El 16 de septiembre de 1620 un navío partió de la localidad británica de Plymouth con 102 pasajeros a bordo. Un centenar de peregrinos, en su mayoría puritanos, embarcó en el Mayflower -la Flor de Mayo- con el fin de buscar una nueva vida, algunos libertad religiosa, huyendo de la Iglesia anglicana, otros un nuevo comienzo en nuevas tierras. Pero esta historia no sólo trata de los peregrinos a bordo de la embarcación, incluye a los nativos del Nuevo Contienente y el efecto que le llegada de los colonos tuvo sobre las tribus norteamericanas.
Más de 30 millones de estadounidenses pueden rastrear su ascendencia hasta esos 102 pasajeros y los aproximadamente 30 tripulantes que iban a bordo del Mayflower cuando desembarcó en la bahía de Plymouth, Massachusetts, en el duro invierno de 1620. A bordo del velero viajaron hombres, mujeres y niños, la mayoría procedentes de Inglaterra y algunos de la ciudad holandesa de Leiden.
Huir de la Iglesia Anglicana
Un número significativo de estos viajeros eran conocidos eb la época como 'Separatistas', un grupo religioso que en su mayoría pretendía una vida libre de la Iglesia de Inglaterra. Otros se embarcaron en dirección al Nuevo Mundo por multitud de razones: la mayoría, buscaba la oportunidad de labrarse un futuro mejor para sus familias y de conocer nuevas tierras.
Además de los peregrinos, estaba la propia tripulación del navío, junto a sirvientes y niños no acompañados enviados por sus familias para ser cuidados por otros adultos a fin de ofrecerles mejores oportunidades.
Los historiadores suelen agrupar a los pasajeros en "Santos" o "Forastero", en referencia a los motivos por los cuales emprendieron el viaje. El origen de los pasajeros puede rastrearse por todo el territorio de Inglaterra -que no Reino Unido- y una ciudad en los Países Bajos, Leiden, localizada en la Holanda Meridional.
Pero estos peregrinos no fueron los primeros en desembarcar en América, mucho menos quienes descubrieron la zona norte del continente. Para entonces ya habóa colonias establecidas, como Jamestown, fundada en 1607, trece años antes de que el Mayflower echó el ancla en las costas de la actual Massachusetts.
El divorcio de Enrique VIII
La decisión del Rey Enrique VIII de separarse de la Iglesia Católica Romana con la finalidad de poder divorciarse de su primera esposa, Catalina de Aragón, y seguir buscando una mujer que le diera su tan ansiado heredero fue el comienzo de esta odisea. A pesar de crear su propia iglesia, la Iglesia de Inglaterra, -y haber sido expulsados de la Iglesia Católica- y comenzar numerosas reformas, los más radicales quedaron insatisfechos, viendo todavía similitudes esperaban muchos más cambios. Los más pesimistas sólo creían posible un cambio si se separaban por completo, a ellos, se les conoció como "Separatistas".
Tras años de represión contra los 'separatistas', los grupos decidieron huir a Holanda, una de las naciones considerada más liberal donde vivir libremente; por ello, en otoño de 1607 se reunieron en secreto y zarparon en un barco a orillas del arroyo Scotia, cerca de Boston, en el condado Lincolnshire, en el este de Inglaterra.
Cuando llegaron a Holanda se establecieron en la ciudad de Leiden, ciudad de librepensadores, donde existía relativa tolerancia religiosa y una larga tradición de dar cobijo a los deshauciados. Estos peregrino construyeron una nueva vida en Leiden, donde habitaron y trabajaron durante 12 años.
Con el tiempo, la estancia en el extranjero pasó factura, dando lugar a las primeras ideas de buscar un nuevo hogar para empezar de nuevo, principalmente pensando en la descencia, los hijos de estos ingleses huidos de su tierra comenzaban a crecer como holandeses, olvidando su propias raícez. La sombra de España se cernía también sobre Holanda por lo que en 1617 tomaron la decisión de viajar al Nuevo Mundo para crear una colonia en América, territorio británico, pero con garantías de libertad religiosa.
Finalmente, la mitad del grupo originario marchó en busca de una nueva vida, la otra mitad optó por quedarse e integrarse en Holanda.
Hacia las Américas
Tras 66 días de duro oleaje atlántico, el Mayflower llegó a las costas americanas. Con el amanecer del 9 de noviembre de 1620 la tripulación del velero divisó Cape Cod. Entonces los peregrinos optaron por dirigirse hacia el sur, hacia la desembocadura del río Hudson, en Nueva York; donde pretendían construir su plantación. Pero el mar embravecido estuvo de hacer naufragar el Mayflower, por lo que los peregrino decidieron no avanzar más y explorar Cape Cod, anclando en lo que en la actualidad es el puerto de Provincetown.
Los peregrinos pasarían el primer mes y medio explorando la zona, pero la mayoría permaneció a bordo del barco, en un intento de tomar la decisión correcto de dónde cosntruir su colonia. Registraron gran parte de la costa de esta región, incluyendo la zona que hoy se conoce como Plymouth. Mientras tanto, un grupo de nativos americanos observaba a los recién llegados, estos nativos pertenecían al pueblo wampanoag y otras tribus, que habían vivido allí durante unos 10.000 años antes de la llegada de los europeos.
Finalmente, un 25 de diciembre los peregrinos abandonaron Provincetown para un día más tarde, el 26, establecerse en lo que hoy es la bahía de Plymouth. El primer fuerte y atalaya se construyeron en Burial Hill (hoy tierra donde descansan los primeros colonizadores de la ciudad). La construcción del asentamiento fue dura, el frío y la falta de recursos hacía que perecieran cada vez más peregrinos.
Los peregrinos se asentaron en tierras de los wampanoag, una de las muchas tribus de la región. Los wampanoag habían vivido aquí durante 10.000 años antes de su llegada, y tras sufrir el ataque de otros grupos y las consecuencias del contacto con otro pueblo completamente nuevo.
El comienzo de una alianza
En marzo de 1621, un miembro wamponaog que hablaba inglés, de nombre Samoset, entró en los terrenos de la colonia de Plymouth y se presentó. Se dice que pidió una cerveza y pasó la noche hablando con los colonos. Más tarde, Samoset trajo a otro miembro de su tribu, Tisquantum, con mucha experiencia y conocimiento del idioma extranjero. Tisquantum les enseñó a plantar maíz, que se convirtió en un cultivo importante, y también les mostró dónde, y cómo, pescar y cazar castores. A partir de aquí, comenzó a desarrollarse la relación entre los dos pueblos, ayudándose unos a otros.
Finalmente, ambos grupos accedieron a una paz que propició que los dos pueblos se ayudaran mutuamente permitiendo la supervivencia de ambos, pero sobre todo de los recién llegados.
Al éxito de esta paz le siguió una cosecha abundante en el otoño de 1621, los colonos decidieron celebrarlo con un festival de oración de tres días de duración. Los 53 colonos supervivientes invitaron a sus amigos nativos americanos a unirse a ellos en un gran festín en lo que se conocería como el primer Día de Acción de Gracias, agradeciendo a los wampanoag su ayuda en el asentamiento de su nueva colonia en territorio desconocido.