Pocas horas después de que anunciara su intención de dejar la presidencia de Prisa en manos de Manuel Polanco, Juan Luis Cebrián ha comparecido en un desayuno informativo en el que ha vuelto a remarcar que la decisión de abandonar su cargo es personal y voluntario, y no ha estado influenciada por las presiones recibidas por parte de los accionistas críticos. De hecho, ha calificado como 'fake news' las informaciones que describieron la guerra interna del grupo. Es decir, las mismas que reconoció este miércoles en la Junta Extraordinaria de Accionistas el 'líder' de sus opositores, Joseph Oughourlian, el dueño de Amber Capital. El principal accionista de la empresa (19,28%).
Durante el acto, ha asegurado que la mayoría de los socios de Prisa -60%- ya se ha comprometido por escrito o de forma verbal a suscribir la ampliación de capital de 450 millones de euros aprobada en la Junta. Cebrián ha calificado esta operación como “muy buena” -”tiene un precio muy atractivo”- y ha afirmado que estará asegurada por una o dos grandes entidades financieras.
En contraste con lo que denunció Oughourlian este miércoles, Cebrián ha remarcado que “estaba deseando” irse, algo que precisamente le impulsó a solicitar a principios de octubre abandonar la presidencia. A su juicio, Prisa superará próximamente la larga crisis financiera que ha sufrido durante los últimos años y contará con el músculo suficiente como para invertir para mejorar sus negocios.
El todavía presidente del grupo ha recordado que el origen de estos problemas económicos tuvo lugar hace una década, cuando se presentaron, a la par, la revolución tecnológica de los medios de comunicación y la crisis económica. Entonces, la deuda de Prisa llegó a alcanzar los 5.300 millones de euros. “Entonces, nos pilló la quiebra de Lehmann Brothers y fuimos tan torpes de no predecirlo, como los jefes de Estado de varios países”, ha ironizado.
El escritor y académico también se ha pronunciado sobre el papel que interpretará en Prisa una vez suelte el timón. A este respecto, ha incidido en que la fundación que pretende crear para debatir sobre la línea editorial de sus medios de comunicación ya ha obtenido el visto bueno del Consejo de Administración de El País y que próximamente se trasladará la propuesta al órgano de gobierno del grupo. Allí, se espera que la oposición sea fuerte, según avanzaron este miércoles algunos de sus accionistas.
Cebrián se ha mostrado esperanzado con respecto a las oportunidades de la que gozarán en el futuro los medios de comunicación como consecuencia de la revolución tecnológica. Ahora bien, ha manifestado que internet ha dejado a la prensa escrita “en una situación terminal” y a las cabeceras tradicionales, acorraladas por el fenómeno de las 'fake news', que -en su opinión- ha sido apoyado por varias potencias internacionales dentro del marco de la 'guerra cibernética'.