La Ley de Protección integral a la Infancia y la adolescencia aprobada este martes en Consejo de Ministros y presentada posteriormente por el vicepresidente segundo, Pablo Iglesias, está generando tensiones entre los dos socios de la coalición, PSOE y Podemos. Ya se alzan voces en el seno del principal partido del Gobierno pidiendo modificarla en el trámite parlamentario para combatir específicamente la violencia contra las niñas y eliminar el borrado de las mismas.
La denominada Alianza contra el borrado de las mujeres, de la que forman parte dirigentes y ex dirigentes socialistas, ha hecho pública este miércoles una dura nota en la que denuncia que el área de gobierno dependiente de Iglesias, encargada de redactar la llamada Ley Rhodes, en honor al músico que la promovió, ignora la violencia sexual específica que sufren ellas desde el nacimiento "y el mayor impacto que sobre éstas tiene la violencia sexual", dentro y fuera de la familia.
Postulados "de extrema derecha"
La Alianza critica que se intenta "legalizar conceptos –como el del género como identidad- que no cuentan con aceptación social ni académica ni aportan nada a dicha ley", y avisa de que lo único que se va a conseguir con ello es reforzar "estereotipos perjudiciales que lastran la personalidad". "Los menores deben ser educados en la libertad, en la ruptura de los roles sexistas y en la aceptación de que no existen comportamientos diferenciados", añade.
"La confusión del Anteproyecto entre sexo y género niega la realidad material del sexo que está en el origen de la violencia y la discriminación que sufren las niñas y adolescentes. Este es un retroceso de años que acerca esta ley a postulados similares a los de la extrema derecha, que niega la forma de violencia que sufren las mujeres por el hecho de ser mujeres".
La Dirección Federal del PSOE ha elaborado un argumentario en el que avisa a su socio Podemos: "si se niega el sexo, se niega la desigualdad que se mide y se construye en base a este hecho biológico"
Ese comunicado llega después de que el PSOE elaborara este mismo martes un argumentario de urgencia en el que, sin mencionar específicamente a Podemos, sí deja claro que no están para nada de acuerdo en la idea de su socio de introducir en la legislación española por la puerta de atrás la denominada teoría Queer, con amplia aceptación en el movimiento LGTBIQ, que abogan por la desaparición progresiva del sexo como elemento de identidad para que sea sustituido por el género como opción individual:
La dirección socialista cree que "a las mujeres las matan por nacer mujeres, a las niñas les mutilan los
genitales, por nacer mujeres las asignan socialmente la responsabilidad de los cuidados, por nacer mujeres las casan forzosamente y las cercenan la voluntad individual, por nacer mujeres las niegan el derecho al voto, las impiden acceder a recursos y sufren los índices más altos de pobreza o precariedad, etc. En esta desigualdad estructural que supone el sexo, se basa la discriminación, la violencia machista y la ausencia de reconocimiento pleno de la ciudadanía de las mujeres y niñas".
"Si el género sustituye al sexo se desdibuja la situación de desigualdad estructural de las mujeres respecto a los hombres. Es una categoría de análisis que lleva implícita la opresión, la desigualdad y la subordinación de las mujeres respecto de los hombres. Por ello, las socialistas feministas pretendemos su abolición para conseguir la emancipación de las Y, por tanto, "si se niega el sexo, se niega la desigualdad que se mide y se construye en base a este hecho biológico".
Las feministas del PSOE -fuertemente enfrentadas a otras del partido como Carla Antonelli- junto a las de otros partidos agrupadas ahora en torno a la Alianza contra el borrado de las Mujeres, llevan un año alertando a Pedro Sánchez de que entregar el Ministerio de Igualdad a Irene Montero y a Unidas Podemos traería consigo este problema de que la teoría Queer se cuele en la legislación española.
Carmen Calvo será clave
En la sombra de ese enfrentamiento desde hace un año ha permanecido hasta ahora la vicepresidenta primera, Carmen Calvo, quien tampoco estaba de acuerdo en ceder esa competencia a Montero y a Podemos -ostentaba esa competencia en el primer Gobierno Sánchez- pero calló por disciplina de partido.
Ahora, en el PSOE se espera que tanto ella como el ministro de Justicia, Juan Carlos Campo, jueguen un papel fundamental en la tramitación parlamentaria de la Ley de protección integral a la infancia y la adolescencia para "reequilibrar" el texto en contra de la introducción de las teorías de género por la puerta de atrás, aseguran las fuentes consultadas por Vozpópuli.
"Podemos esta usando los textos legales ajenos al tema para colar las teorias del generismo Queer que dicen que tu eres lo que quieres en cada momento", asegura una de las fuentes socialistas, y eso el PSOE no lo puede consentir porque borrar el sexo de la legislación afecta a la seguridad jurídica de un país.
En Estados como Argentina o Canadá, donde eso ya se ha hecho, insisten, empieza a haber problemas en los tribunales por el subjetivismo de ciertas denuncias de género que antes eran desestimadas, pero ahora han de ser admitidas por los jueces.
