Un estudio de la Universidad de Harvard ha analizado y comparado las dos principales vacunas contra el coronavirus basadas en la tecnología ARN mensajero: la de Pfizer y Moderna durante el periodo donde las variantes Alfa y Delta eran las predominantes.
Las conclusiones del estudio se han publicado en el New England Journal of Medicine y se llegó a ellas después de analizar los resultados durante un periodo de 24 semanas, cuando las variantes Alfa y Delta fueron las predominantes.
Según el resultado, la vacuna de Moderna presenta un riesgo "ligeramente menor" de positivo, incluida la infección por covid-19 sintomático y hospitalización relacionada con la enfermedad, ingreso en UCI y muerte.
"Este estudio nos ha permitido detectar diferencias sutiles entre las dos vacunas. Si bien, las diferencias identificadas en el riesgo estimado fueron pequeñas en la escala absoluta, pueden ser significativas para los órganos de toma de decisiones más grandes, como los sistemas de atención médica y las organizaciones de nivel superior", ha explicado Barbra Dickerman, primera autora del estudio, investigadora e instructora en el Departamento de Epidemiología de la Escuela Chan de Harvard.
A pesar de las diferencias, Dickerman recomienda cualquier de las dos vacunas: "Dada la alta eficacia de ambas, se recomienda encarecidamente cualquiera de las dos a cualquier persona a la que se le ofrezca la opción entre ambas".
Primera comparativa
El estudio ha permitido que los investigadores comparen la efectividad de las dos vacunas en un entorno del mundo real con diversos subgrupos y en diferentes periodos de tiempo, algo que no se había demostrado hasta ahora. El gran tamaño de la población también permitió a los investigadores proporcionar estimaciones precisas para los resultados graves de la infección.
El equipo analizó los registros de salud de 219.842 veteranos estadounidenses que recibieron la vacuna de Pfizer y otro grupo de 219.842 veteranos que recibieron la vacuna de Moderna entre el 4 de enero y el 14 de mayo de 2021.
Tras estudiarlos, se dedujo que el riesgo estimado de infección fue de 5,75 por 1.000 con Pfizer y de 4,52 por 1.000 con Moderna. Los que recibieron Pfizer, tenían un 27% más de riesgo alto de infección que los que recibieron Moderna, así como un 70% de riesgo más alto de hospitalización cuando Alfa era la variante predominante.