Un robot para cocinar
Si de lo que se trata es de echar los ingredientes y seguir las instrucciones sin pensar, sin duda, el más afamado y deseado robot cocinero es ‘la’ Thermomix, cuya última versión, apellidada TM5, ha dado el salto al mundo digital mediante una pantalla táctil a color y un ‘libro’ con centenares de recetas que en realidad es una memoria flash del tamaño de una chapa. Progresa en cuanto a posibilidades de realización de los platos tanto de manera automática como manual y nada se le resiste: de principio a fin, cualquier tipo de guiso, cocido, zumo, salsa, masa, postre, etc. 1.170 euros. Con un digito menos pero en la misma línea de automatización, el Moulinex Cookeo, que es una apuesta por quienes quieren garantía de sabor pero, efectivamente, cero complicaciones. 199 euros.
Aspira que te aspira
Los iRobot Roomba son los robots aspiradores por excelencia, con muchos años y modelos en el mercado. El último es el 980, que a las cualidades reconocidas de succión en cualquier tipo de superficie –incluso moquetas y alfombras-, une la posibilidad de (des)activarla y programar su funcionando mediante una aplicación móvil. 999 euros. El último ingenio de LG en este apartado aspirador es el Hom-Bot Square Turbo+, que además de su función propia, incluye la de videovigilancia gracias a su cámara integrada. Podrás saber lo que ocurre en tu casa a través de tu móvil. Pendiente de precio. El Moneual Rydis H68Pro, por su parte, es u robot que aspira y también pasa la mopa. 480 euros.
Lava y compra por ti
La firma Whirlpool ha presentado recientemente sendos lavavajillas y lavadora que tienen multitud de programas, tratan la lencería como el mejor de los amantes, reconocen las manchas, etc. Pero su detalle curioso es que cuando advierten que el detergente y/o las pastillas de lavavajillas están a punto de agotarse, se conectan a Amazon a través de su WiFi y compran la mercancía; tú sólo tienes que esperar a recibirla en casa. El sistema no es nuevo –es una evolución del Amazon Dash Replenishment- pero estos electrodomésticos lo llevan integrado y automatizado. Consultar precios.
La lista de la compra
Los frigoríficos Family Hub de Samsung, en su gama más avanzada, incluye en su interior tres cámaras que toman fotos y te las envían a tu móvil para que sepas qué tienes y que deberías comprar. Por cierto, estas neveras presentan en su frontal una pantalla táctil de 21,5”, cuya misión es la comunicación entre la familia de la casa. ¿Acaso no es competencia del servicio doméstico dar recados también? Consultar precio. No ayuda tanto pero sí es muy chula (por eso no nos reprimimos en contártelo) la tecnología llamada Auto Door de LG, que abre la puerta del frigo cuando advierte que te acercas a él. Toda una invitación a pecar… Consultar precios.
Venga, riégame
Lo más parecido a un jardinero robot es la Parrot Pot. Se trata de una maceta que registra las variables fundamentales para el correcto desarrollo de la planta que acoja y la riega por sí sola. Para ello, se acompaña por un tanque de 2,2 litros de agua y sensores por doquier. 99 euros. Recuerda que la misma marca lanzó hace un par de años el Flower Power, un wearable para plantas con forma de tirachinas que te chiva en el móvil si el amigo vegetal necesitaba riego, abono, más/menos luz, etc. 35 euros.
¿A quién le gusta planchar?
Tu ropa sin una sola arruga cada mañana y sin esfuerzo. Para las camisas y blusas, el Siemens Dressman, que ya tiene cierto tiempo en el mercado pero aún lo puedes encontrar. Una vez colocas la prenda en un soporte superior tipo galán, el Dressman emite un potente chorro de aire caliente que hace que se infle como el muñeco de Michelin, y termina con uno de aire frío para completar el proceso. 799 euros. Para todo tipo de ropa, los armarios de planchado, para los que tu única intervención se remite a poner la falda, mantel, sábana, etc. debidamente colgada en una percha e introducirla en el, por ejemplo, Fagor Driron CP-385 X o el LG Tromm Styler. Crean un ambiente de vapor potente y calor moderado que logra, al cabo de un rato, unas telas sin arrugas. 1.800 euros.
De momento, estos son unos ejemplos de lo más parecido a un robot que hace las labores domésticas por sí solos. Todos recordamos el prototipo Home Assistant Robot, una colaboración entre Toyota y la Universidad de Tokyo, allá por el 2008. Barría, recogía los platos, lavaba la ropa… Apuntaba muy bien pero a un precio de imposible comercialización global excepto para los poseedores de papeles en Panamá.