Samsung se ha reservado el habitualmente tranquilo mes de agosto para hacer un poco de ruido con la presentación de sus nuevos dispositivos. La compañía surcoreana, que desde hace unos años ha logrado establecer sus teléfonos como el estándar del sistema operativo móvil Android, ha dado a conocer las últimas versiones de sus dos dispositivos de bandera, el Galaxy Note 5 y el S6 Edge +, que continúan la tendencia ‘gigantista’ en cuanto a las pantallas de los teléfonos, pero manteniendo las mismas dimensiones totales e incluso reduciéndolas en unos milímetros.
El nuevo Note 5 cumple este doble requisito (pantalla más grande, dispositivo más pequeño) y aporta algunas novedades de diseño, como un diseño curvado en la parte posterior para facilitar el manejo. También viene con un S Pen renovado del que los responsables de Samsung están especialmente orgullosos y que comparan en su uso con el de un bolígrafo normal. Ahora es más fácil de extraer y se puede usar aunque la pantalla esté apagada, por lo que será más fácil tomar notas en cualquier lugar y sobre la marcha. Además, el Note 5 incorpora un teclado físico en la propia tapa del dispositivo usando la propia tapa del dispositivo.
El S6 Galaxy Edge + tenía el reto de mejorar su predecesor. Por supuesto, su pantalla con bordes curvos sigue ahí, pero mejorada con nuevas funciones, y su carcasa metálica resulta más sólida, lo que aporta al dispositivo un aire aún más robusto. El nuevo smartphone de bandera de la compañía surcoreana sigue teniendo un tamaño compacto, con una pantalla que aumenta en tamaño –igual que la del Note– hasta las 5,7 pulgadas aunque el teléfono sea más pequeño: todo con la idea de hacer unos dispositivos más multimedia que permitan retransmitir todos y cada uno de los momentos de nuestras vidas. Para ello, además, Samsung se ha aliado con Youtube y ofrecerá una aplicación llamada Live Broadcast que permite difundir a nuestros amigos lo que estamos haciendo en cada momento. A ello también ayudarán tanto su nuevo sistema de estabilización de imagen como la posibilidad de grabar vídeo con calidad 4K.
En cuanto a las especificaciones, ambos terminales comparten potencia, cámara, pantalla, etcétera. En sus tripas encontramos un procesador exynos octa-core (quad 2,1GHz + quad 1,5GHz) con tecnología de 14nm; y 4GB de RAM (LPDDR4) con opciones de 32 o 64GB de almacenamiento interno, informa Europa Press. La pantalla es un panel de 5,7 pulgadas Super AMOLED Quad HD (2560 por 1440 píxeles; 518 puntos por pulgada). En cuanto a conectividad, cuenta con 4G LTE cat. 9 o 6 (dependiendo del país), Bluetooth v4.2 LE, Wi-Fi 802.11 a/b/g/n/ac, microUSB 2.0, NFC, GPS Glonass, entre otros. Ambos cuentan con Android 5.1.
Una de las grandes apuestas de Samsung es la carga inalámbrica. En la compañía están convencidos de que en pocos años, este método se convertirá en el estándar comercial para darle vida a las baterías de nuestros dispositivos, por lo que llevan años mejorando esta tecnología. Tanto el Note 5 como el S6 Edge + permiten este tipo de carga, y lo hacen de una forma mucho más rápida que hasta ahora (desde Samsung aseguran que solo serán necesarias dos horas para llenar la batería).
No es esta la única característica que tienen en común los dos teléfonos: ambos vienen dotados con una memoria RAM de 4 gigas, lo que nos garantiza poder desplazarnos de aplicación en aplicación sin que el dispositivo se ralentice, y desde Samsung aseguran que se adaptarán a las nuevas versiones de la tecnología LTE y 4G. Además, todos ellos podrán servir como billeteras virtuales, ya que la compañía ha aprovechado el acto de este jueves para presentar el servicio Samsung Pay, con el que quiere hacer la competencia a los ya presentados Apple Pay y Google Wallet. Llegará a España pronto, solo después de aterrizar en Estados Unidos y China.
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