Los debates políticos entre líderes parecen pensados para la literatura. Una literatura construida en base a comentarios y escolios sobre lo que dijeron o dejaron de decir los candidatos durante los minutos de combate, con especial delectación en los gestos, las miradas, la velocidad de reacciones y el impacto que provocan los rasguños en el rostro del adversario. Durante las dos semanas previas a las elecciones y a falta de algo con mayor enjundia, los comentaristas nos devanamos los sesos a la caza de una idea irresistible o una salida de tono que nos facilite una agudeza analítica. Cuanto más se enzarcen los combatientes en hacerse brillantes e incisivos, más difícil lo tendremos para explicar los trucos de gañanes que les ha indicado esa tropa de élite con licencia para matar que damos en llamar los asesores.
El combate entre Sánchez y Feijoo no pasará a la historia por mucha literatura adjetivada que le pongamos. Hay que añadir en su descargo, que el gremio de plumillas en vigor es adicto a las redes y por tanto echa a contar todo lo que cae en ellas sin otro referente que “la memoria periodística”, una invención reciente en la que cuenta tanto la morralla como la experiencia. Si alguien recordara el debate Nixon-Kennedy, o el Mitterrand-Giscard d´Estaing, perdería el tiempo buscando en la Wikipedia. El mundo empezó ayer y la política es una antigualla para abuelos.
Acostumbrado a boxear de exhibición frente al espejo, Sánchez no calculó el riesgo de enfrentarse a un solo combate sin posibilidad de prórroga. El aspirante no puede parar de dar hostias y acosar sin darle un respiro que le consienta rehacerse e iniciar un contrataque. Como ocurre a menudo, lo más trascendente sucede fuera del cuadrilátero. Es lo que podríamos denominar los coros y danzas que rodean al espectáculo. La tropa gubernamental estaba preparada para todo menos para el ridículo, porque los gastos de la vergüenza no los paga la casa; cada cual debe administrarlos según su real saber y entender. No hay fondos para la derrota, pasa como con los ejércitos en las batallas; si se gana hay botín, si se pierde han de buscarse compensaciones que atenúen el desastre.
A veces Pedro el Grande parecía un boxeador sonado que pedía un minuto de calma para reordenar su estrategia
Pongámosles unas gotas de humor a las sesudas estupideces de las plumas de ganso. Entendamos que no es fácil hacerse a la idea de que el Gran Conseguidor, el Gran Guapo, el más rumboso, el modelo de la arrogancia, se haya metido él solito en un atolladero. Se dio la particularidad que el Presidente Sánchez extraía ejemplos de Vox en Náquera, del atentado islamista que llevó al PP no sólo a la derrota sino a la quiebra, hasta de la guerra de Irak, de las banderas de género y de caso… pero poco que hiciera referencia a los últimos cinco años. Incluso lo del Chapote que salpica más vale no tocarlo porque resulta tóxico y pegajoso. Mientras, Feijoo se enseñoreaba sobre las decadencias del presente y esas mentiras de bulto que ahora se denominan “cambios de opinión”. A veces Pedro el Grande parecía un boxeador sonado que pedía un minuto de calma para reordenar su estrategia. O quizá inventarse una donde no tenía preparada ninguna. Apalancarse en las víctimas del PP como Miguel Ángel Blanco o Gregorio Ordóñez es tan peligroso como bailar en territorio enemigo y minado. Un recurso de ataque que depende de los descendientes del victimario y nadie sabe hacia dónde se inclinan las sensibilidades íntimas, como se demostró al día siguiente del rifirrafe. O dejas que las víctimas lloren su desconsuelo o arriesgas a que te pongan perdido con las lágrimas acumuladas.
Para Javier Cercas, eminente fantasma que se mueve en el bosque de las letras, un presidente de Gobierno “que no hable inglés” está invalidado. Si lo sabrá él, que nació en Ibahernando (Extremadura), y vive en Gerona
Lo que estaba convocado como un debate entre titanes fue decayendo en restos de una farra desgreñada en la que un candidato se la jugaba y el otro venía a hacer toreo de salón con su habitual estilo imponderable. Los candidatos a duras penas se representan a sí mismos, tan inundados que van de asesores aviesos, pero los comentarios posdebate sí retratan una sociedad. Perplejos ante lo insólito, las plumas de ganso se quedaron solas y pusieron pie en pared. Para Javier Cercas, eminente fantasma que se mueve en el bosque de las letras, un presidente de Gobierno “que no hable inglés” está invalidado. Si lo sabrá él, que nació en Ibahernando (Extremadura), y vive en Gerona. Fue parco el cronista oficial, Carlos E(lordi) Cué: “el PSOE infló la idea de que iba a arrasar y eso favoreció a Feijoo”. (No fue pues responsabilidad suya sino del partido). Josep Ramoneda se salvará, como siempre, gracias a la Diputación de Barcelona -1200 millones de presupuesto- porque para eso cuenta con la inveterada “singularidad” de Cataluña. ¿Alguien osará algún día publicar el listado de subvenciones que consienten el pluriempleo del lenguaje, a lo Benjamín Prado o Ramoncín, que se estrenó en el gremio ya en el pleistoceno, con Tierno Galván de alcalde, o el inmortal García Montero, “nuestro Pemán”? Propongo un patrono de nuevo cuño que acoja a esa tan individualizada multitud. San Tezanos, por ejemplo.
En un debate televisivo de máxima audiencia el que no miente, exagera. Para comprobar el volumen del infundio deberían estar los medios, que se encarguen al día siguiente de evaluar las facturas del engaño. Nosotros no conocimos eso nunca, está fuera de nuestra tradición periodística y de las exigencias empresariales, y así puede Feijoo arremeter y ridiculizar a un presidente del gobierno que en su sentido más obvio ha perdido los papeles, si es que alguna vez los ha necesitado. Nos quedamos sin saber el volumen de las mentiras hecha excepción del talento infuso de Xavier Vidal Folch, comentarista de todo desde la Barcelona de “El País”, a quien cabe reconocer el aplomo, que no el talento, de llevar desde 1974 que conozco de su existencia, manejándose con la seguridad de acertar siempre.
Desde que le pusieron los pañales; como señorito urbano, católico progresista, maoísta, antirevisionista berroqueño, “Porki” Bandera Roja, socialista sabor mediterráneo, socialdemócrata Toni Blair…En fin, lo dejó aquí para no cansarles con el currículo que abarca todos los ámbitos, incluidos Alfonso Carlos Comín y Pascual Maragall. “Sánchez ganó a los puntos y Feijoo no sabe economía”. Tenemos una inteligencia local tan soberana, que no nos merecemos.
Confieso no obstante que lo más prodigioso del posdebate es el decreto por el que acaba de retirarse a Franco la Medalla de Oro del Trabajo que se concedió a sí mismo en 1953
Confieso no obstante que lo más prodigioso del posdebate es el decreto por el que acaba de retirarse a Franco la Medalla de Oro del Trabajo que se concedió a sí mismo en 1953. Por más que me esfuerzo, no logro encontrar el secreto de tan audaz medida radical. Feijoo tiene que estar en vilo.
Aquiles
Magnifico articulo , donde entre todo lo leído , destaco la increible fuerza de choque de periodistas Catalanes del PSC , que se destapa como lo que es ...unos mercenarios a sueldo de las jugosas subvenciones a sus medios . Supongo que el noble autor no escuchó a Julia en la Onda Cero , una rara avis gallega , pero nacionalizada Catalana por el PSC y EnComunPodem , con el VºBº de los Nacionalistas , claro ;-))
Talleyrand
El "debate" Sanchez Feijoo, no fue tal. Disparos por doquier con chuletas previas, interrupciones al contrario (para negarle o no dejarle hablar) continuas pero sublimadas sobre todo por Sancez y unos moderadores que no hicieron nada y mucho menos moderar. Ana Pastor esta del lado que esta y no se esconde y V. Valles quedo casi ahogado de segundon. Un fuego a discreccion del que no pudimos sacar ninguna conclusion, salvo que Sanchez va desnudo y esta acabado y que Feijoo es un tipo tranquilo que no sabemos si hara algo o rajoyeara otra vez, No sabemos lo que hara cada pugil si gana las elecciones por sus palabras sino por su historial previo. Sanchez seguir con su banda llevandoselo crudo con mas impuestos a los "ricos" de la clase media y alimentando a PNV y ERC con lo suyo y Feijoo intentando no molestar a la izquierda progre mientras jura que lo importante es la economia. El debate solo sirve para confirmar la caida del jerarca de la Moncloa, tambien llamado el Autocrata por los suyos (increible que haya una oposicion al psoe-sanchsita y su banda desde el mismo psoe!) Como aperitivo del 23 de este mes no esta mal aunque el plato fuerte que es la caida del demiurgo y el hundimiento de su partido falsario esta por llegar.
Norne Gaest
Según creo recordar, no ha habido un debate, sino dos. En el segundo estaban representados todas las fuerzas con grupo parlamentario propio. En mi opinión, además de por su mayor pluralismo (por tanto, representatividad) y en cuanto a mostrar el nivel de cada cual (en todos los sentidos), el segundo fue mejor.
Pontevedresa
Lo bueno del debate, aunque salga toda la murria progresista con explicaciones incomprensibles, es que los que lo hemos visto, nos hemos enterado que "el rey" está desnudo, que intelectualmente es un bluff, que desde el punto de la educación carece totalmente de ella, que solo sabe aprenderse discursos de memoria y soltar mítines e insultos a los adversarios. Ha bajado el nivel de la política española hasta el barro, y eso lo vimos todos los que no recibimos paguitas, estipendios y canongías del gobierno. El retrato es un desastre, parecía ·"El grito", así de feo.
jfuertesf
Se me acaba el vocabulario para expresar mi admiración por esta columna de opinión. Podrás estar de acuerdo, o no, con su contenido, pero hay que admitir la palpable independencia de criterio y el enfoque, siempre distinto.
vallecas
Reconozco que por mis orígenes tengo cierta ventaja. Pedro Sánchez no es "original", en mi vida he conocido a muchos como él. Todo ego, todo narcisismo, un jugador de ventaja, o sea, un cobarde. Además el tiene una desventaja particular que se ha mostrado a última hora, en el momento más inoportuno. Es muy, muy contraproducente ser mas tonto de lo que pareces.