Tómense un respiro, mantengan atenta la mirada y piénsenlo tres segundos antes de decir una bobería. Cada vez que escuchen la palabra crispación, polarización o confrontación miren la jeta de quien la pronuncia y échense a reír. La autodenominada compañía de bomberos voluntarios se postula para ejercer de incendiarios al grito de “Hay que acabar con el acoso a la verdad”. Hemos entrado en el proceloso territorio del cinismo institucional que consiste en no responder a nada de lo que se pregunta porque tú, preguntón, eres culpable de comportamientos similares. Y si no lo eres tú, lo será tu familia y si no habrás de recordar aquella vez que dijiste a un íntimo -que ha dejado de serlo- lo que te petaba sin tener en cuenta que un día lo bajarían de la nube. Allí donde todo se deposita a la espera del pocero que lo saque a la luz.
Ha nacido una nueva profesión: pocero de redes. Tiene futuro y sobre todo es el rey del presente. Contamina tanto más que las energías fósiles y es un protagonista excepcional del cambio climático. Las temperaturas suben y los acuíferos se agotan pero las redes se desbordan y arrasan. Las informaciones que anteayer prodigaban las agencias de noticias se van sustituyendo por los impactos que suministran las redes, de tal modo que buena parte de la realidad pasa supuestamente por las opiniones de un chisgarabís que alimenta luego a los medios de comunicación, gracias a que sus seguidores se cuentan por millares. Un rebaño al que debe pastorear con cierta complacencia para que le consientan cuidarlos como haría un veterano criador de ovejas. Centenares de cabezas de ganado, fieles y pastueñas, que le sigue en las redes. Un éxito de la era tecnológica, porque permite la democratización de las ocurrencias y de paso alimenta el narcisismo que todos llevamos dentro pero que no nos consienten expresar con el aplomo de majaderos instrumentales.
Sin eso sería incomprensible entender que un puñado de arrebatados de la fe se concentraran a las puertas de la sede del PSOE en Ferraz para rezar rosarios y darle trompadas a un monigote. Tampoco que se manifiesten ante la del PP en Génova llamando “Asesina” a la presidente de la Comunidad de Madrid. La chusma partidaria tiene una larga historia entre nosotros desde Fernando VII y los trágalas a los liberales, incluso antes, cuando a la incitación del clero arrasaron contra Esquilache por un quítame allá unas capas. Sin embargo lo de ahora se recubre de objetividad, de derechos inalienables a la verdad y bajo el patronazgo institucional.
Ha nacido una nueva profesión: pocero de redes. Tiene futuro y sobre todo es el rey del presente
Hay que reconocerle a Pedro Sánchez el dudoso mérito de haber invertido las reglas del juego. Hasta que llegó él había un principio, aceptado a duras penas pero vigente, según el cual el gobierno se dedicaba a gobernar y la oposición a cumplir su ambición de alternativa. No era una línea roja, como se diría ahora con una expresión de guardia urbano que se asimila como alta definición política y que la verdad sea dicha no expresa nada que no sea una sutil manipulación que oculta el meollo del asunto, es decir, que quién traza las líneas rojas las pone a su conveniencia para impedir que el contrario se pueda mover a su gusto. Las líneas rojas en política las traza el que manda y para uso del que obedece.
De tanto mentir al electorado haciendo lo contrario de lo que promete, acaba resultando un galimatías donde la realidad está al servicio de las redes y las redes a disposición del que las tiende. Si promueve una amnistía después de negarla con reiteración y hasta alevosía, aprovecha la red que le tiende un periodista adicto contando una conversación off-the-record en la que Feijoo reconoce que estudió la Amnistía y la rechazó -algo que sería meritorio por más que fuera inútil- y de ahí sale una campaña montada gracias a esa confidencia que suministró El País y que saltó la línea roja de la decencia periodística, tan castigada últimamente. De ese modo no se discutía la Amnistía del Gobierno sino la Amnistía frustrada del PP. Pasto para las redes.
De tanto mentir al electorado haciendo lo contrario de lo que promete, acaba resultando un galimatías donde la realidad está al servicio de las redes y las redes a disposición del que las tiende
Aparece de manera inmisericorde la más estrafalaria de las corrupciones, la de Koldo, Ábalos, Tito Berni y sus compadres; un torpedo que no disparó la oposición pero que amenaza con volar el buque insignia gubernamental. El departamento de poceros del Gobierno encuentra irregularidades flagrantes en las tributaciones del último novio de la presidente de la Comunidad de Madrid y se monta un escándalo de líneas rojas, amarillas y azules, que resume con su locuacidad característica la ceceante viceministra de Hacienda, médico de profesión: la señora Ayuso se acuesta en la cama de una casa que ha sido pagada con dinero ilícito. Lo de Asesina es reciente.
Me avergüenza tener que decirlo pero es un peaje que hoy día hay que pagar. Ni voto al PP, ni le votaré en mi vida porque las líneas rojas me las pongo yo; soy un abonado al inútil y simbólico voto en blanco y no tengo por qué dar más explicaciones para poder seguir escribiendo. Cuando leo en un editorial de “El País” - “ostentóreo”, que hubiera dicho aquel eminente pocero adelantado, Jesús Gil y Gil- la denuncia del “periodismo ponzoñoso que está dinamitando la convivencia”, no puedo ni reírles la gracia. La unión de la ponzoña, la dinamita y la convivencia, era vocabulario común de los editorialistas de un tiempo que es preferible no evocar. Lo nuestro es algo menos pomposo y más rutinario. Se reduce a trabajar en el barro que crearon los lodos del poder y eso hace harto difícil moverse con cierta dignidad, eliminando el descaro y la desvergüenza.
Ni voto al PP, ni le votaré en mi vida porque las líneas rojas me las pongo yo; soy un abonado al inútil y simbólico voto en blanco y no tengo por qué dar más explicaciones para poder seguir escribiendo
Cuando los poderes se dedican a sembrar mierda no son ellos quienes lo desparraman; necesitan gentes con voluntad y ambición, ni siquiera fe, que se encargan de abrir la derrama y emporcarlo todo. Los espíritus bondadosos confían en que se baje la tensión -la crispación, dicen ellos- y que volvamos a normalizar las anomalías. Me temo que es imposible, porque cuando quien detenta el gobierno está dispuesto a las mayores tropelías con tal de mantenerlo no es fácil reconducir la situación. Entre otras cosas porque no es esa su intención. La única idea motriz que alimentó Rodríguez Zapatero y que llegó a enunciar entre los íntimos se resumía a esto: “nos viene bien la crispación”. El barro lo confunde todo y no permite distinguir las diferencias, no digamos los matices. Bienvenidos, poceros de las redes.
doblaJeclasico
¡Cuanta razón tiene Risto Mejide ¡ en el video que circula por las Redes Sociales, diciendo : ¡Marchense todos y no dejen ni rastro de si! El escenario de sainete que están dando todos y todas es tan vergonzante, denigrante y falto total de clase política, de educación en las formas que por otra parte los hechos DELATAN que han entrado en la política NO para mejorar a los ciudadanos sino para COLOCARSE y de paso FORRARSE, ellos y sus entornos. En este articulo salen a escena la dama, dama de alta cuna …. Y La Yoli, de vestimenta diaria con su ¿sonrisa? Permanente de falsedad e hipocresía. Cuando conviene abrazos y risas, cuando no puñaladas traperas. Y al mando de todo ¡ese equipazo! Está Pedro El Mentiroso del reino, la andaluza mitinesca y el sosote pero dócil Bolaños. ¡Ah! Y con dos matones de pelea . el tal Puente y el Patxi. No sigo, porque me dan ganas de v.. O asi me lo parece.
Variopinto
Como ya se ha publicado, resulta que un perfil que se dedicaba a loar por cierta red social lo bello que es nuestro Narciso, lo gestiona una persona de partido que tiene un salario público. Mujer elogiando a hombre (lo contrario es hoy perseguible). Los poceros, también los de las redes, siempre están enganchados de las mismas ubres. Casualidad. Me temo que mientras el señor presidente de gobierno siga prefiriendo el pocerio antes que dar explicaciones de los trabajos privados de su esposa mientra el ha estado en su cargo, será precisamente el presidente de gobierno (y esposo) quien coloque a Begoña Gómez ante una comisión de investigación en el Congreso. Terminó. No seré yo quien le de lecciones de como o a quien votar pero leo que comparte la excepcionalidad actual. Por eso, me permito un dicho: a base de hacer lo mismo se alcanza siempre el mismo final.
fraytdt
Para mi, la alusión histórica al Motín sobre Esquilache es lo más interesante de su artículo de hoy. Lo menos, por innecesario, inoportuno y, como ya han dicho antes, no pedido: el color de su voto. Desde el respeto al derecho de todos a votar en el sentido que mejor parezca e incluso a no votar, considero que no actuar positivamente cuando se nos llama a participar políticamente; es decir, no definirse en el momento de acudir a las urnas, es una muestra palmaria de la falta de interés en que se corrijan los problemas que en cada momento nos afectan y, por otra parte, soy de la opinión de que no contribuir con nuestro voto disminuye el derecho a protestar contra las decisiones que tome el gobierno de turno sea del color que sea; pues la indefinición puede considerarse como falta de interés en los asuntos que nos afectan a todos. Nuestro derecho a opinar sale reforzado con el apoyo a quien consideremos que puede tomar las mejores decisiones para todos. Por el contrario, la posición equidistante lo debilita. Así que le sugiero que deje de lado "al inútil y simbólico voto en blanco" y vista su voto de color, aunque no sea a favor del PP.
1000ioss
Si la gente vota a Feijoo sabe que está votando a un partido que es la viva imagen del psoe. Me ha gustado mucho la frase de "El pp es el psoe, dos años después". Eso es así y es evidente. La clara política seguidista de Rajoy a las políticas de ZP causó primero la irrupción más moderada de C's y posteriormente la más conservadora de Vox. Pero parece que a la gente le gusta más el pp, el perfecto compañero de viaje del psoe. No hay más que leer las obras y afirmaciones que hace Esteban González Pons, hombre de confianza de Feijoo, cualquiera que no estuviera al día en política española dudaría si es del pp o del psoe.
Chus
"De tanto mentir al electorado haciendo lo contrario de lo que promete, acaba resultando un galimatías donde la realidad está al servicio de las redes y las redes a disposición del que las tiende". ... Quod erat demostrandum
juanramon2007
Buen artículo aunque un poco cobarde y gremialista. Usted sabe de primera mano la connivencia entre los delincuentes de la política y los delincuentes del periodismo. Ambas bandas son responsables de muchos, muchos, muchos de los problemas y de la degradación no ya del ambiente político, sino del ambiente social y hasta familiar. Con su connivencia por pura supervivencia económica muchas empresas de medios de comunicación y sus empleados "periodistas" han traicionado su profesión y a sí mismos vendiéndose a los goavernos que nos esquilman...para dárselo a ustedes pagándose a nuestra costa la auto publicidad y propaganda.
Clearco
El amado líder ha decidido castigarnos. Todo esto del lodo y el barro no deja de ser farfolla, lo importante es el ejercito de medios, periodistas, empresarios y groupies, que han quemado sus naves en el barro del amado líder. Ya no hay vuelta atrás: si el amado líder se hunde todo el conglomerado que forma esta mafia y que coloniza los poderes del Estado van a quemar la Nación antes de perder el Poder. Van a castigarnos. Y mas clarito no nos lo pueden presentar. Al contrario que el PP de Rajoy y su bolso o ZP y sus bobadas, estos no van a emborracharse mientras suenan las Walkirias en la caída del amado líder. Estos van a quemarlo todo. "¿Arde Madrid?" pregunta el amado líder a Reyes Maroto, la de los 1.000 millones a Air Europa que la puede llevar a la cárcel junto a su amiga. "¿Arde Barcelona?" al ministro que daba cientos de millones a los de su pueblo para mascarillas mientras hace como que es español. "¿Arde el Congreso?", al monosabio y su presidenta aupada sobre menores prostituidas. ¿Arde España?, progresa adecuadamente contestan los Ferreras y Lecheros mientras acopian parné, que no es cuestión de vivir entre los escombros que van dejando.
vallecas
Permítame una pregunta D. Gregorio. ¿Cree que Sánchez está "golpeando" las instituciones para ser como Putin o Maduro para manipular la elecciones y GANAR SIEMPRE? Creo que su respuesta es NO. Si fuera si, se hubiera evitado la equidistancia (maldita equidistancia) de incluir en su artículo a los "rezadores" del rosario o su información no pedida del sentido de su voto, A mí, y supongo que al resto de lectores nos importa un carajo a quien vote usted.
Jean Vibu
Gracias por su semanal clarividencia, maestro. Seguiremos nadando, con la cabeza fuera mientras podamos, en este mar de barro y heces.
EDDDO
también lo es para Vidal-Quadras por ser ciudadanía y no votar al PP
jomeca
Y no es EN ABSOLUTO el PP el partido que ha iniciado “la guerra” de la bajada de impuestos. Hay un partido, Vox, que lleva tres años, sí, tres años, CLAMANDO por esa bajada de impuestos. Parece que con la llegada de Frijoles no hubo pasado, se hizo “tabula rasa”. La política empezó con Frijoles. Es realmente, desde el punto de vista periodístico, asqueroso, nauseabundo, soez, parcial y tendencioso. Cuando llegué al final del segundo párrafo pare de leer porque daba auténtico asco la tendencia y dirección que daba este junta letras al artículo.
EDDDO
Como usted no vota lo que quiere Fernando Savater usted para el es culpable de no ser útil, contra LO QUE EL CALIFICA del mal de España, el sanchismo
Franz Chubert
Es un artículo de opinión, y la opinión no demuestra nada. Feijó cree que para llevarse 500 o 600 mil votos del PSOE, tiene que mantener uina cierta cercanía a la gilipollez eco femi progre. Si esto, además refleja sus ideas verdaderamente, o es solo un táctica, no lo sabemos. La cuestión es lo que haga cuando llegue. A los woke se les combate también con el lenguaje. Decir que no comulgas con sus ideas pero hablar de resiliencia, sostenibilidad o sororidad es ser su cómplice. A mí, y no me avergüenza decirlo, no me importaría acabar con los paneles solares que inundan nuestros campos, o derribar los molinillos que ensucian nuestro paisaje. Prefiero que la gente tenga para comer a que disminuyan las emisiones de CO2, especialmente cuando China, Rusia y a India no piensan reducir las suyas, lo que hace nuestro "esfuerzo" un ejercicio de estupidez.