Hoy, hace exactamente 42 años, presentaban en Bilbao el libro 'Los españoles que dejaron de serlo' los cuatro líderes políticos del País Vasco. Xabier Arzalluz del PNV, Txiki Benegas por el PSE-PSOE, Santiago Brouard (Herri Batasuna) y Mario Onaindía (Euskadiko Esquerra). Era la primera vez que se sentaban juntos y sería la única. Hablaron en castellano y euskera. Hoy todos están muertos; uno de ellos, el pediatra Brouard, asesinado por los GAL. Solo sobrevive el autor del libro, que tuvo la poco exitosa idea de contar a lectores españoles la situación que vivió Euskadi entre la guerra civil y la democracia de 1981. La medida del fracaso la dio que un libro pensado para ciudadanos en general sólo fuera leído por vascos. La presentación en Madrid que hizo don Julio Caro Baroja fue ninguneada y sólo aparecieron dos críticas periodísticas; una de Eduardo Chamorro quejándose por haber derrochado las 800 pesetas que costaba el libro y otra entusiasta del poeta Victoriano Crémer en un diario de León. Un fracaso estratégico y un éxito editorial, porque las ediciones se agotaron en el País Vasco.
En vísperas de las elecciones autonómicas del 21 de abril esta coincidencia cronológica quizá permita otra visión de una realidad que no acabamos de fijar en nuestra conciencia colectiva. Hemos pasado de la losa sangrienta del terrorismo a una mirada distante que tiene mucho de complaciente. Como ya no estamos amenazados de muerte, nos da por imaginar que la política se convierte en un tranquilizante que permite dormir y olvidarnos de todo lo que signifique hacerse preguntas sobre el camino que estamos transitando. Que los cuatro líderes políticos de 1981 hayan desaparecido es menos importante, digámoslo con descaro, que las metamorfosis que ha sufrido la sociedad vasca y sus representantes políticos. Acaso porque no han cambiado tanto y donde queremos creer que hay cambios sustanciales, sólo se perciben transformaciones que aún no tenemos idea de hacia dónde van a ir a parar.
Hoy el terrorismo se ha hecho mafioso al tiempo que la mafia se ha politizado mucho y digamos que pueden invertir al tiempo en la extorsión y en la ecología, en el crimen y en la protección de la capa de ozono
El final de ETA es irreversible, en la medida que son irreversibles las condiciones que la alimentaron. Desde que desaparece la capacidad de aterrorizar se acaba la autarquía del crimen mafioso y ese límite lo había traspasado ya ETA gracias en primer lugar a las Fuerzas de Seguridad del Estado, elemento que no suele valorarse fuera de los exlíderes de Herri Batasuna, y también al hartazgo social ante la vileza multiplicada de algunos atentados. Los asesinatos de Ordóñez y Blanco, el de Buesa, Hipercor de Barcelona, las casas cuartel de la Guardia Civil… Ser terrorista en el siglo XXI es más fácil que en la época de Mateo Morral, el anarquista que tiró la bomba al coche de Alfonso XIII. Hoy el terrorismo se ha hecho mafioso al tiempo que la mafia se ha politizado mucho y digamos que pueden invertir al tiempo en la extorsión y en la ecología, en el crimen y en la protección de la capa de ozono. (Tiene algo de obsceno contemplar a Zapatero exultante cuando le ponen la medalla oratoria de protagonista del fin de ETA).
Si se hiciera un muestreo para saber el grado de conocimiento que tiene la ciudadanía en toda España -incluido por supuesto Euskadi- de los candidatos que se presentan a las próximas elecciones autonómicas del 21 de abril nos quedaríamos de un pasmo. “¿Dígame los nombres de cuatro? Pues no sabría decirle. Sé que hay uno del PNV, que es nuevo (Imanol Pradales) y otro de EH- Bildu, aún más joven, que no recuerdo (Pello Otxandiano)”. Menos aún Eneko Andueza del PSE-PSOE o Javier de Andrés del PP. No digamos Miren Gorrotxategi (Elkarrin-Podemos) o la indetectable de Sumar que apenas suma (Alba García).
Se vota partidos no liderazgos, porque no los hay y los que están irían tan torrados a la pista de salida que mejor que se exhiban en mítines y televisiones. Se necesitará mucha cartelería y mucho podcast para que la jeta de los cabezas de lista sea reconocible. En este sentido se trata de una campaña antigua pero con la paradoja de hacerla para jóvenes y adultos de mediana edad, que son los objetivos en disputa. No deja de ser una singularidad que la pelea electoral vasca vaya a transcurrir sobre la Salud, la Vivienda y la Enseñanza quebrada. La sociedad más abierta en canal y con heridas mortales se civiliza en debatir sobre si la niña de los ojos del PNV que era Osakidetza, la Sanidad Pública, está en crisis agónica o tiene recuperación, y si la oferta de vivienda podrá colmar en buena medida una sociedad donde se atiende más a los jubilados -votantes adictos- que a los menos jóvenes -electores volubles-.
Incluso el resultado electoral más previsible está cantado a falta de unas décimas que den por presuntamente hegemónico al PNV o a EH-Bildu, coaligados imposibles que necesitaran al PSE-PSOE para formar gobierno. Cabe preguntarse si todo este discurso no tendrá su lado oscuro y las previsiones salten ante la realidad, que siempre resulta tozuda e inexplicable. Están sentadas las bases para que nada novedoso pueda suceder; los dos partidos nacionalistas dominantes apoyan al presidente del Gobierno español, incluso le sostienen, y el PSE-PSOE hace de comodín para cualquier variante del croupier encargado de darse juego.
Ni por asomo aparece el independentismo en esta campaña, todo lo más ese recurso semántico del “debate territorial” que algún día, aseguran, habrá que abordar. Quizá ha corrido tanta sangre y tanto dolor que el personal exige un respiro y un asomo de conciencia política, ahora que hay tantas amenazas en el horizonte. Algo me sugiere de que hay trampa y el juguete que exhibimos al alcance de la mano puede transformarse de nuevo en artilugio explosivo. No es cuestión de ponerse exigentes cuando la calma, por más tensa que sea y más manipulada, vuelve sin ánimo de revancha. El País Vasco ha sido de siempre tendente a la conservación. El individualismo y el descreimiento estaban penados socialmente; en eso tenía razón Bergamín cuando decía que eran los más españoles de todos.
Quizá queda la lengua. La madre acogedora de todas las batallas del nacionalismo. Se atenúa mucho durante las campañas electorales, ya sea en el País Vasco ya en Cataluña, pero luego vuelve como barómetro para medir calorías patrióticas. La Korrika de este año ha tenido el aliciente de incorporar a 36 subsaharianos a la marcha por la lengua vasca. 36 negros que han manifestado su interés por aprender euskera. Confío que también les hayan proporcionado trabajo y papeles, como a los abuelos de casi todos los candidatos electorales.
pancho
Muy significativo que el señor que firma el artículo, se digne en mencionar la candidata de Sumar, que, al menos de momento no tiene representación en vascongadas, y no la de VOX, Amaia Martínez, que sí es actualmente electa por Álava. Lo peperos, igual que los socialistas tienen la memoria muy "democrática".
Vibla
Vox de extrema derecha? Por saltarse la constitución? Por agredir a los que piensan diferente? Por ser unos corruptos y ladrones?. Debes cambiar de camello.
Casban
Muy buen articulo. Yo tampoco soy de extrema derecha pero he votado a Vox. Como muchos, me parece. El vacío que han dejado es demasiado grande. No es sólo la familia, nos quieren solos. ¿Dónde está aquello de "la unión hace la fuerza" que reclamaba la izquierda? Con la emigración intentan hacernos creer que los que vengan se van a comportar igual. No vienen para adoptar nuestros valores. Tienen los suyos, su manera de relacionarse entre ellos, mejorable claro, pero valida para ellos. Quieren seguir manteniendola pero con riquezas. Tienen la voluntad de poder seguir haciendolo. La voluntad de poder mantener su sistema de valores aquí y donde sea. Aquí todos los pasos que dan rompen los metodos que tenemos para relacionarnos entre nosotros sin darnos de hos... Hombre mujer, sexo, animales etc. todo vale. Quieren conseguir que ya no sepamos ni como somos. Quitarnos la voluntad de poder ser.
Variopinto
Es usted muy modesto, Sr. Moran. Desde su propia experiencia, no nos ha contado que, cuando hace esos 42 años le presentaron su libro, tenía otro titulo (Euskadi, 1937-1981). Hicieron bien en reeditarselo en 2003, cambiándole de paso el titulo al mismo que el del artículo de hoy, y añadiendole un esclarecedor subtitulo (Cómo y por qué Euskadi se ha convertido en la gran herida historica de España). Según leo por ahí, lo escribió dejandolo plenamente documentado. Cuenta en él el cambio de bando de 1937 en Santoña de los gudaris auténticos, los del PNV con el bando republicano. Gudaris y republicanos (progresistas, en el lenguaje cuqui actual) serían unas etiquetas muy reivindicables con las que autoidentificarse, de no haber decidido unilateralmente hacer ese cambio de bando, claro. Coincido con usted en la vergüenza que da el infame Zp cuando aparenta ser el el finalizador del conflicto con Eta. De serlo, que todos los que tenemos memoria sabemos que no, hubiera sido lo correcto que, para su recibimiento a la vía democrática, se le hubiera puesto la condición de que colaborara en aclarar todos (todos) sus atentados. Pero no, claro que no, son cosas que se prefieren dar por obciadas entre los que dicen defender los derechos humanos y los derechos de las familias de las víctimas. A ese referente progresista, ni siquiera eso se le puede reprochar. Así es como se demuestra que es un auténtico i-n-u-t-i-l.
NormaDin
"36 negros que han manifestado su interés por aprender euskera". Que les aproveche.
Talleyrand
No se obstine El Pais Vasco, Euskadi o como le quiera llamar esta acabado. Como casi toda España lo estará en breve. No tenemos hijos y los que vienen de fuera vienen con sus hábitos y eso llamado cultura. Queda poco para ver un Lehendakari negro (como en la genial Airbag) o quizás musulmán con su ramadan incluido. (En Escocia y Londres ya han superado la prueba). Todo el montaje de etnicismo nacionalista se cae por el suelo porque a parte de eso no hay nada diferenciador. La nación es la lengua y los Aurresku. Un parque temático con financiación ajena (no se pueden pagar las pensiones de los vascos sin los españoles). España también va detrás en la escapada. Solo que los españoles son realmente los menos nacionalistas de Europa. En realidad desprecian sus símbolos y son anarquistas de corazón. Apátridas que solo se unen cuando ven peligrar a sus familias, lo único importante. A los españoles les dolerá menos que la os vascos. Sin símbolos no hay naciones por las que matar. Queda el vacío. Como el que hay ahora mismo en los seminarios vascos. Aquellos que chupando rueda de la teología de la liberación se pusieron del lado de los del tiro en la nuca. Era por Euskadi. Por la patria. Sin juicio. No quedan curas porque no hay nada por lo que luchar. Ya no creen en nada. Que estupidez la provocada por las cuadrillas de hijos del PNV a partir de los años 60. Tantos muertos para nada! Tanta histeria y odio para nada! Para la autodestrucción. El sueño de la nación produce monstruos!
vallecas
La ETA está y la ETA manda. Nunca tuvieron tanto poder como ahora. Ya no necesitan MATAR para lograr su objetivo. No pudieron sacar a Euskadi de España, pero si han sacado a España de Euskadi. ¿30 años de cárcel de un asesino (60 años) para que al salir le digan que gracias y vete a tu pueblo? Venga D. Gregorio "no nos tome el pelo". Otegui y Ortuzar se reunirán para decidir quien será el lehendakari y el PSOE a obedecer lo que le manden. Nunca como ahora la dictadura-comunista-mafiosa del sueño de Euskal Herria estuvo tan cerca. ¿Recuerda el cartel con la clara alusión a ETA? Nunca la ETA tuvo tanto apoyo como ahora. Incluso la apoya el Presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.
Gorrono52
Puede ser que Eta no vuelva a matar….porque puede gobernar el Pais Vasco,y esclavizar a la poblacion….quizas no nos mate..le seremos mas utiles gratis y vivos……que ridiculez de planteamiento sr Moran!
EDDDO
Moran a ver, "castellano" es un calificativo como navarro, aunque creas que como lo escribió Cela es un idioma, no existe desde hace siglos y desde 1812 existe el idioma español. Es un apellido como Navarro Todo el resto que has escrito ya esta mal, no sirve, validando que tu no eres españolhablante, das la razón a esos que citas, y a los de plataforma per la llengua y escola catalana, donde esta Josep María Álvarez como se dejaba llamar el en tv3 y en lavanguardia, donde lo leías tu , a favor de todo por eso tenía a Bassas con el, Y Cándido tapándose la nariz. Estas reconociendo que es verdad que en la CA que vives no hay hispanos hablantes del idioma español, y que los de Escola de Todos tienen razón al denominar a los hispanos "castellanohablantes o parlantes". Tu ni te enteras. Que una niña argentina se suicidio, hace nada, tirándose por el balcón por los buenos que son esos. en Cataluña Que el año pasado a una pareja de polacos que pusieron una bandera nacional con el escudo de los colchoneros, EN EL CAMPO NUEVO, miles y miles les GRITARON "p.... español, p... España" Y LES SACARON DEL CAMPO PORQUE SOLO PUEDEN ESTAR banderas de els paissos. Y lo vieron todos los extranjeros que estuvieron en el campo nuevo entre culés, más que un club es una banda organizada, y colchoneros. Con Piqué, que no le hace ascos a los negocios con españoles de m.... como afirma cuando nadie le ve.
Ansurez
Totalmente de acuerdo el modo actual solo vale para llenar los bolsillos de los corruptos de la UEFA,que se forran sin exponer nada
Rekaldeberri
Yo hace años que me fui y ni he vuelto ni ganas tengo de volver. Mi hijos parece que comienzan a tener cierta curiosidad... Además del relato místico lo que les queda es por encima de todo la lengua. El euskera es lo que les sirve para identificarse como diferentes (mejores y especiales) y a la vez levantar barreras para el resto de españoles. Lo curioso es que el idioma de la mayoría de los vascos es el español. Sin embargo, ya hace muchos años, actividades lúdicas con fondos públicos en español eran inexistentes. Era curioso ver a los animadores en fiestas de Bilbao hablando en euskera a los críos y estos contestar en español ¿Teatro infantil? Todo en euskera, aunque ni la mayoría de los niños, no digamos los padres, se enteraran de nada. Porque el euskera en Bilbao era muy muy minoritario. No era una cuestión de franquismo, los hermanos Arana tampoco lo hablaban.