El billete de cinco libras fabricado en celulosa dejará de ser de curso legal a partir de este sábado, aunque se podrá intercambiar en el Banco de Inglaterra (BoE) de forma indefinida.
El viejo billete cede el testigo de forma definitiva al billete de cinco libras de plástico, que cuenta con la imagen de Winston Churchill en el reverso y que entró en circulación el pasado 13 de septiembre.
El BoE aseguró durante la presentación del billete que el material plástico permite que sea más "limpio, seguro y fuerte", puesto que el polímero con el que está fabricado prolonga su uso hasta los cinco años, aproximadamente, 2,5 veces más que los billetes tradicionales de celulosa.
Además incluye detalles como una ventana transparente cuyos bordes cambian de color o un holograma que cambia de forma cuando se balancea, por lo que el billete es más difícil de falsificar.
Entre las curiosidades del nuevo 'fiver', como lo denomina el organismo monetario, cabe destacar que las agujas del 'Big Ben', la torre del reloj del Parlamento de Londres, marcan las tres en punto, hora aproximada en la que el conocido ex dirigente británico pronunció su famoso: "No tengo nada que ofrecer sino sangre, esfuerzo, lágrimas y sudor", cita que también está incluida en el billete.
El billete de plástico que entrará en circulación es el de 10 libras, que homenajeará a Jane Austen y será introducido en septiembre de 2017, aunque su presentación tendrá lugar el próximo 18 de julio en la catedral de Winchester, conmemorando el segundo centenario de la muerte de la escritora británica, cuyos restos reposan en dicho templo desde 1817.
Por su parte, el nuevo billete de 20 libras con el pintor William Turner en el reverso se prevé que entre en circulación en el año 2020.