Un nuevo revuelo ha protagonizado la sesión de un parlamento regional. La Cámara valenciana ha vivido un rifirrafe entre el president de la Generalitat, Ximo Puig, y Vox, que ha acusado al primero de "promocionar el sexo anal" y fomentar "la corrupción ideológica de menores".
La polémica se ha producido a raíz de una campaña de educación sexual del Gobierno valenciano, en la que se trata de impulsar el uso de métodos de prevención en las prácticas sexuales como la mencionada.
La portavoz del grupo parlamentario Vox en la Comunidad, Ana Vega, ha acusado a Puig de "corrupción moral ideológica", refiriéndose, además, a la denuncia de libros LGTBI que finalmente el juez ha denegado retirar en Castellón.
"Imagino que no nos encontraremos el cierre de su Observatorio LGTBI. Imagino que tampoco encontraremos el cierre de su Instituto Valenciano de la Juventud, organismo que se gasta el dinero de los ciudadanos en promocionar el sexo anal", ha asegurado la portavoz de Vox.
"Lo del sexo anal, no es obligatorio"
"Señor Puig, ¿cuánto nos ha costado a todos los ciudadanos de la Comunidad Valenciana esta campaña? Que yo creo que ya usted ni lo sabe", ha acusado al dirigente valenciano para afirmar que "parece que gobiernan, en lugar de pensando con la cabeza, pensando con las posaderas".
Puig ha contestado pidiendo al grupo que "se miren esa obsesión contra la violencia de género" y afirmando que "lo del sexo anal, no es obligatorio".