Al españolito medio le dijeron que mantener los escaparates encendidos más allá de las diez de la noche era sinónimo de insolidaridad y los apagó. Lo contrario -además de merecedor de una multa- hubiera sido un acto de deslealtad con los pobres alemanes, checos y polacos, que dependen del gas ruso y temen que Putin les cierre definitivamente el grifo. Porque al europeo medio le aseguraron que las sanciones a Moscú eran necesarias para frenar a un sátrapa y, aunque no le advirtieron de las consecuencias, las aceptó con resignación a posteriori.
Hoy luce en varios comercios un cartel que afirma: “Este es un establecimiento comprometido con el ahorro energético”. El socialismo más voraz se escuda siempre en ese peculiar concepto de 'solidaridad' para devorar el bienestar del pueblo. Yo apoyo esta causa o la otra. El de al lado, no. Por tanto, es insolidario, derrochón y mala persona. Así nos va.
Debe ser fácil gobernar cuando se encuentran tan pocas trabas para imponer el relato, incluso cuando contiene renglones zigzagueantes. Alguien debió darse cuenta del grado de estupidez colectiva en abril de 2020, cuando los ciudadanos llamaban a la policía porque el vecino había bajado a fumarse un cigarro y había violado el enclaustramiento. Las hubo peores en esas fechas... Basta con recordar la idea de los más siniestros asesores de Moncloa, que dejaron caer la posibilidad de que el Gobierno creara Arcas de Noé para internar a infectados leves de covid. Las críticas a esa mamarrachada prácticamente ni se escucharon. La gente traga con todo.
España y el ecologismo
Tampoco aflora la indignación cuando aparece un portavoz climático en televisión y anuncia, con tono soberbio, el fin del automóvil de combustión en 2030 para frenar la emergencia global de los termómetros. O cuando se imponían cierres perimetrales nacionalistas o toques de queda de dudosa eficiencia. O cuando la malhumorada jefa de prensa del PSOE es reclutada para dirigir el Hipódromo de la Zarzuela.
En el país en el que Caín se levanta cada mañana para matar a Abel y fumarse un cigarro, parece que la infamia se acepta sin mucho problema porque, pese a que implica que yo me fastidie, también se fastidia el vecino. Y santas pascuas.
Por eso se han asumido sin excesivas protestas -y menos del tibio Núñez Feijóo- las últimas medidas del decreto de ahorro energético que ha impulsado el Ejecutivo. Las ciudades lucen más oscuras en estos días, en clara sincronización con el porvenir de las nuevas generaciones de españoles. Eso disipa la alegría, la prosperidad y los beneficios.
Las ciudades lucen más oscuras en estos días, en clara sincronización con el porvenir de las nuevas generaciones de españoles
Los penosos medios patrios recitan las restricciones como papagayos y las justifican señalando a Putin, a la sequía, a los incendios, a los osos polares en bañador y a otros elementos catastrofistas. Aquí nadie pone el dedo en la llaga. ¿Qué cúmulo de malas decisiones ha llevado a esto? ¿Por qué los españoles o los europeos viven peor que hace 20 años? ¿Son las quimeras comunitarias o setentaiochistas tal cosa o hemos depositado demasiada fe en ellas? ¿De verdad había algo que celebrar tras la cumbre de la OTAN de Madrid? ¿No será que más allá de las bellas fotos del Museo Del Prado tan sólo hay aridez y degradación en un Occidente entregado a programas políticos y estratégicos ineficientes?
Nadie parece hacerse preguntas o, al menos, no demuestra afán por responderlas. Los neones y las led se apagan en las ciudades y se habla de ello en forma de anécdota. De la enésima anécdota en los últimos dos años y medio. Incluso se tira de ese 'humor resignado' tan dañino, que sirve para exponer las quejas en verso en las chirigotas, pero poco más. ¿Alguien piensa de verdad en la decadencia? Porque es el concepto que se esconde detrás de todo este dislate.
La miseria
Merece la pena zambullirse estos días en la oscuridad de La busca, de Pío Baroja, para cerciorarse de lo ganado y lo perdido; y, sobre todo, para temer lo que puede venir si los ciudadanos siguen impasibles mientras el país se desliza por el tobogán de la decadencia.
El libro recorre el Madrid miserable de principios del siglo XIX e ilustra sobre personajes para los que la comida y el techo no están asegurados, empezando por Manuel, su protagonista, a quien la mala suerte y la impulsividad le llevan al hambre y la delincuencia. A dormir en bancos de piedra, cuevas y corralas, y a hacer cola junto a vagabundos para recibir la caridad de las monjas o las marquesas. En España, hasta hace no mucho, las penurias eran cosa de las mayorías. En esas condiciones, la principal tarea diaria es sobrevivir y no hay espacio para más. Reflexionar es un lujo cuando el plato está vacío.
La comodidad y la ciudadanía se pierden poco a poco cuando la prosperidad merma y es lo que ocurre estos días en España, cuyos habitantes parecen haberse ahogado en complacencia, cinismo o excesiva confianza en que la inercia que lleva poco a poco al país hacia el lugar del mundo donde habitan los que sufren se cambiará de forma automática. Con la inflación disparada, la sanidad en la UVI, la educación, pasada por el tamiz de mediocridad que se aplica en los Estados donde los gobiernos aspiran a que no haya torres más altas que ellos para no perder sus privilegios... aquí nadie ladra. Nadie expresa displicencia de forma rotunda y argumentada.
Mientras tanto, el sistema de pensiones reclama soluciones que no llegan, lo que le carcome un poco más cada día... y los jóvenes deben invertir varios años de un salario que no cobran para adquirir una vivienda. Emprender implica convertirse en una especie de Sísifo que debe tirar, montaña arriba, de las cargas fiscales que lleva aparejadas, que pesan como una roca. E invertir en este país cada vez genera más dudas, dado que los beneficios -o lo que sea- pueden verse afectados por cualquiera de las medidas ideadas por la izquierda gubernamental para engordar ese escudo social del que se escucha hablar en los televisores de los bares de los barrios... pero que casi nadie nota.
Nada hace pensar que el rumbo del barco se vaya a enderezar... y nadie -ni siquiera el jefe de la oposición- parece dispuesto a batallar seriamente para frenar la constante decadencia del Estado. Así que en este verano de apagones y termostatos, y de crisis provocada por el desatino gubernamental, la idea que se viene a la cabeza no es tanto sobre las recetas que se aplicarán para revertir la crisis, sino cuál será el próximo ataque que recibirán los ciudadanos. ¿Encierros? ¿Pasaportes covid que duren menos de 270 días? ¿Cortes de luz de madrugada en invierno? ¿Cartillas de racionamiento?
Todo puede pasar en este país abarrotado de mansos. Las arrancadas de caballo andaluz llegaban tarde o temprano por estos lares. Pero ahora el pollino sufre de parálisis. Incluso aplaude a las ocho por la ventana mientras no le dejan salir de casa.
Hulshof
Ahá señor Arranz. No hablemos del Arranz pediodista que levanta la liebre, pero el Arranz ciudadano de a pié, que está haciendo contra todo lo que se nos viene encima?
José Alejandro Vara
Amnistía es la gran corrupción. Koldo también, pero menos. Es lo de siempre del PSOE, mangancia, mariscadas, puticlubs, cuñados y amiguetes.
Birmania
"Reflexionar es un lujo cuando el plato está vacío". Por eso Pedro quiere un país muerto de hambre, para que no piense y le permita mantenerse en el poder, viviendo como un sátrapa, "insolidario, derrochón y mala persona".
riodanubio
Arranz y Pablo Planas (Libertad digital) son los mejores articulistas de la actualidad.
Talleyrand
Pesimismo en los teoricos felices 20 del siglo XXI. Vuelta a Baroja o a Zola con Germinal.a El naturalismo ante un futuro oscuro. Como ha sido posible que en 20 años nos roben el futuro y lo que es peor el de nuestros hijos? Que ha pasado en 20 años para que como muy bien dices los españoles medios vivan muchisimo peor y nadie hable de ello? Eso podria ser motivo para uno o varios articulos y es la causa de nuestro pesimismo. Gran articulo. Sigue asi.
vallecas
España no tiene solución. Como un habitante Siciliano lo tomas o lo dejas. El porcentaje de analfabetismo funcional + ideologización es altísimo en España y PS lo sabe y lo explota. Usted dice "la gente traga con todo" cierto pero es que toda la Izquierda y Sindicatos les dicen que traguen. Se imagina que estuvieran en la oposición. La Paz Social que tenemos es un insulto a los derechos. Los "ricos", a pesar de todo, encantados con PS
Darksith1977
Lo peor, la ausencia de alternativas creíbles. Ya se dijo en 2012 que el político que quisiera reformar el país no podría optar a la reelección. Rajoy quería optar, y por eso no hizo nada. Feijoo sigue el mismo camino.
Ritor
Si señor!! Muy bien escrito sr.Arranz!! Sistema educativo paternalista crea ciudadanos aborregados, cuantos más estudios peor, y se lo dice un licenciado.
I AM
Un excelente análisis, y sin duda este es "un pais de mansos", ya se vió cuando sobre 200 muertos se dejó manipular por Ferreras y otros para cambiar su voto por mil mentiras; un país que hace eso es despreciable, y más para elegir a un idio..-perverso como ZP. Y no esperemos nada del PP, nada. Nuestros hijos deberán escupir en nuestras tumbas por haberlos sumidos en la miseria y la ignorancia, hay generación más despreciable que la de estos "mansos"= nosotros?
Fran2
Arranz escribe muy bien Es cierto que la España que hoy expone es triste, de poca esperanza, quizás real. Esta percepción la tenemos muchos en algunos momentos de nuestros días, no siempre afortunadamente. Pero en los sistemas sociales funciona el azar, un acontecimiento imprevisible (cisne negro) puede dar lugar a estructuras no previstas y realidades impensadas. La historia es opaca, se ve lo que aparece, no el guion generador de la historia. Ya veremos…
Clearco
Lo que no hay en España son élites comprometidas con la Libertad y la Nación. Ni están ni se las espera. De esta salimos, si salimos, como en el del 2 de Mayo: el pueblo en la calle y sus élites en casita guardando la ropa. Y terminamos en Fernando VII.
Tony010
Cada v a es más evidente que VOX es necesario, hace falta un partido que crea en España y apueste por una agenda soberanista como la Agenda España. El resto es oscuridad absoluta. Feijóo a la cabeza.
mariem
Sr. Arranz, sabrá o imaginará que este articulo suyo exponiendo una cruda realidad será tachado de derrotista. Ya sabe, llamar al pan, pan, y al vino, vino, tener opiniones propias no condicionadas por los relatos establecidos, todo lo que no sea asentir aplaudiendo cualquier tipo de chorradita o despropósito, será puro negacionismo, derrotismo, y algún que otro apelativo más al uso.
juanramon2007
Perdón por el lapsus temporal. La nación española tiene más de medio...MILENIO.
Cibeles
Magnífico y muy triste su artículo señor Arranz. La decadencia de Occidente ha sido programada y llevada a cabo por los mediocres y miserables políticos que la gestionan. Nos hundimos en un gris que borra la esperanza y no hay reacciones por ningún lado. Es una soberana estupidez las medidas de ahorro energético. Pero se aceptan y habrá quien las aplauda incluso.
MkGregor
Quizá el Sr. Arranz hubiera preferido ver en los escaparate aquello de "yo voto a Ayuso". Eso sí que era libertad e ilustración aunque estuvieran muriendo miles de ancianos en Madrid. Y respecto a lo de la jefa de prensa en el Hipódromo, supongo que en su momento criticaría que la ex de Rato la nombraron Jefa de Paradores Nacionales a razón de 200.000€ anuales. Pero, claro, es uno de los nuestros y no se puede criticar. Y luego dice lo de repetir como papagayos, madre mía !
Jav Alemania
Gran articulo, este tipo de articulos en EL Pais, ABC, El Mundo o La Razon son imposibles de leer
Annett
Nos gobierna la idiotez y la corrupción. Con una se enriquecen indecentes en el breve plazo que pasan por la política garantizándose un futuro seguro que no han labrado, y con otra nos construyen ingentes páginas de legislación tan coercitiva como inútil, rotondas y plazas con artilugios frutos de su vena ideológico-artística; nos privatizan las calles, las plazas, la energía, el agua, los ríos y montañas, el aire, los registros de la propiedad, la sanidad…, en general todas las fortalezas y potencias que pertenecientes a la comunidad son susceptibles de generar negocio privado. A buen postor todo recurso puede comprarse y venderse. "A quien se me enfrenta lo compro", decía el zorro de las finanzas valencianas José María Olivas. ¿Cómo puede ser que unas personas tan poco dotadas y degeneradas alcancen tales cimas de poder? Pues porque han dividido, aborregado y eliminado (o sobornado) a los grupos de crítica: sindicatos, periodistas, asociaciones de vecinos..., donde cualquier foco disidente es prontamente reprimido policial y judicialmente. Estacazo y telediario. El pueblo, la familia, la aldea común (la tierra para quien la trabaja) han muerto, no busquen ya, se vive pegado, adictos a un móvil, a una aplicación…, que por cierto no es aquí ni motivación ni afán. Propaganda y doctrina planificada, por educación.
Variopinto
Calle, calle, no les de ideas, que estos son de obligarte a bailar con la ocurrencia más gorda... Es todo el sistema el que hace aguas por todos lados. De eso sigue yendo lo de las reformas estructurales inaplazables que tiene nuestro país, y de eso sigue yendo el ver quién le pone el cascabel al gato (arañazos y rasguños mediante). En algunos casos ,como el de la reforma de las pensiones, Europa les permitio hacerla en dos actos. El primero acabó el año pasado con colgadura de medallas patrias tras dejarlo vinculado/indexado al IPC (que hoy está superando el 10%). Para la segunda parte del año, periodo por otro lado preelectoral, nos queda por saber si lo quieren hacen sostenible vía impuestos directos o vía recaudación indirecta. Porque lo malo que tiene Frankenstein es su afición por los remiendos. O sea, que la coalición y sus socios nos va a poner nuevos impuestos para intentar sostener lo insostenible demograficamente. Lo bueno del asunto es que las cuentas no pueden ser la habituales "de la vieja" con las que se despacha doña Nadie, porque se van a revisar con lupa en Europa. De ese visto bueno depende el seguir recibiendo fondos en año preelectoral. Por cierto, ya sabra que La Busca es la primera de una trilogía barojiana a la que llamó La lucha por la vida, y que continúo con Mala hierba y Aurora roja. Por si quiere seguir con la adolescencia y la madurez del protagonista.
Ganuza
Muy triste todo. Lo malo, esa sospecha cada vez más inquietante de que Feijoo es un Rajoy segunda parte. Y lo peor: que pueden volver a ganar porque hay una parte del país que está, digamos, encantada de haberse conocido.
LeonAntonio
Ya estamos ante un cambio de régimen, "de facto", así de claro.