El informe del forense adscrito al Juzgado de Instrucción número 51 de Madrid, el encargado de investigar la celebración del 8-M en plena expansión del coronavirus, señala que tanto el ministro de Sanidad, Salvador Illa, como el director del Centro de Coordinación de Alertas Sanitarias, Fernando Simón, "subestimaron la gravedad" del coronavirus y "su fulminante desarrollo".
Según informa este lunes El Mundo, el documento, de 60 páginas, revela que a finales del mes de febrero "había un alto índice de sospecha de que el país iba hacia una hecatombe sanitaria y se sabía cuáles eran las medidas que había que adoptar para evitarlo". "La posibilidad de una pandemia ya estaba en el sentir de las autoridades sanitarias", añade el forense.
La jueza Carmen Rodríguez Medel está investigando la celebración de las marchas feministas del pasado 8 de marzo, un evento por el cual está imputado el delegado del Gobierno en Madrid, José Manuel Franco, por un posible delito de prevaricación.
Según relata el informe definitivo entregado a la jueza, cinco días antes de la celebración del 8-M, Salvador Illa "comunica que nos encontramos en una fase de escenario más avanzado de la epidemia, cual es la de transmisión comunitaria esporádica con varios focos en cuatro comunidades autónomas distintas".
El médico considera que en esos momentos "el virus había entrado en una fase de gran difusión dentro la población", por lo que el 3 de marzo "ya deberían haberse cancelado reuniones masivas" en España.
"La hecatombe se veía venir"
Un documento del Ministerio de Sanidad redactado en los días previos ya apuntaba que "en un escenario de transmisión esporádica en la comunidad, la cancelación de reuniones masivas antes del pico de epidemias o pandemias pueden reducir la transmisión del virus".
"Un tsunami se prevé, se sabe que va a venir porque ha existido un fenómeno previo, terremoto con epicentro en el fondo del mar, que así lo indica. La situación de hecatombe en España se veía venir. (...) Quien sabe de epidemiología, los profesionales del CCAES, y se dedica a ello domina los parámetros predictivos y no es algo imprevisible", añade el texto, señalando directamente a Fernando Simón.
También atribuye al director del CCAES una serie de declaraciones que "no se ajustan a la realidad" y que "se pronuncian en televisión en un momento crucial para la expansión de la epidemia". Simón apuntó el 23 de febrero que "en España ni hay virus ni se está transmitiendo la enfermedad", y que "en España no tuvimos más que dos casos que ahora mismo están sanos y el virus no está".
Sobre Franco
El informe también valora la actuación del delegado del Gobierno en Madrid. Recuerda que el organismo que dirige había emitido previamente unas órdenes muy claras de protección para sus trabajadores, lo cual contrasta con "haber permitido encuentros masivos de personas". "Es como cuidar a los de casa y menospreciar a los de fuera", manifiesta.
El médico afirma también que es "cierto y seguro que de haberse evitado esas manifestaciones se habría evitado una amplia difusión de la enfermedad", si bien se desconoce cuántas de las personas que acudieron a las marchas se infectaron durante las mismas.