Hacer música personal y con alma exige, en muchas ocasiones, recorrer un camino tortuoso hacia el éxito que, en muchas ocasiones, no termina dando los frutos que uno desearía. Por eso, ver a Dani Fernández firmando una actuación de época ante un Wizink Center abarrotado es lo más parecido a recibir un abrazo en el corazón. Porque el artista de Alcázar, que hace cuatro años se batía el cobre en pequeñas salas tras tocar el éxito con Auryn, se ha convertido en un referente que, además, ha decidido subir el nivel de sus directos a una excelencia más propia de un artista de talla internacional. Y lo ha hecho con el alma, haciendo la música que sale de ella, renunciando a alternativas enlatadas que quizá le habrían llevado al mismo sitio, pero no de la misma forma. Porque 'La Jauría' demostró este jueves que, tal y como se esperaba, es el disco que asienta a Dani en la primera fila de la escena española.
Es difícil explicar con palabras el concierto que firmó este jueves Dani Fernández en Madrid, pero quizá el mejor calificativo que se le puede dar es "especial". Porque, en un increíble alarde de generosidad, el artista se dejó el alma en cada segundo del concierto, con una escenografía impresionante y un setlist medido al milímetro para ofrecer el mejor espectáculo posible. Una actuación repleto de sorpresas muy bien dosificadas para jugar con los ritmos pero sin permitirles dejar de contener el aliento. Esto fue así desde el minuto uno, donde Dani y la banda comenzaron encerrados en una espectacular jaula que reproducía imágenes. Una clara alegoría a 'La Jauría', que inicia su camino encerrada para ir poco a poco soltando sus cadenas y una de las principales imágenes del disco. Conseguir reproducir ese mensaje sobre el escenario es simplemente brillante.
Puso al público en pie con uno de sus grandes hits, 'Clima Tropical'. Una clara declaración de intenciones: Dani no iba a dejar de pisar el acelerador durante todo el concierto y no iba a dejarse sus grandes temas para el final. Ya fuera de la jaula, sonó 'Inertes', uno de los mejores temas del disco para después ofrecer uno de los momentos más emotivos, especialmente para los padres -y los que vayan a serlo- presentes en el Wizink. Yarea, la esposa de Dani Fernández y uno de sus grandes apoyos artísticos, subió al escenario para cantar 'Solo tienes que avisar', una canción que se ha convertido en un himno de la paternidad. Además, ambos la cantaron con Belice, la hija de ambos y protagonista del tema, presente en el estadio. Un momento que el artista, probablemente, recuerde toda su vida.
El concierto, espectacularmente generoso -dos horas y media de duración-, tuvo otros momentos espectaculares como la presencia de Viva Suecia, la banda indie que confió en Dani para hacer una colaboración cuando el artista era, para muchos, un exboyband. Ambos cantaron 'Lo siento', un tema del album 'El amor de la clase que sea' de la banda murciana. Todo ello sin dejar de brillar con temas como Oaxaca, Plan Fatal o Sin Vergüenza, en esta ocasión sin Arde Bogotá.
Tras la tralla, llegó la pausa y con ella, el mejor momento del concierto. En una plataforma situada en el centro de la pista del Wizink, emergió Dani Fernández para protagonizar un momento único: tocó Competir y La Trama Principal con tan solo una guitarra. Sí, has leído bien: el artista prescindió durante gran parte de micrófono, cantando 'a capella' ante un Wizink Center absolutamente embobado con el artista, tan solo interrumpido por los gritos de admiración del público. Esto, que ya lo ha hecho en otras ocasiones, toma ahora otro nivel y muestra la enorme capacidad vocal del artista. Lejos de bajar el ritmo, el artista aprovechó que la atención estaba en el escenario del centro para que una orquesta sinfónica se colocase, ante sorpresa de todos, en el escenario principal. El artista, "apostando todo al negro", sin dejarse nada en la trastienda.
Tras la cañera 'Cariño, suéltate el pelo', otro momento más para grabar en la retina: Dani Fernández invitó al escenario a Valeria Castro para cantar la canción más especial de 'La Jauría', '¿Y si lo hacemos?' La artista canaria demostró que puede cantar con tanta intimidad que puede convertir un escenario con 15.000 personas en el salón de una casa. Con ambos sobre el escenario, surgió la magia. Porque esta canción quizá no llegue a los tops de reproducciones, pero sí permiten reconocer a Dani como un fantástico compositor que además tiene un exquisito gusto para elegir con quien grabar sus temas.
Ya en los últimos compases, Dani y su banda tocaron 'Criminal', su emocionante versión de 'Supersubmarina' y el 'Dile a los demás', para después cerrar con 'Me has invitado a bailar' y, aceptando la invitación, 'Bailemos'. Sorprendió que Dani no escogiese este tema para cerrar como ha hecho en innumerables ocasiones, ya que permite poner la guinda a una noche perfecta. En su lugar, decidió hacer dar un importante lugar a 'Si tus piernas', la canción que compuso para Yarea y que como el artista ha reconocido en innumerables ocasiones, es una de las más especiales para él. Aquí, el artista volvió a poner por delante el corazón respecto al streaming, haciendo vibrar al Wizink con una canción de amor hacia su esposa.
El cierre, eso sí, fue con 'Todo cambia', el primer single de 'La Jauría' y que sirve para definir con claridad la carrera de un Dani Fernández que pasó del éxito abrumador con Auryn al anonimato de las pequeñas salas, donde se abrió paso con grandes composiciones hasta volver a conquistar los grandes escenarios nacionales. Porque el llenazo del Wizink no es una excepción: el artista ya tiene todo vendido para esta gira y promete ser uno de los principales atractivos de los festivales de este verano. Efectivamente, todo cambia y en el caso de Dani y su público, lo hace para bien.