Pagar a los trabajadores de Radiotelevisión Española y a los afectados por el Expediente de Regulación de Empleo de 2006 le costará a las arcas públicas casi 480 millones de euros el año que viene. El proyecto de Presupuestos Generales del Estado, presentado el pasado martes, incluye una partida de 379,1 millones destinada a abonar los emolumentos a los 6.400 trabajadores de este medio de comunicación, la cual es 153 millones superior a la de Atresmedia y Mediaset juntas y compromete el 38 % del presupuesto de la corporación. A este desembolso hay que unir el que se destinará a las nóminas de los empleados que fueron despedidos de la casa hace casi una década, que será de casi 100 millones de euros.
Esta corporación de radio y televisión dispondrá el próximo año de 974 millones de euros, una cantidad que será 25 millones de euros superior a la del ejercicio anterior, pero que estará muy por debajo de los 1.200 millones que se estimó que necesitaba anualmente RTVE para ser competitiva y no incurrir en déficit cuando se aprobó su ley de financiación en 2009. Del total del dinero disponible, destinará 379,1 millones a pagar a sus empleados, es decir, un 2 % más que en 2015, algo que se debe al incremento de las bases de cotización de la Seguridad Social, a la inclusión en esta partida del gasto de personal de las corresponsalías y al aumento de la cuantía de los complementos de antigüedad que debe recibir una parte de sus empleados, según las exigencias de su convenio.
El gasto en personal de RTVE será un 2 % superior en 2016 y ascenderá a 379 millones de euros
En los últimos años, el coste de la plantilla no ha parado de incrementarse y se ha convertido en todo un ancla para una corporación con un presupuesto que en 2012 descendió un 22 % de golpe y que en los ejercicios posteriores ha estado prácticamente congelado. En 2013, sus máximos responsables rubricaron con los sindicatos un nuevo convenio colectivo que pretendía reducir en 28,5 millones de euros la carga salarial de la empresa a partir de algunos recortes en las nóminas de los empleados. Un año antes, la partida en gasto de personal había sido de 380 millones. El año que viene, sólo será un millón inferior, lo que escenifica el escaso éxito de esta medida.
El convenio de esta empresa caducará en 2016. Los sindicatos ya han anunciado que en las negociaciones tratarán de recuperar los conceptos de su salario a los que renunciaron hace dos años, ante las perspectivas de recuperación económica de España. Fuentes oficiales de la empresa han incidido en que aún no han definido la postura con la que se sentarán a la mesa de diálogo con los trabajadores, pero la lógica invita a pensar que tratarán de evitar que el gasto en personal se dispare.
No hay que olvidar que la plantilla de la televisión pública española es de 6.400 trabajadores, lo que representa algo más del doble que la suma de las que poseen Atresmedia (1.736 personas) y Mediaset (1.274). Su desembolso medio por empleado es de 59.218 euros al año.
El alto coste del Expediente de Regulación de Empleo de 2006
A los 379,1 millones de euros que pagará en sueldos la corporación RTVE, hay que sumar los 99 millones que tendrá que abonar el Estado a los trabajadores que fueron despedidos en el ERE de 2006. Esta cantidad se imputa al antiguo ente público, en proceso de desmantelamiento, pero también procede de las arcas públicas. Su importe será algo más de 25 millones de euros inferior al del año pasado debido a que una parte de los empleados abandonarán este Expediente como consecuencia de su jubilación.
Pagar a los afectados por el ERE de RTVE supondrá un desembolso de 99 millones de euros el año que viene
Este proceso ha estado rodeado de polémica desde su puesta en marcha, bajo el mandato de Carmen Caffarel en Televisión Española y de Pedro Solbes en el Ministerio de Economía. Entre otras cosas, porque su coste total será de 1.722 millones de euros. De hecho, el Tribunal de Cuentas ha denunciado recientemente lo poco “restrictivos” que fueron los ideólogos de esta medida laboral con los complementos salariales recogidos en su Plan de Rentas, pues los incluye hasta de 38 tipos, algunos de ellos difíciles de justificar.
También ha criticado la subida salarial anual del 2,5 % que pactó RTVE con los 4.150 despedidos, complementaria a la que compensa cada 1 de enero el incremento del IPC y que entre 2007 y 2022 tendrá un coste por cada uno de los empleados que se acogió a este plan de bajas de entre 12.816 y 157.897 euros. Esto supone que un periodista que dejara el ente público en 2006 cobre actualmente un sueldo más alto que si aún prestara sus servicios para la radiotelevisión pública.
