Cuando Pedro Sánchez decidió que el Congreso Federal del PSOE del 29 de noviembre tuviera lugar en Sevilla debió pensar que el tradicional bastión socialista era el lugar idóneo. Pero la fiesta contará con rostros incómodos ante la realidad del socialismo en Andalucía. Las voces que ponen en duda al candidato Juan Espadas no paran de crecer.
Desde la provincia de Córdoba, siete alcaldes y otros diez exdirigentes socialistas piden un cambio de rumbo. Antiguos referentes socialistas como el expresidente del Parlamento andaluz, Juan Pablo Durán o el expresidente de la Diputación, Antonio Ruiz, se acaban de adherir a la candidatura alternativa reunida como Bases Andaluzas Socialistas (BAS).
Esta alternativa socialista nació a mediados de septiembre, señalando a los procesos congresuales que están por venir como una oportunidad. Poco a poco, este colectivo gana adeptos. BAS apuesta por un nuevo liderazgo “fuerte y con un PSOE-A reconocible, creíble, auténtico”.
El nuevo documento hecho público en redes sociales recuerda los deficientes resultados obtenidos por Espadas hasta ahora. Cuatro derrotas electorales que, según el colectivo, afecta a la moral de la militancia, lo que “traslada una imagen de partido perdedor, con un discurso que no debilita ni socava a Moreno Bonilla”. Las últimas cifras que arroja el Centra –el CIS andaluz- y otros sondeos privados no ofrecen esperanzas realistas para el socialismo andaluz.
Espadas, “no ha acertado en sus tácticas políticas de oposición ni ha proyectado un mensaje para recuperar nuestro electorado”, denuncian desde BAS. Uno de los sentimientos más extendidos entre los socialismos es que el partido no está consiguiendo hacer llegar su mensaje a la juventud, lo que está interrumpiendo el relevo generacional en las congregaciones andaluzas.
La lógica que proponen desde BAS de cara al 15º Congreso Regional que se realizará a inicios de 2025 es que la militancia se organiza contra el aparato del partido. Reprochan la pérdida de “identidad” del PSOE-A y de “acento propio”, en referencia al seguidismo a los dictámenes de Pedro Sánchez desde Ferraz, algo que ha incomodado especialmente a raíz de los acuerdos fiscales con Cataluña; desde BAS recalcan a Voz Pópuli que es necesaria "una voz más firme para defender nuestros intereses”.
Que hagan el “ruido justo”
Ante estos movimientos, Juan Espadas pide respeto y calma en un proceso de cara al Congreso andaluz que cada vez es más notorio, “lo único que les pido es respeto a la gente y que no generen más que el ruido justo”, ha dicho el actual secretario general.
Espadas ya ha señalado varias veces que los debates en torno a su liderazgo deberían tener lugar tras el Congreso Federal, ya de cara a unas posibles primarias en 2025,"la gente piensa que solo pensamos y hablamos de nosotros, en lugar de hablar de los problemas que tienen, que es para lo que les representamos”.
También la portavoz del equipo de Espadas, la parlamentaria María Márquez habló de “espectáculo y show en la política” y propuso con naturalidad que “quien quiera que se presente a un proceso congresual apasionante”, pero que aún, enfatizó, ni siquiera está convocado.
Pero el ruido no espera. Además de BAS, que se define como un movimiento que brota desde la militancia, destacan otros ilustres que se posicionan contra un Juan Espadas, al que le crecen los enanos. La voz de Luis Ángel Hierro, uno de los candidatos a las primarias que fue derrotado por Espadas, vuelve a resonar en estos momentos.
Desde su entorno, en la Plataforma de Reconstrucción del PSOE, instan a dejar atrás “la ausencia de liderazgo... y enrocamiento en posiciones que no generan ni ilusión ni posibilidad” de retornar a la Junta de Andalucía.
Otro peso pesado regional que ocupa hoy un escaño y que fue el número 2 y portavoz parlamentario, Mario Jiménez, sorprendió a través de X pidiendo una reacción ante los malos augurios de las encuestas: “Si no cambiamos el Psoe-A, no cambiaremos Andalucía”. Pero, sin duda, el mayor jalón a la endeble estabilidad de la jerarquía lo ha dado Susana Díaz.
La expresidenta señaló en un plató de televisión que su derrota ante Juan Espadas en las primarias vino precedida por los teje manejes de, ni más ni menos, que José Luis Ábalos, descrito como un urdidor de tramas por la última presidenta socialista.
Desde el entorno de Espadas señalan estos movimientos como “ruido”. Recuerdan que, como muestra de la salud de su proyecto, el día 10 de octubre obtuvieron el máximo respaldo posible con los avales de la militancia para representar a las delegaciones provinciales en el Congreso Federal que concentrará a todo el socialismo nacional en Sevilla. Con 268 delegaciones, Andalucía sigue siendo la federación con más militantes y con mayor fuerza de España, aunque su unidad empiece a resquebrajarse en público.