En los 90 fueron las modelos, en los 2000, los actores, y ahora le toca el turno a los deportistas. Los profesionales del deporte tienen todos los requisitos necesarios para convertirse en estrellas inmediatas: buena forma física, capacidad de superación, ambición desmedida y unas cuentas corrientes que son la envidia de todos los aficionados. Poseen los mejores coches, las mejores casas y salen con las mejores compañías, todo lo que los demás mortales desearíamos. Y, evidentemente, las marcas saben ver el negocio. El problema es que el mercado está copado por los futbolistas. O mejor dicho, “estaba”, ya que los tenistas han empezado a comerles terreno. Los triunfos de Rafa Nadal, Roger Federer y Novak Djokovic han iluminado la mente de los responsables comerciales al grito de: “¡Ponga un tenista en su vida!”. Y el negocio parece que funciona.
Un cambio innovador
La revista norteamericana ESPN vio como sus ventas caían en picado por culpa de la recesión económica y la crisis de las publicaciones en papel, así que pensó que su mejor baza sería contar con algunas de las estrellas del deporte y proponerles un posado con poca presencia de ropa. Bautizaron el número como The Body Issue y se sacaron una sección de la manga donde una serie de representantes de diversas disciplinas se dejaban fotografiar como su madre les trajo al mundo. Y resultó. Los responsables de la revista lanzaron al mercado seis portadas con seis deportistas diferentes y convirtieron el número en un éxito, destacando por encima de todas la que contaba con la tenista Serena Williams como reclamo. Desde entonces, ESPN dedica un número al año a desnudar a deportistas para alegría de muchos.
Desde luego, a los tenistas les gusta desnudarse.
Los últimos en subirse al carro han sido los tenistas Venus Williams, que cogió el testigo de su hermana cinco años después, y Tomáš Berdych, como aparece en el tweet de ESPN Magazine. Ambos han sido los elegidos como cabeza de cartel para el número de 2014, que se publicará en unos días. ¿Es casualidad que se trate de tenistas? Desde luego que no. De entre todas las posibilidades, ESPN ha apostado por los que más van a llamar la atención y no se ha equivocado. Además, por sus páginas ya han pasado otros nombres como el americano John Isner, la polaca Agnieszka Radwańska, la rusa Vera Zvonareva, la eslovaca Daniela Hantuchová o la holandesa Esther Vergeer, con cuatro medallas de oro en los Juegos Paralímpicos. Desde luego, a los tenistas les gusta desnudarse.
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Desnudos solidarios
Otros tenistas también se atreven a desnudarse, aunque para causas más solidarias. A través de la campaña Everyman Male Cancer, la edición británica de Cosmopolitan trata de recaudar fondos para la lucha contra el cáncer de testículos y próstata y, para ello, recluta a hombres famosos dispuestos a desnudarse para la causa. Por sus páginas centrales ya han pasado los tenistas españoles Fernando Verdasco y Tommy Robredo, además del francés Jo-Wilfried Tsonga. El último en prestar su imagen -y su escultural cuerpo- para luchar contra el cáncer ha sido el italiano Fabio Fognini, aunque tendremos que esperar al número de agosto para ver el resultado de las fotos y admirar su anatomía.
Attached my photo for @CosmopolitanUK to raise awareness of male cancer #ATP pic.twitter.com/QriaE3wgrB
— Fabio Fognini (@fabiofogna) July 3, 2014
Curiosamente, los tenistas españoles parecen ser de los más dados a quitarse la ropa. Verdasco y Robredo ya lo hicieron -aunque no de forma integral- en la edición española de Elle, donde posaron acompañados de David Ferrer, Juan Carlos Ferrero, Nicolás Almagro y Feliciano López, para hablar del buen ambiente que reina en el tenis español. Eso sí, se quitaron la camiseta para hacerlo de forma más distendida. Nadal, que juega en otra liga, también aceptó desnudarse, pero lo hizo con la modelo Bar Refaeli y para Georgio Armani. Ya saben, poder y lujo a partes iguales.
Un regalo para sus seguidores
Y es que, aunque se trate de deportistas que no viven exclusivamente de su imagen, cada vez son más importantes las estrategias para darse a conocer. Andy Murray, otro de los grandes del tenis, no dudó en desnudarse para un vídeo promocional donde pedía más seguidores en Twitter y Facebook. Murray declaró haberse sentido muy incómodo durante el rodaje, ya que tenía que ducharse desnudo delante de una desconocida, pero tampoco pensó en evitarse el mal trago. ¿Cuánto tardaremos en verles en portada de Vogue como ya ha hecho Cristiano Ronaldo? Pueden ir apostando.
