China ha desarrollado en secreto una potente herramienta para destruir silenciosamente las neuronas de los occidentales y debilitarlos intelectualmente de cara a una potencial guerra futura, su nombre es TikTok. Desde su aparición en 2016, la app más descargada del mundo ha cambiado nuestra forma de ser y de estar en la vida. Si a mí generación ya le costaba mantener la atención viendo una película, a las nuevas generaciones directamente le cuesta mantenerla con un vídeo de más de 10 segundos. Son esclavos del scroll infinito, deslizan el dedo y ya tienen un vídeo nuevo mientras su mente termina de procesar el antiguo. Una coreografía, una chica poniendo morritos o el chiste más gañán que hayas escuchado en tu vida. El noveno círculo del infierno de Dante.
El gobierno de Estados Unidos ya prepara una ley para prohibir TikTok conscientes del peligro de que, si en 2030 hay una guerra, China pueda chantajear a los generales americanos con difundir los vídeos que grabaron con 16 años bailando Becky G. En 7 años la app se ha convertido en una máquina generadora de personajes variopintos, buenos y malos. Ha ocupado el papel que antes tenía Telecinco. Este año se han hecho famosos Los Colgaos, tres chavales de un pueblo de Córdoba que triunfan con vídeos pegando balonazos al larguero y soltando ‘factos’ sobre fútbol. Tres seres puros procedentes de un espacio a donde todavía no ha llegado el virus woke y que mantienen viva la adolescencia de las collejas y las tardes tirados en la calle.
Otro que arrasa es Llados Fitness, un tipo que apareció de la nada presentándose como mentor y coach, es decir ‘vendehumos’, con un discurso hipersuperficial sobre tener Lamborguinis y relojes de 5000€. El culturista se ha montado una especie de secta para jóvenes sin rumbo en la que por un módico precio, Llados te pone a hacer burpees 16 horas diarias. Todo su club huele a cárcel y a estafa de Ponzi que tira para atrás. Si Llados representa el TikTok de derechas, las Verdunch son el TikTok de izquierdas. Dos chicas que hacen reportajes para Playz y que han puesto de moda expresiones como ‘potaxie’, ‘fife’ y ‘amorch’.
En el Tuitopía de hoy repaso los mejores tweets de la semana pero haciéndole un hueco a TikTok antes de que la prohiban en occidente como arma de destrucción masiva.
