España

Traca final de traslados etarras: del asesino de un niño al autor del atentado de la T4

Interior aprueba el acercamiento de otros once terroristas de ETA un día antes de cerrar 2020, un año en el que ha aproximado a 130 presos de la organización a cárceles más cercanas a sus lugares de origen

  • Imágenes de archivo del atentado en la T4 de Barajas.

Instituciones Penitenciarias ha aprobado el traslado de otros 11 presos de ETA y a uno del GRAPO a cárceles más próximas a sus lugares de origen. Entre ellos figuran el histórico Juan Carlos Iglesias Chouzas, alias Gadafi, con una veintena de asesinatos a sus espaldas -incluido un niño de dos años-; también Igor Portu Juanena, condenado por el atentado de la T4 de Barajas en 2006 en el que murieron dos personas. Estos presos se unen a la lista de 119 etarras que han sido trasladados a lo largo de 2020, según las cifras que maneja la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT).

Igor Portu Juanena formaba parte del comando que colocó la furgoneta bomba en la T4, en plenas negociaciones con el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero. De Córdoba pasa a Daroca (Zaragoza). Ingresó en prisión el 11 de enero de 2008 y cumple una condena de 40 años de prisión por asesinato, organización criminal, tenencia de explosivos, estragos e incendios. Según Interior, "ha aceptado la legalidad penitenciaria y ha presentado escrito en el de desvinculación de la actividad terrorista". También pasa a segundo grado. 

El sanguinario Juan Carlos Iglesias Chouzas, alias Gadafi, acumula una veintena de asesinatos; entre ellos, el niño Fabio, de 2 años, hijo de un guardia civil. Su comando colocó un artefacto en los bajos de su vehículo y lo hizo estallar, matando al pequeño y provocando heridas al agente y a su otro hijo. Del Centro Penitenciario de Alicante II pasa al Centro Penitenciario de Dueñas, en Palencia. Ingresó en prisión el 1 de julio de 2003 y cumple una condena de 30 años por los delitos de asesinatos, atentados, estragos, terrorismo, depósito de armas y explosivos, detención ilegal y robo con violencia. Interior también afirma que "asume la legalidad penitenciaria, ha presentado un escrito reconociendo el daño causado y su decisión de no recurrir nunca más a la violencia. Asimismo, pasa a segundo grado.

María Jesús Arriaga Martínez fue integrante del comando Nafarroa que perpetró varios atentados en la Comunidad Foral en los años 80. Ingresó en prisión el 7 de mayo de 2010 y cumple una condena de 23 años por delito de asesinato. Como en los casos anteriores, Interior asegura que reconoce el dolor causado y también pasa a segundo grado. De Topas (Salamanca) pasa a Pamplona.

Ainhoa García Montero es también conocida como la jefa de los comandos de ETA, por la dirección que ejercía sobre los mismos. De Topas (Salamanca) es trasladada a Asturias. Cumple 30 años de prisión por asesinato, atentado, tenencia de explosivos, depósito de armas y daños. Instituciones Penitenciarias afirma que cumple con esos requisitos de reconocimiento del dolor provocado.

José Ignacio Guridi Lasa fue condenado el pasado mes de noviembre por colocar una bomba en un macetero en la localidad navarra de Cintruénigo, tras manejar información obsoleta de que allí residía un guardia civil. De Jaén pasa a las Mulas, en León. Ingresó en prisión el 27 de febrero de 2001 y cumple una condena de 30 años, 6 meses y 30 días de prisión por atentados, estragos, incendios, asociación ilícita, depósito de armas, lesiones y falsificación. "Ha aceptado la legalidad penitenciaria y reconoce el daño causado", afirma Instituciones Penitenciarias. 

Manex Castro Zabaleta se le condenó por el asesinato del empresario Ignacio Uría, en 2008. También por delitos de detención ilegal, estragos e incendios y daños. "La Secretaría General ha resuelto progresarle a segundo grado y, a propuesta de la Junta de Tratamiento gaditana, su traslado a la prisión zaragozana de Daroca". También se asegura que ha presentado un escrito donde se desvincula de ETA. 

Juan Carlos Besance Zugasti, condenado a 30 años por asesinato, estragos, asociación ilícita, tenencia de explosivos y atentado, admitió en juicio que fue entrenado en Venezuela. De Huelva pasa a la cárcel de Dueñas (Palencia).

Francisco Javier Gallaga Ruiz pasó por varios comandos de ETA y fue entregado por las autoridades francesas a finales de 2004. Cumple 30 años por los delitos de asesinato, homicidio, incendio y estragos. "Acepta la legalidad penitenciaria y ha remitido escritos en los que renuncia al uso de la violencia y lamenta y se responsabiliza del dolor causado a sus víctimas", afirma Interior, y por eso le traslada de Córdoba a Daroca (Zaragoza)

Fermín Vila Michelena fue detenido en Belfast en 2010 y cumple 30 años de prisión por asesinato, estragos, atentados, terrorismo y depósito de armas. De Alicante II pasa a Zuera (Zaragoza). Los también presos de ETA Iker Lima Sagarna, Luis Enrique Garate Galarza, estos sin delitos de sangre, pasarán respectivamente de Huelva a Mansilla (León) y de Puerto I a El Dueso. 

La Secretaría General ha resuelto además el traslado de un interno condenado por delitos relacionados con los GRAPO. Se trata de Manuel Pérez Martínez, condenado a 25 años por estragos, incendios, detención ilegal y daños. Será enviado de Castellón II a Madrid VI (Aranjuez).

Una "estrategia" orquestada 

En diversos comunicados recientes, la AVT ha denunciado que Fernando Grande-Marlaska incumple su palabra al aproximar a sus lugares de origen a etarras con delitos de sangre. En total y a lo largo de 2020 -siempre siguiendo las cifras que maneja la asociación- se han acercado 119 miembros de ETA.

La AVT asevera que existe una "estrategia orquestada por los abogados de los etarras" para hacerles firmar cartas de falso arrepentimiento para así tramitar con el Ministerio del Interior su traslado a cárceles próximas al País Vasco.

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