Los primeros rebrotes de coronavirus en España han sorprendido al Gobierno sin un plan alternativo al estado de alarma para decretar confinamientos selectivos. Las comunidades autónomas y los principales partidos de la oposición han pedido al Ejecutivo que acometa las reformas necesarias que permitan limitar la movilidad en caso de focos graves.
El ministro de Sanidad, Salvador Illa, ha anunciado este lunes que tres comarcas de Huesca retroceden a la fase dos del antiguo plan de 'desescalada' por sendos brotes de unos 25 contagios en total localizados en los municipios de Zaidín y Binéfar.
Pero la fase dos no existe, porque el Gobierno regional de Aragón carece de las competencias para confinar selectivamente a estas tres comarcas. Illa ha admitido que el caso de Zaidín, cuyo foco se ha detectado en una empresa hortofrutícola, es el que más preocupa a las autoridades sanitarias.
Aragón, sin competencias
El Ejecutivo aragonés ha publicado un decreto en el que adopta las medidas en el ámbito de sus competencias, como la limitación de aforos. La consejera de Salud, Sira Repollés, ha recomendado a los vecinos de estas comarcas no desplazarse salvo por causas justificadas. Pero el Gobierno autonómico, tras consultarlo con su asesoría jurídica, se ha visto obligado a reconocer en el decreto que no tiene la capacidad de prohibir la circulación.
"Se ha optado por aconsejar a los ciudadanos, en desarrollo de sus deberes generales de precaución y colaboración, que limiten sus desplazamientos desde o hacia las comarcas afectadas a supuestos justificados por circunstancias acreditables", dice el decreto.
"En cualquier caso, en virtud del principio de colaboración y atendiendo a las competencias del Estado, de resultar precisas medidas adicionales sobre limitación de la libertad de circulación, en función de la evolución epidemiológica, la autoridad sanitaria aragonesa lo trasladaría a la administración general del Estado", añade.
Los problemas que ha encontrado Aragón son una inquietud común para todas las regiones. Todas ellas han reclamado a Sanidad una solución que desvincule las restricciones de movilidad del estado de alarma. La mayoría ha pedido a Illa y al presidente Pedro Sánchez una fórmula legal que permita restringir la movilidad donde haya focos sin utilizar cada vez el estado de alarma, que España abandonó el pasado domingo después de casi 100 días.
"Estos casos de Huesca son relativamente pequeños y están controlados, pero si ocurren rebrotes como los que se están viendo en Alemania o Pekín y con las fronteras abiertas o decretamos otra vez el estado de alarma o tenemos un problema", admiten fuentes de un Gobierno autonómico, en manos del PP, a Vozpópuli.
Alternativa al estado de alarma
Una de las principales críticas de las comunidades y de partidos como el PP y Ciudadanos es la unión indisoluble que Sánchez ha hecho de la restricción de movilidad y el estado de alarma. El Gobierno asegura que respondió con ese instrumento ante una emergencia sanitaria sin precedentes. Y que el estado de alarma ha salvado vidas.
El compromiso del Ejecutivo es buscar una alternativa legal que contemple el confinamiento y las medidas más duras que se han conocido durante la pandemia, pero sin usar este artículo de la Constitución tan contundente. La aprobación de un plan B viable fue uno de los acuerdos suscritos entre el Gobierno y Ciudadanos para atar el apoyo de la formación naranja a la prórroga del estado de alarma.
La vicepresidenta Carmen Calvo anunció hace unas semanas que el Gobierno enviaría las reformas legislativas al Parlamento de forma urgente. Pero nada se sabe todavía de su contenido ni el momento elegido para enviarlas. Fuentes de la vicepresidencia consultadas por este diario no han podido precisar cuando estarán listas las reformas y cuando se enviarán al Congreso.