado Mayor de la Defensa (JEMAD). O lo que es lo mismo, cada cuatro años, aproximadamente. Pero los ritmos políticos no han acompañado las tradiciones castrenses y la moción de censura que puso fin a la presidencia de Mariano Rajoy llevó a Margarita Robles a asumir la cartera con unos mandos militares nombrados por María Dolores de Cospedal que llevaban poco más de un año en su cargo.
En un esfuerzo de que la convulsión política no se trasladase también a las esferas castrenses, Margarita Robles asimiló como propia la cúpula militar que había designado su predecesora, aun cuando el color político del Gobierno había cambiado. A saber: el general Fernando Alejandre Martínez como JEMAD, el general Francisco Javier Varela Salas como JEME (Ejército de Tierra), el almirante Teodoro López Calderón como AJEMA (Armada Española) y el citado general Salto como JEMA (Ejército del Aire).
El primero al que Margarita Robles encontró recambio fue al JEMAD Alejandre, quien procedía del Ejército de tierra. En su lugar, y siguiendo la rotación entre los cuerpos militares, la ministra de Defensa nombró al jefe de su gabinete Miguel Ángel Villarroya -del Ejército del Aire-. Robles tenía intención de mantener al resto de la cúpula militar. En esferas públicas y privadas insistía en la comodidad con la que trabajaba con los respectivos jefes militares, sin tener en consideración que los designara María Dolores de Cospedal. Pero la crisis derivada a partir de las vacunas contra el coronavirus trastocaron sus planes.
Cuando Margarita Robles se enteró de que el JEMAD Villarroya había recibido su dosis contra el covid, y considerando que no había seguido las pautas dictadas por el Ministerio de Defensa, lo depuso en su puesto. A partir de ahí bailaron dos fichas en la cúpula militar. Robles movió turno y, pese a la brevedad del mandato de Villarroya, optó por nombrar nuevo JEMAD a un militar al frente de la Armada. Y ese fue el almirante Teodoro López Calderón, pese a sus 67 años, edad avanzada para el cargo si se tienen en cuento los antecedentes históricos. El hasta entonces máximo responsable de la flota de la Armada, almirante Antonio Martorell Lacave, fue nombrado jefe del cuerpo militar.
El último cambio de Robles
Quedaban, por tanto, dos piezas por cambiar. Desde algunas esferas castrenses se especulaba con la posibilidad de que Margarita Robles aprovechase la oportunidad para cambiar al mismo tiempo a los máximos responsables de los Ejércitos de Tierra y del Aire. Sin embargo, esa opción se esfumó en fechas recientes. Según las fuentes consultadas por este diario, la ministra de Defensa tenía claro el sustituto del general Varela, al frente de Tierra. Y esa sustitución se ha hecho efectiva este martes, en el Consejo de Ministros.
El sustituto ha sido el jefe de Gabinete de la ministra, teniente general Amador Enseñat y Berea. Además de contar con un amplio currículum militar e historial de condecoraciones, es de máxima confianza de Margarita Robles, por lo que ocupaba un puesto destacado en las quinielas de sucesión.
Nació en La Coruña el 25 de octubre de 1960. De acuerdo a la información facilitada por el Ministerio de Defensa, fue promovido al empleo de Teniente de Artillería como número 1 de la XXXVIII de la Academia General Militar. Es Diplomado de Estado Mayor del Ejército de Tierra y ha realizado, entre otros, el Curso Avanzado de Mando y Estado Mayor en el Reino Unido. Ha sido Director del Gabinete Técnico de la Ministra de Defensa, Director de Enseñanza, Instrucción, Adiestramiento y Evaluación del Ejército de Tierra y Secretario General del Mando de Adiestramiento y Doctrina del dicho Ejército. A lo largo de su carrera, ha alternado el mando de Unidades operativas y destinos en el Estado Mayor del Ejército de Tierra, Estado Mayor de la Defensa y Secretaría General de Política de Defensa. Ha servido en operaciones de la OTAN, Unión Europea y Naciones Unidas. Es Licenciado en Ciencias Políticas y Sociología, Máster en Relaciones Internacionales y en Seguridad y Defensa y Diplomado en Altos Estudios Internacionales.
Pendiente queda la sucesión del Jefe del Estado Mayor del Ejército del Aire. El movimiento está en los mentideros militares y se contempla que se lleve a cabo en fechas próximas. Sin embargo, no será inminente. Las fuentes consultadas por este diario detallan que habrá que esperar para que Margarita Robles nombre un relevo para el teniente general Javier Salto Martínez-Avial. Y, con él, terminar los cambios en toda la cúpula militar que la ministra heredó de su predecesora, María Dolores de Cospedal.