Quince días. Poco más de una semana es el tiempo que queda para que se celebren las elecciones presidenciales en Estados Unidos. El próximo 5 de noviembre, los ciudadanos del país norteamericano batirán en las urnas a los candidatos Kamala Harris y Donald Trump tras una de las campañas electorales más tensas y polémicas de los últimos años. Una campaña que adquiere mayor tensión y crispación según se acerca la cita. Muestra de ello han sido los últimos mítines de los que optan a la Casa Blanca, en los que los insultos y las descalificaciones no han cesado.
No es una sorpresa que el equipo que encabeza el ex presidente del país (2017-2021) emplee ofensas contra su contrincante -ha llegado a emplear bulos sexuales y racistas contra Harris-, pero en esta ocasión, ha sido explítico en otro sentido, acusando a la hasta ahora mano derecha de Joe Biden de ser una "mierda de vicepresidenta". "¡Eres una mierda de vicepresidenta! ¡La peor vicepresidenta! Kamala... ¡estás despedida!", dijo el republicano en un mitin en Pensilvania.
Trump just called Harris a “shit vice president” at his campaign event in Pennsylvania.
This is not OK — and his crowd even knows it. Name slinging & disrespect.
Is this what you want running your country?
pic.twitter.com/JCV6tvdrAI— Morgan J. Freeman (@mjfree) October 20, 2024
La reacción de Harris no tardó en llegar, y afirmó que el magnate "se está volviendo cada vez más inestable y desquiciado". "Creo que el pueblo estadounidense lo está viendo en tiempo real", aseveró Harris a la prensa antes en Detroit (Míchigan). "Los ciudadanos merecen algo mejor que alguien que realmente parece inestable", añadió.
La vicepresidenta y candidata demócrata al Despacho Oval también señaló que el comportamiento del exmandatario "degrada" la Presidencia de Estados Unidos y que "el pueblo estadounidense se merece algo mucho mejor". "Donald Trump no debería volver a ponerse detrás del sello de presidente, no se ha ganado el derecho y por eso va a perder", afirmó. Para Harris, Trump debería establecer un estándar no solo nacional, sino a nivel internacional.
Donald Trump should never again stand behind the seal of the President of the United States.pic.twitter.com/9zIqfsTjdj
— Kamala Harris (@KamalaHarris) October 20, 2024
El expresidente y candidato republicano no solo cargó contra la vicepresidenta, sino que tachó de "enemigos internos" a los demócratas Adam Schiff, miembro de la Cámara de Representantes y ahora candidato al Senado, y Nancy Pelosi, expresidenta de la Cámara de Representantes. Al ser preguntado en Fox News por sus recientes declaraciones en las que acusaba a los estadounidenses que no lo votan de ser "enemigos internos". "Creo que eso es exacto. Son gente mala", reafirmó el republicano antes de afirmar que Schiff es "un político corrupto". Sobre Pelosi, volvió a decir que no protegió el Capitolio durante el asalto del 6 de enero de 2021.
IMAGEN: La vicepresidenta de EEUU y candidata demócrata a la Presidencia, Kamala Harris.
Donald Trump logra ventaja en las encuestas
Todo ello en un contexto en el que las encuestas, ajustadísimas, han empezado a dar cierta ventaja al republicano. El expresidente está ganando terreno en los sondeos. Según el último pronóstico de la web especializada FiveThiryEight -promedio de encuestas publicadas a nivel nacional y en los estados clave-, Trump ganaría con una ligera ventaja sobre Harris, con un 52% de posibilidades de ganar los comicios del 5 de noviembre.
A pesar de que la demócrata lidera la intención de voto a nivel nacional -48,2% frente al 46,4%-, el republicano resulta más beneficiado por el Colegio Electoral, el sistema mediante el cual los estados otorgan un determinado número de votos electorales al candidato ganador. Hace dos semanas, el pronóstico del mismo portal concedía un 58% de opciones a Harris de derrotar a Trump. En esta ocasión, el porcentaje se sitúa en 47 frente a 52.
La estrategia del equipo Harris-Walz pasa ahora por tratar de arrancar votos a los republicanos recurriendo, de nuevo, a los rostros más relevantes y populares dentro de las filas demócratas. Así, los expresidentes Barack Obama (2009-2017) y Bill Clinton (1993-2001) se han sumado a la campaña en los estados bisagra y la ex primera dama Michelle Obama aparecerá por primera vez en un mítin de Harris esta misma semana.
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