"Debilidad" y "débil" son palabras que ha empleado entre el martes y el miércoles el portavoz parlamentario de Vox en Andalucía, Manuel Gavira, para referirse al estado por el que atraviesa a día de hoy la relación que mantienen con el Gobierno que preside Juanma Moreno, especialmente con el Partido Popular.
Gavira ha querido responder de tal forma al consejero de Presidencia, Elías Bendodo, quien este martes hablaba de "relación fuerte y estable" con el hasta ahora socio parlamentario de referencia para Partido Popular y Ciudadanos desde que arrancara el llamado 'gobierno del cambio' en enero de 2019, tras las elecciones del 2 de diciembre de 2018 que acabaron con la hegemonía del PSOE en la Junta de Andalucía durante casi cuarenta años.
"No he tenido ninguna conversación con el señor Bendodo desde julio, si el Gobierno andaluz le llama a eso tener relaciones sólidas...", ha querido dejar claro Gavira para referirse, incluso, a días previos a que concluyera el curso político y se iniciara el periodo transitorio (vacacional) de la Diputación Permanente en el Parlamento de Andalucía.
Ante la ausencia de contacto alguno entre PP y Vox esta última formación ha apremiado al presidente Moreno a que "cumpla lo comprometido" en el pacto de investidura que le garantiza ocupar el palacio de San Telmo en sustitución de Susana Díaz.
"Yo sé la realidad del grupo parlamentario y no son relaciones de gente que tenga confianza", ha recalcado el político opositor al asegurar que "el cambio tan cacareado se ha quedado muy corto, Vox no ha venido exclusivamente a Parlamento a bajar impuestos", una medida que ha sido posible gracias a sus votos. A juicio de Gavira el PP "no está cumpliendo absolutamente nada" de lo acordado con ellos, "más bien al contrario". Los de Abascal machacan estos días su argumento acerca de que "Moreno Bonilla está más cerca del PSOE que de Vox".
Al margen del último desencuentro que motivó el pasado lunes la airada reacción de Abascal contra Juanma Moreno, a cuenta de la Ley de Infancia que garantiza tutela, derechos y prestaciones económicas a todos aquellos menores afganos que pudieran ser acogidos en Andalucía, cuando uno pregunta a Vox en qué estriba la "debilidad" en su relación con el PP ellos responden que vinieron al Parlamento "a plantear un debate político sobre inmigración, la ocupación (de viviendas), la memoria histórica y el uso que hacen los gobiernos de Canal Sur", ha enumerado Gavira a preguntas de este medio digital.
Posible adelanto electoral
Más allá del posible adelanto electoral, del que todo el mundo habla estos días en Sevilla, el nuevo curso político que acaba de arrancar viene marcado por la incertidumbre sobre si el Ejecutivo andaluz de centroderecha podrá contar, o no, con un nuevo Presupuesto para 2022. Manuel Gavira ha aprovechado esta coyuntura para recordarle a PP y Cs que gracias a Vox "hemos tenido tres acuerdos presupuestarios y un pacto de investidura". Y es que la formación de derecha radical sostiene que se le acaba la paciencia: "ya está bien", ha soltado Gavira ante el grado de "incumplimiento" que para ellos demuestra el gobierno autonómico con respecto a lo pactado por escrito y firmado.
En materia presupuestaria Vox ha querido confrontar este miércoles las dos posturas de PP y Cs en el gabinete de Moreno. Por un lado, el vicepresidente Juan Marín habla de "prorrogar" el Presupuesto de 2022, mientras que el presidente aboga por abrir el diálogo y buscar nuevos apoyos, con todos los grupos políticos, tal y como hiciera este martes el consejero de Presidencia, Elías Bendodo.
"Que Andalucía tenga presupuesto no va a depender de Vox ni del PSOE, sino del Gobierno andaluz, y lo único que tiene que hacer es cumplir los acuerdos y el pacto de investidura". Esta es la postura del político más visible de la formación de derecha radical en Andalucía y que contrasta, con matices, con la de Abascal. Mientras el líder nacional daba el lunes como rota por completo la relación con el PP andaluz, su dirigente sigue tendiendo la mano a Moreno Bonilla para reconducir la situación y ser el socio preferente frente al PSOE, partido a cuyo candidato, Juan Espadas, no le interesa un adelanto electoral, dado su escaso nivel de conocimiento tras relevar a Susana Díaz.
El PP, desconcertado
La posición de Espadas con respecto a dar su apoyo al futuro Presupuesto 2022 no deja de ser desconcertante para el PP andaluz, tal y como reconocen fuentes de este partido consultadas. El flamante candidato a presidir la Junta aseguró días atrás que no iba a apoyar el programa económico de PP y Cs para que no hubiera un adelanto electoral, cuando realmente tal circunstancia es la que perseguirían ambos partidos buscando el apoyo socialista para no depender únicamente de Vox.
La última oferta del también alcalde de Sevilla hacia Moreno pasa por abrir una mesa de negociación presupuestaria en la que el PSOE reclama su peso, como fuerza más votada en las elecciones autonómicas de 2018.