España vuelve a jugar en Barcelona 18 años después. El combinado nacional disputará un amistoso contra Albania el próximo 26 de marzo en el estadio del Espanyol, el RCDE Stadium de Cornellà-El Prat, y la asociación 'Barcelona con la Selección' calienta motores. Después de años de trifulcas con el Ayuntamiento capitaneado por Ada Colau para poder emitir los partidos desde pantallas gigantes en la vía pública, la entidad ha logrado una grada para que miles de jóvenes animen a España en su retorno a Cataluña. Tres días después, la selección de Luis Enrique jugará contra Islandia en A Coruña como preparación para el Mundial de Qatar.
El último partido de España en tierras catalanas se produjo el 18 de febrero de 2004 en un amistoso ante Perú en el estadio olímpico Lluís Companys. "Estamos muy contentos con la actual Junta Directiva de la Federación Española de Fútbol y con Luis Rubiales como presidente. En la anterior etapa ni siquiera respondían nuestros correos electrónicos pidiendo ayuda para que España volviese a jugar en Cataluña o para instalar alguna pantalla, pero ahora vamos a contar con una grada para animar a la Selección", celebran desde la plataforma.
Pantallas para ver a la Selección
Cansados de que en su Barcelona natal "todo", incluso el deporte, se mezcle con la política, los cinco jóvenes al frente de la asociación, lanzan unas preguntas: "¿Creéis que a un alemán le cabría en la cabeza que su Selección no pudiese jugar en el Allianz Arena, el campo del Bayern de Múnich? ¿Sería normal que de fútbol de Italia no pudiese jugar en el Estadio de San Siro?". "En la Selección Española también hay jugadores catalanes, no entendemos dónde está el problema", sostienen en Vozpópuli.
La plataforma lleva seis años de andadura. "Nos constituimos como asociación en 2016. Dos años antes, en pleno Mundial de Fútbol de Brasil, nadie podía ver en pantallas a la Selección Española y muchos bares ni siquiera retransmitían el partido porque no querían represalias. Así que quedamos un grupo de 20 amigos en un bar cerca de la plaza Francesc Macià y acabaron sumándose muchas más personas", recuerda Manel, uno de los jóvenes fundadores de 'Barcelona con la Selección'.
"Nuestro objetivo era que España volviese a jugar en Cataluña y que nos dejasen instalar pantallas en la vía pública para satisfacer a toda la afición que sabíamos que había. Lo habíamos comprobado. Pero éramos cuatro niñatos menores de edad...", ríe. Y empezaron los problemas.
Nuestro objetivo era que España volviese a jugar en Cataluña y que nos dejasen instalar pantallas en la vía pública para satisfacer a toda la afición que sabíamos que había
La entidad, con Nacho Pla a la cabeza, quería reunir a miles de personas alrededor de una pantalla gigante en Plaza Cataluña. La alcaldesa Ada Colau explicó que no tenía nada contra la Selección Española, pero que no concedería el permiso para no perjudicar "el descanso vecinal, el orden público y la seguridad". Era un partido que se retransmitiría en abierto.
"Recopilamos otras iniciativas que se habían realizado en la vía pública. Nos dio para un dossier de 10 páginas. Como no nos dejaron, convocamos una concentración con una 'sorpresa gigante', que era la pantalla. Nos reunimos más de 5.000 personas para vivir los octavos de final y nos acabaron multando con 14.000 euros", comentan desde 'Barcelona con la Selección'. Y una campaña de crowdfunding facilitó el pago.
Incidentes y agresiones
En ese contexto, dos de las integrantes de la asociación, Ruth y María Rosa, fueron agredidas por apoyar al equipo en las calles de Barcelona. Cuatro años después, el Juzgado Penal número 16 impuso una pena a los agresores de entre año y año y medio de prisión por delitos contra los derechos fundamentales y libertades públicas, lesiones y hurto, además de pagar multas por 1.980 euros y una indemnización solidaria de 6.000 euros por daños morales a las tres víctimas.
Sin embargo, la Audiencia de Barcelona estimó el recurso presentado por el abogado de los miembros de Barcelona con la Selección, José María Fuster-Fabra, y la pena para cuatro de los condenados aumentó a 27 meses de prisión y una multa de 6.180 euros, lo que implica su ingreso en la cárcel. Los condenados, miembros del grupo Desperdicis -calificado por los Mossos d'Esquadra como radical estar relacionado "con el movimiento red skin del barrio de Sant Andreu de Barcelona"- han recurrido. Además de destrozar la carpa informativa que la entidad había instalado, hirieron a las víctimas al grito de "putas españolas, fuera de aquí, os vamos a matar, putos españoles de mierda, perras españolas, iros a vuestro país, hijos de puta".
Pese a los ataques, la plataforma no dudó en seguir apoyando a la Selección Española. El Mundial de Rusia de 2018 era la siguiente cita. Aunque en un principio se dijo que el Ayuntamiento no le concedía el permiso, finalmente los de Colau autorizaron montar una pantalla gigante en el Camp de l'Àliga para ver el partido que España en los octavos de final.
"No creemos que en el España-Albania del 26 de marzo haya incidentes. Confiamos en que no. Pero nunca se sabe", reconocen los líderes de la organización. "Si a mí no me gusta la Fórmula 1, no voy y ya está. No todo tiene que estar siempre mezclado con la política. Es solo deporte", zanjan.
Antes de ocupar la grada en el estadio del Espanyol, los jóvenes han decidido acompañar al autobús que transportará a los jugadores hasta el hotel: "Ya tenemos casi todas las entradas vendidas. Queremos conseguir que se viva un ambiente inigualable"