Uno de los dúos míticos de la música española, el formado por Joaquín Sabina y Pancho Varona, anunció su separación el pasado martes, para sorpresa de sus seguidores. El tuit en el que Varona narraba la ruptura "contra todo pronóstico" dio paso a las especulaciones de los fans sobre cuál podría ser el motivo. De la fusión con la banda de Joan Manuel Serrat a las tensiones con Antonio García de Diego, otro miembro clave del grupo, pasando por el propio deterioro en la relación entre Sabina y Serrat.

El motivo de fuerza, sin embargo, parece encontrarse en un "tercero en discordia": la mánager Esther Segarra, una amiga de Pancho, sin experiencia en el sector, que se hizo cargo de la contratación por "imposición" de este. En esta pieza recogemos una galería de imágenes sobre la polémica ruptura.

Deterioro de la relación de la banda

Tras la llegada de Segarra, Varona mantuvo en paralelo varios proyectos en directo que marcaban la agenda de la banda principal, según cuenta Juan Puchades, director de la revista musical Efe Eme y autor de un libro sobre el álbum clásico 19 Días y 500 noches.

Todas estas tensiones hicieron que se rompiera la relación de Sabina y sus grupo con Varona, que, en una inevitable comparación con la ruptura de los Beatles y el rol de Yoko Ono, se marchó con la nueva mánager.

Segarra contestó a este periódico con su versión de la ruptura, apelando a la buena relación que mantenían dentro de la banda inicialmente. "Las últimas giras que ha hecho Joaquín a las que Pancho y yo hemos ido, Joaquín nos proponía invitarnos a comer en México o en Puerto Madero, Buenos Aires", cuenta. "También estuvimos en su habitación de hotel en México un día en la gira Lo niego todo. Nos invitaba a su casa de Madrid a dormir y también antes de la pandemia estuvimos en su casa de Rota (febrero 2020) una noche con él y unos amigos así que sí teníamos relación con él fuera de los escenarios".

Los otros trabajos de Varona

La mánager escribe que, si bien Varona ha compuesto y trabajado con otros, esto no es motivo para prescindir de él "ya que llevan trabajando juntos 40 años y jamás hizo una gira sin él". "Nunca hemos tenido mala relación con Joaquín, todo lo contrario" añade, y apunta a que solo tras la pandemia dejaron de verlo.

Segarra, que fue antes educadora canina, argumenta que era la mánager de Varona para sus proyectos en solitario, mientras que la ya extinta "Noche Sabinera" tenía su propia representante. En defensa del músico, Segarra insiste en que Varona no ha dado su versión a los medios "por respeto" a Sabina y sus excompañeros. "Nadie tiene que arrodillarse ante nadie", sentencia.

"No hemos tenido ni sido jamás competencia de nadie"

La incompatibilidad entre la agenda personal de Varona, gestionada por Segarra, y la de la banda de Sabina es uno de los pilares de la ruptura. La representante argumenta en su carta, sin embargo, que era la mánager de las "Noches Sabineras" la que les asignaba las fechas en las que Varona podía cerrar sus conciertos.

El divorcio Sabina-Varona

Justificaciones aparte, los problemas dentro de la banda ya eran conocidas entre los ambientes musicales, donde se llevaba tiempo hablando del deterioro de la relación entre el guitarrista y Sabina, así como de las tensiones entre Varona y Antonio García de Diego. Tensiones, mánager mediante o no, que el pasado martes alcanzaron su punto álgido.