Pedro Sánchez ha asistido, Falcon mediante, al homenaje que el PSOE vasco ha preparado en Bilbao al fallecido Rodolfo Ares. Un acto en el que el presidente del Gobierno ha aprovechado para homenajear su figura y destacar su larga trayectoria política, siempre dentro de la organización socialista, donde llegó a ser consejero de Interior durante el Gobierno de Zapatero.
Entre las virtudes que ha destacado Sánchez está la fidelidad: "Militancia es también lealtad, ahora que vemos partidos que aparecen y desaparecen, militantes que van y vienen". Sin mencionar a ninguna organización política, pero con la guerra entre Sumar y Podemos en su estado más candente, el líder socialista ha dicho que Rodolfo Ares, "peses a que se han ganado y perdido congresos", nunca olvidó "que más allá de las diferencias, está la pertenencia a un proyecto colectivo como el socialismo vasco y el socialismo español".
Sánchez, que no suele dar puntada sin hilo, ha continuado con su argumentario: "La lealtad es tan importante y es una de las materias primas tan fundamentales en estos tiempos de tanta tribulación y tanto cambio". Después, ha continuado diciendo que "hay que ser conscientes de que uno es socialista cuando uno entra por el umbral de la agrupación y muere con las botas puestas como Rodolfo Ares siendo militante del PSOE".
Sobre Doñana, el presidente ha pedido "a la derecha andaluza, porque a la ultraderecha no se le puede pedir nada, que aparque su soberbia, reconozca el error y frene este atropello". Para Sánchez, el parque natural "no es el cortijo de nadie, es el patrimonio de todos" y ha reclamado que se escuche a la ciencia, a la UNESCO, a la Unión Europea y a los tribunales.
El jefe del Ejecutivo ha dicho que "gobernar es trabajar por el interés de la mayoría y no sentirse el dueño de ningún cortijo, mucho menos en democracia", ha insistido sobre la polémica suscitada por la iniciativa del Gobierno de Juanma Moreno que persigue ampliar la zona regable en la corona norte del parque.
También se ha felicitado por el acuerdo que posibilitará la aprobación de la ley de la vivienda, porque hará que, como dice la Constitución, el acceso a ella sea "un derecho y no un problema". En su intervención, el jefe del Ejecutivo ha hablado de que la labor del socialismo es trabajar por la "dignidad" de las personas, y en este sentido ha citado la primera ley de Vivienda de la democracia en España. "Esta ley va a transformar un enorme problema especialmente para los jóvenes en este país", ha dicho.
"Somos socialistas para expandir nuestras ideas... Ser socialista es hacer", ha defendido Sánchez, al tiempo que ha recordado la aportación de Ares para lograr el "logro histórico" que supusieron "la paz y libertad", así como para que fuera posible "el cambio en Euskadi" y que el PSE-EE se convirtiera en "una organización ganadora y transformadora".
En este sentido, Sánchez se ha mostrado convencido de que Patxi López "no va a ser el último lehendakari socialista vasco". "Ese es el legado que nos dejó Rodolfo, el de un partido de militantes, un partido de victoria, con hambre de ganar. Eskerrik Asko, Rodolfo. Gracias querido compañero porque lo que nos enseñaste, esa lección de vida, es algo que tenemos muy presente. Somos un partido para ganar, de ganadores", ha resaltado.
Asimismo, ha defendido que ser socialista supone "luchar por la dignidad" y ha censurado que mientras la derecha "identifica las reformas con los recortes", los socialistas lo identifican con dignidad salarial, con la dignidad de las pensiones o con la dignidad en el acceso a la vivienda.
"No tenemos problema en compartir la bandera del feminismo con otras organizaciones"
Por otro lado, ha valorado que el PSOE es una formación ecologista y feminista, en contraposición a "una derecha y una ultraderecha" que defienden que el feminismo es "un asunto de mujeres, cuando se trata de un movimiento transformador que interpela a todos, fundamentalmente a los hombres".
"Nosotros no tenemos problema en compartir la bandera del feminismo con otras organizaciones. Ojalá la derecha fuera feminista, desgraciadamente no lo es. Nosotros lo somos y lo hacemos posible donde gobernamos", ha sostenido, para añadir que ser feminista también es subir el SMI, revalorizar las pensiones o que en la actualidad "uno de cada dos contratos sea indefinido".
Sánchez, que ha defendido la utilidad de la "vía socialdemócrata para responder a las crisis", ha recordado que los socialistas se tuvieron que enfrentar desde el Gobierno del Estado a la pandemia de la covid-19. "Menos mal que estábamos al frente de las instituciones porque esta pandemia con otro que yo me sé...", ha ironizado.
Asimismo, ha censurado que la respuesta neoliberal a la crisis financiera supusiera en el pasado "seis millones de parados" y ha valorado por contra que desde el Ejecutivo central se esté "rebajando los impuestos a la clase media y trabajadora".
"Gracias a las decisiones que ha tomado este Gobierno cinco millones de trabajadores pagarán menos en el impuesto de la renta", ha manifestado, al tiempo que ha sostenido que "por cada euro que se sube a los de arriba, la clase media y trabajadora se ahorra cinco euros".
