Prisa dedicó una buena parte de sus esfuerzos en 2021 a reorganizar su negocio de medios de comunicación. Ese proceso implicó una reforma de su estructura de mando que estuvo acompañada de la salida de algunos de sus periodistas más veteranos. Entre ellos, Augusto Delkáder, Manuel Mirat y Antonio Caño.
El plan de reestructuración también ha implicado la fusión de varias de las sociedades del grupo alrededor de la empresa Prisa Media, que es la que aglutinará los activos de sus periódicos y radios.
Según los registros del Boletín Oficial del Registro Mercantil, el pasado 3 de enero se aprobó la fusión de las empresas Prisa Noticias S.L.U. –que editaba sus periódicos-, Prisa Tecnología S.L.U. y Prisa Brand Solutions S.L.U., que, a su vez, han sido absorbidas por Prisa Media. Es decir, por la que se ha convertido en la empresa de ‘cabecera’ de la división de medios de comunicación.
Esta maniobra societaria fue aprobada el pasado 1 de diciembre por los consejos de administración de estas cuatro sociedades y ratificada la pasada semana; e implicará la disolución de las empresas absorbidas, añade el BORME.
La 'nueva' Santillana
La reorganización de 2021 también han afectado a Santillana, que está comandada desde el pasado julio por Francisco Cuadrado. Ahora bien, todavía es una incógnita si esta división tendrá en el futuro plena independencia en el proceso de toma de decisiones o si, como hasta ahora, será el Consejo de Administración de Prisa el que marque la línea a seguir.
Porque el plan inicial –anunciado en septiembre de 2020- pasaba porque Prisa Media y Santillana se gestionaran de manera totalmente autónoma, mientras se estudiaba la posible salida a Bolsa de la división de educación digital.
Hay que recordar que el grupo de medios de comunicación español se ha deshecho durante los últimos años de algunos activos importantes de Santillana. En 2014, vendió Ediciones Generales a Penguin Random House por 72 millones de euros, mientras que, en 2020, se deshizo del negocio de la educación en España a cambio de 465 millones de euros. La compradora fue la finlandesa Sanoma.
Otras medidas de Prisa
Mientras el Consejo de Prisa Media efectuaba la reorganización de sus empresas, se han materializado una serie de decisiones relacionadas con los medios de comunicación del grupo. Sin ir más lejos, hace unas semanas se anunciaba el cierre de la edición en Brasil de El País; mientras que, en las próximas semanas, se iniciará la salida de entre 30 y 40 periodistas del diario –que será escalonada- que se han acogido a un plan de prejubilaciones voluntarias.
Por otra parte, tal y como adelantó Vozpópuli el pasado 1 de diciembre, el alto mando del grupo ha negociado durante los últimos meses la refinanciación de su deuda, que asciende a 855 millones de euros y de la cual es titular, en su mayoría, la firma estadounidense Pimco.
El proceso prevé cerrarse próximamente e implicará una suavización de las condiciones de pago de la deuda. Conviene recordar que la deuda de Prisa llegó a ser superior a los 5.000 millones de euros y que durante los últimos años ha tenido que ser refinanciada en varias ocasiones, ante la imposibilidad de la compañía para afrontar algunos vencimientos.
Prisa no se enfrenta a una situación de este tipo a corto plazo –tal y como figura en los registros de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV)-, pero en 2023 deberá abonar 147 millones de euros en créditos (línea superior senior), mientras que en 2025 tendrá que pagar un total de 753 millones.