La pretensión del ministro Arias y del Gobierno de enajenar la finca 'La Almoraima', actualmente de titularidad pública, y pasar la propiedad a manos privadas, muy probablemente extranjeras, es hacer dejación de funciones y admitir la incapacidad para construir algo positivo con esta joya de la naturaleza entre las manos.

"Hay bienes de la Jefatura de Estado de los que es normal que el Gobierno no tenga datos", ha dicho la vicepresidenta para justificar la opacidad sobre la finca de la princesa alemana. El Gobierno aprueba un endurecimiento de la ley antidopaje que, sin embargo, no considerará delito el hecho de doparse. La vicepresidenta Soraya anuncia "un paquete de medidas contra la corrupción muy ambicioso y muy profundo".