Política

Moncloa ha incrementado un 51,3% la aportación al transporte de Barcelona mientras margina a Madrid

Desde la Comunidad de Madrid llevan meses denunciando la desigualdad en la financiación que reina entre varias regiones del país

  • Imagen de archivo de un tren de Talgo -

En los últimos meses, el estado del transporte público ha sido uno de los temas recurrentes en la política española. El empeoramiento del servicio, las constantes averías que sufren los trenes en todos los lugares del país y el anquilosamiento de las infraestructuras ha llevado este servicio a mínimos históricos. 

Por ejemplo, en Madrid, desde que arrancó el año, se han producido 951 incidencias en la red de Cercanías. Un récord que demuestra cómo se encuentra el transporte de corta y media distancia que utilizan, a diario, millones de pasajeros.

Los motivos más destacados son por averías en material móvil, con un total de 240, y en las instalaciones, superando las 400. Las líneas más afectadas han sido la C4 con 204 incidencias, C3 con 148 y la C8 con 124. La Comunidad de Madrid señala que este incremento de las incidencias viene derivado de "la escasa financiación y falta de actualización".  

Si 951 incidencias parecen muchas, que lo son, este número gana enteros si echamos la vista atrás. En 2021 se registraron 447, menos de la mitad de las actuales. En 2022, 375. El año pasado la red de Cercanías se asomó por primera vez al abismo con 710.

Fuentes del Ejecutivo regional hacen hincapié en lo importante que es la financiación, una que "lleva congelada desde 2012". El importe que el Gobierno central destina a la Comunidad de Madrid es de 126 millones, exactamente el mismo de los últimos doce años. Hace 15 años, en 2010, la aportación del Gobierno central a la financiación del transporte suponía el 15,13% del total y, sin embargo, en 2024, tan solo es el 6,3%. 

Una cantidad que enfada a Sol, más si cabe cuando comparan con otras regiones del país. Según datos a los que ha podido tener acceso Vozpópuli, el Gobierno, para la Autoridad del Transporte Metropolitano de Barcelona, desde el 2016 al 2023 ha incrementado su inversión un 51,3%.

En 2016, la aportación del Estado a este sistema de transporte era de 98 millones, sin embargo, en 2019, gracias a una enmienda a los Presupuestos de ERC, se produjo un aumento, pasando de estos 98 millones hasta los 149 que ha venido destinando en los últimos 5 años.


Por otro lado, desde el ejercicio de 2021 se ha creado una subvención nueva de 38 millones para Valencia, que en 2023 ascendió a 40 millones. Algo similar ocurrió en el caso de la subvención al transporte aéreo de las Islas Canarias, de 25 millones que se aportaba en 2017 a los 128 millones de euros en 2024, lo que se traduce en un 414% más. 

"La contribución al CRTM ha permanecido invariable, a pesar de que la aportación del estado a la financiación de autoridades del transporte público nacional se ha incrementado en un 77,6% que, como muestran los datos, se ha repartido en estas otras administraciones, siendo otra muestra más del abandono al que el Gobierno central tiene sometidos a los ciudadanos de la Comunidad de Madrid", comentan desde Sol.


Para financiar el transporte público el próximo año, la Comunidad de Madrid va a destinar 1.600 millones de euros, lo que supone el 80% del total. El Ayuntamiento de Madrid invertirá 234 millones, un 11,6%, el resto de Ayuntamientos y corporaciones locales con 29,5 millones, el 1,4%, y el Estado los 126 millones habituales. 

Óscar Puente enfría sus relaciones con Madrid

Por último, es relevante poner de manifiesto el papel que el ministro de Transportes tiene en toda esta situación. Desde que juró su cargo, Óscar Puente no ha tenido contacto alguno con el consejero de Vivienda, Transportes e Infraestructuras, Jorge Rodrigo, quien le ha enviado un total de seis cartas solicitando una reunión, tal y como han repetido desde la CAM en varias ocasiones. 

Según afirman fuentes de la Consejería, tan solo una misiva obtuvo respuesta ministerial, y fue para decir, de forma escueta, que no se reuniría con Rodrigo ni ningún miembro de la Comunidad de Madrid.

Mientras el Estado decide no apostar por una inversión fuerte en el centro neurálgico del transporte patrio, las incidencias se acumulan a decenas cada semana, provocando el hastío de millones de usuarios que no entienden el declive tan pronunciado de la red Cercanías en los últimos tiempos.

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