De mal en peor. Los títulos de Grupo Prisa cayeron este lunes un 8,99 por ciento hasta 0,405 euros, una cifra que llegó a ser inferior durante la jornada hasta marcar el mínimo histórico de la compañía: 0,38 euros. Las dos cantidades, más allá de la exactitud de sus decimales, ponen de manifiesto que los buenos tiempos de la compañía quedan muy lejos.
En noviembre de 2011, Vozpópuli informaba de que dos acciones de Prisa valían lo que un ejemplar de El País, ahora, cinco meses después, el precio por ejemplar de El País triplica al de la acción de Grupo Prisa. El rotativo cuesta ahora 1,3 euros a diario mientras cada acción de la compañía cuesta 40 céntimos. En marzo de 2009, el precio de la acción era equiparable al de un periódico: en torno a 1,1 euros. Cierto es, no obstante, que la diferencia entre los precios sigue creciendo, además de porque el valor de los títulos baja, porque el de El País ha subió en marzo 10 céntimos, un incremento idéntico al llevado a cabo en mayo de 2008 y marzo de 2009. Hasta dicha fecha, el ejemplar suponía un euro.
En este contexto de crisis, el consejero delegado del grupo Prisa y presidente de El País, Juan Luis Cebrián, se mostró pesimista con el futuro de los medios durante su intervención en un debate sobre la crisis de la prensa en España celebrado este fin de semana. Sostuvo, tal y como informa el propio Elpaís.com, que “los diarios ya no vertebran la opinión pública”. “Si el Rey ha pedido perdón, no ha sido por los medios sino por lo que se reflejaba de él en las redes sociales”, aseveró. Según recogen varios periodistas presentes en el evento, Cebrián aseguró que “cuando me preguntan cuándo van a morir los periódicos, les digo que ya estamos muertos”.
Hace un mes, Cebrián lazó un ultimátum a su alta dirección: o se consiguen 1.000 millones de euros en los próximos meses o se fraccionará el grupo editorial y se venderán algunas de sus divisiones. "Al papel le queda menos vida de lo que algunos creen” mantuvo añadiendo que él contaba en meses y no en años el fin de la impresión tradicional. Interpelado sobre el futuro del grupo y la posibilidad del fraccionamiento que había anunciado, concluyó: “yo sí sé dónde va la compañía”.