España

Yolanda Díaz ignoró cuatro ofrecimientos de Carmena para sumarse a su movimiento

La vicepresidenta segunda del Gobierno, que arrancará el 8 de julio su "proceso de escucha", ha cabreado a la exalcaldesa de Madrid con su negativa a sumar con ella

  • La exalcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, que busca aliarse con Yolanda Díaz, en la Feria del Libro de Madrid. -

La exalcaldesa de Madrid Manuela Carmena no sumará para Yolanda Díaz. Según ha sabido Vozpópuli, la lideresa morada en Moncloa ignoró hasta cuatro ofrecimientos de la única regidora de izquierda que ha tenido la capital de España en los últimos 30 años para integrarse en su movimiento. La negativa de la también titular de Trabajo, que arrancará su "proceso de escucha" el próximo 8 de julio, ha cabreado mucho a Carmena, según precisa a este diario una fuente cercana a ella.

Desde que Yolanda Díaz anunció hace diez meses su intención de promover un proceso para reorganizar su espacio político y dar por superado a Unidas Podemos, la ex primera edil ha alabado en público en reiteradas ocasiones el paso adelante de la 'dama roja'. Carmena concibe la política de manera muy parecida a Díaz. No por casualidad, ella misma encabezó una plataforma transversal, Ahora Madrid, que se constituyó como candidatura ciudadana de unidad. Algo que rima muy bien con 'Sumar'. Pero a la vista está que Yolanda Díaz no cuenta con Carmena.

El problema es que el entorno de la exalcaldesa no comprende muy bien por qué Díaz se apoya en otros perfiles, como la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, o la vicepresidenta valenciana, Mónica Oltra -ambas con embrollos judiciales- antes que en la exjueza. Aunque algunas fuentes próximas a Carmena señalan al veto que Más Madrid, con Rita Maestre e Íñigo Errejón a la cabeza, puede estar haciendo tras la voladura del partido el año pasado.

Díaz, presa de los partidos

El razonamiento político es el siguiente: dado que Más Madrid es la fuerza hegemónica de la izquierda en la Comunidad a Yolanda Díaz no le quedaría más remedio que cumplir sus exigencias y apartar a una figura que en su día fue icónica para la izquierda capitalina. Ese es el gran problema que perciben las fuentes cercanas a Carmena en Díaz; que la vicepresidenta segunda es presa de los partidos por mucho que reitere que 'Sumar' no va a partidos.

Lo cierto es que la exalcaldesa es un sujeto incómodo para varios espacios con los que la titular de Trabajo está intentando tejer alianzas. Cabe recordar que Carmena también terminó mal con Podemos, al que señala como 'vieja política' desde el momento en que entró en el juego institucional, por querer imponerle nombres en su lista electoral. Y también con Más Madrid y Más País, a los que ve como dos formaciones que no han hecho "nada significativo" con los mismos vicios que tanto le repudian.

Eso sí, Carmena no quiere estar en primera línea. A sus 78 años ella misma confiesa sentirse más útil "en la retaguardia". Pero eso no quita que se considera una persona con un gran bagaje y una experiencia capital en la ardua tarea de unir a la izquierda y salir airosa. Pese a todo, la soledad política de la exalcaldesa, que se prodiga en algunas tertulias radiofónicas, es patente.

Las mujeres 'referente'

Yolanda Díaz juntó en noviembre del año pasado a un elenco femenino de 'otras políticas'. Todo un guiño hacia el tipo de perfiles con los que la vicepresidenta segunda se siente cómoda y quiere cerca de su proyecto. Junto a Oltra estuvo también la líder de Más Madrid, Mónica García; la jefa de los 'comunes' y alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, y la representante de Movimiento por la Dignidad y la Ciudadanía, Fátima Hamed. Aquello fue "el comienzo de algo maravilloso", en palabras de la propia Díaz.

El problema es que tanto Colau como Oltra están políticamente amortizadas y, además, envueltas en sendos líos judiciales. La Fiscalía aprecia "indicios relevantes" de delito de la vicepresidenta valenciana por haber ocultado, supuestamente, un caso de abusos sexuales a una menor tutelada cometido por su exmarido, quien fue condenado a cinco años de cárcel por ello. Y sobre Colau pesan una imputación por supuesta prevaricación y un mar de dudas acerca de las oposiciones convocadas por su corporación en las que tuvo cabida gran parte de su equipo.

Por el momento, Díaz avanzó este jueves que "todas las militancias" tendrán sitio en sus planes, aunque ya ha avisado a los partidos de que su gira por España tendrá "protagonismo ciudadano". Su "proceso de escucha" terminará en diciembre. Y entonces, de manera colectiva y con unas primarias, decidirá si será la candidata de su espacio para las elecciones generales de 2023.

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