Para empezar, una mochila campera
La Onofftek Onix es especial para trekking, montañismo, senderismo y, en general, para deportes al aire libre. Realizada en un poliéster muy resistente, equipa una placa solar que alimenta de energía la batería interna de 5.200 mAh, suficiente para recargar un par de veces el móvil. Para ello, dispone de una salida USB estándar. 166 euros.
Vamos de tiendas… De campaña
La marca que presume de haber democratizado los deportes, Decathlon, tiene en su catálogo decenas de modelos de tiendas de campaña. Fíjate en la Quechua Air Seconds XL. Tiene capacidad para tres personas y su detalle técnico-curioso reside en que, para montarla, sólo tienes que inflar con una bomba de mano un arco que ejerce de estructura; luego, fijas las esquinas al suelo y ya está. Como su nombre indica, es cuestión de segundos poder disfrutar de una casa alpina. 130 euros.
Y se hizo la luz
En plan lámpara estándar, te sugerimos la Hama ID12: se pliega/despliega a modo de acordeón para ocupar muy poco y puede emitir tres tipos de iluminación (tenue, clara e intermitente). Funciona mediante tres pilas AAA (10 euros). Por otra parte, una linterna siempre es útil allí arriba. La UltraFire CREE XML T6 1000Lm resiste el agua y tiene cinco modos de luz LED. En su lado MacGyver, incluye un cortador de cables y ramas, sirena de socorro y un cabezal con pinchos para… Quién sabe (12 euros).
Calienta el túper
Qué es una acampada sin una buena fogata en torno a la que cantar, confesar pecados y calentar la comida (ya en serio, cuidado con el fuego en la montaña). Si hay posibilidad de hacerla, siempre puedes presumir de aventurero con un Encendedor de Supervivencia, que sólo precisa que lo sujetes por los bordes y, con un brusco movimiento de muñeca, el pedernal con el que está fabricado generará chispas para encender el rastrojo (12 euros). O puedes optar por el Primus Powercook, un hornillo de gas ultraportátil con 45 minutos de llama y luz por cartucho de sólo 250 gr (50 euros). Por su parte, el Bento USBLUCH7 es una bolsa de comida que, conectada a un puerto USB, mantiene los alimentos calientes (45 euros). ¿Hemos dicho USB? ¿En la montaña? Sí, la solución está en la mochila de más atrás o en el siguiente gadget.
Energía renovable
Puedes recargar esta batería autónoma enchufándola a la red eléctrica, o bien exponiéndola al sol; para esto último, cuenta con una placa solar. Dado que presenta dos salidas USB, podrás recargar gadgets en general, incluso dos a la vez. Una vez repleta de energía, ofrece 5.000 mAh de capacidad. Además, es resistente al agua e incluye linterna. 29 euros.
Kit de superviviencia
El estuche Mil-Tec incluye navaja, cable cortador, cerillas, una vela, pedernal, brújula y diversos recursos para primeros auxilios, como vendas, algodón, etc. (22 euros). Bastante más completo es el Bear Grylls Ultimate Kit, con 16 elementos entre elementos cortantes, cuerda de emergencia, kit de pesca, etc., etc. (66 euros).
Una lavadora outdoor
El fabricante de la Scrubba Wash Bag asegura que, si introduces unas prendas en su interior, añades agua y detergente, y la ‘bamboleas, durante un ratito, la ropa sale tan limpia como si hubieras utilizado una lavadora ultra-tech. El programa de prendas delicadas es manual… 59 euros.
¡Música!
Este altavoz inalámbrico te permitirá escuchar música hasta en la cima del Everest. Es el Hercules WAE Outdoor Rush, completamente estanco al polvo, sumergible hasta 1 metro y resistente a la corrosión del agua salda. 130 euros.
Para dejar constancia
Ya que estamos de aventura, una cámara de ídem, que luego nadie se cree el riesgo que hemos corrido. Los expertos en este ámbito valoran muy positivamente las cámaras AEE, y entre ellas, nos atrae el modelo Magicam S71T Touch: vídeo hasta 4K, pantalla táctil extraíble, zoom digital 10x y resistente a todo, ya sea caída/golpes, frío, calor, presión, inmersión, polvo, etc. 380 euros.
Quién dijo frío
Allí arriba, seguro que refresca de noche. Para mantener las manos calentitas, los guantes Meily alcanzan los 400 con solo conectarlos a un puerto USB (4 euros). Para los pies, Warmawear comercializa unos calcetines calefactables que ofrecen hasta 5 horas de calor mediante su petaca para las pilas incorporada (43 euros). La misma marca también te propone una pequeña almohada que hace las veces de calentador de extremidades inferiores y superiores; estirada, es un cojín (15 euros). Si hablamos de prendas grandes contra el frío, el Blauer E.H.G. es un ‘plumas conectado’ que tiene un generador que calienta unos circuitos que están distribuidos por el interior, con tres niveles de regulación (280 euros). En este ámbito de prenda técnicas, la Thermaltech te mantiene caliente porque su tejido captura los rayos ultravioletas y los convierte en calor (280 euros). Para el cuello, la marca Buff comercializa balaclavas o pasamontañas con agujeros de silicona realizados con láser, que evitan los malos olores causados por las bacterias y están preparados para el frío extremo (25 euros). Por su parte, el Zippo Hand Warmer es un no mechero que te calienta las manos durante 12 horas mediante dinámica de radiación (27 euros).
Móvil terminator
El Caterpillar CAT S60 es un smartphone especial para actividades que implican bastante riesgo y ambientes extremos. Por si se te aproximan silenciosos depredadores, incluye una cámara térmica que reconoce cuerpos y objetos que generan calor (540 euros). También indicados para aventuras outdoor son los móviles Gorila. Su última novedad, el GRV11 Gorila2, tiene una pantalla de 4,5”, cámara de 13 Mp y diversos sensores para ubicación. Puedes hablar con él en modo walkie-talkie y cuenta con botón especial SOS para pedir auxilio (299 euros).
Bebe de los charcos
Aquí tienes dos purificadores de agua válidos para beber el agua que te encuentres en la ruta. El SteriPEN Ultra asegura que elimina en un 99,9% el ADN de los virus, las bacterias o los protozoos que pueda contener el agua; y en menos de un minuto. Una recarga de su batería purifica 50 litros (100 euros). El AquaPure Traveller no es tan exhaustivo como el anterior pues está enfocado para usarlo en ríos, lagos, etc. Hasta 350 litros de agua saludable con un solo filtro (49 euros).
La inevitable multiusos
Ya sea para liberar a un mochuelo enredado en unas zarzas o para abrir la lata de sardinas, todo montañero que se precio ha de llevar una navaja multiusos. La True Utility FIXR es súper resistente (acero inoxidable de grado 420) y, a pesar de su compacidad, incluye hasta veinte herramientas, lima de uñas incluida (19 euros). Aunque siempre puedes optar por la mastodóntica Wenger, que es tan grande como la suela de un zapato debido a sus 140 funciones distintas (1.600 euros).
No te pierdas
Hay dos alternativas de GPS: autónomo y de tipo reloj. Para el primer caso, el Magellan eXplorist GC es un GPS de mano especial para geocaching, una actividad outdoor muy de moda en plan “encuentra el tesoro”. Tiene una pantalla a color de 2,2 pulgadas y una autonomía de hasta 18 horas (148 euros). En cuanto a un reloj GPS, el Garmin Fenix 3 es, ahora mismo, el objeto de deseo del mundo montañero. Directamente en él puedes definir rutas, así como te guía hacia el punto de destino y de partida. Durante la travesía, te ofrecerá información meteorológica, de altitud, presión, etc. Ya en la cabaña, sal a correr, remar o en bici con él, pues integra un monitor multipeporte. Emparejado con un móvil, recibe sus alertas (desde 410 euros). Casio no podía falta en este postureo al aire libre. El G-Shock GWG-1000-1A3ER es duro como una roca y dispone de iluminador doble, recarga solar, altímetro, brújula, barómetro y termómetro (699 euros).
Protege los ojos
Las Zeal Optics ION son unas gafas con gran protección frente a los rayos del sol y, además, cuentan con una cámara integrada para grabar las aventuras (400 euros). De tipo más ‘normal’, las Serengeti Volare, típicas gafas de sol con montura de titanio y nylon, pero con la particularidad de que son plegables. Filtran las ondas que perjudican la vista (299 euros).
Y, al final del día, una buena ducha
La Polar Bear es una ducha portátil outdoor: la cuelgas de una rama y el agua contenida en ella (hasta 20 litros) se va calentando gracias a la fuerza calórica del sol. Cuando el indicador digital te muestre la temperatura deseada, no tienes más abrir el pitorro. Se pliega en un bolsito muy compacto (21 euros).