¿Qué es más difícil, escribir un libro a cuatro manos o matar a cuatro manos?
Escribir una libro a cuatro manos no es difícil, nosotros llevamos ya tres, pero todavía no hemos probado a matar juntos... quizá haya que responder a esto más adelante. Pero estamos seguros de que matar a cuatro menos dejará el doble de rastro, así que se resolvería y no podríamos incluirlo en este libro.
La justicia española tiene mala fama, pero también uno de los índices de solución de casos más altos. ¿Cómo se explica?
Una cosa es la Justicia y otra, las labores de investigación de los Cuerpos de Seguridad, que tienen buenos datos de resolución de crímenes, pero que luego estos se embarullan en los tribunales... Quizás los abogados tengan algo que ver con esta mala fama.
Los crímenes sin resolver existen y aumenta el número. ¿Se mata mejor?
No creemos que cada vez se resuelvan menos crímenes, pero damos más publicidad a los fracasos que a los éxitos y eso puede producir esa sensación. En España se mata poco y se suele matar mal, pero hay un problema en los casos de desaparecidos. Habría que intentar evolucionar y actualizar los protocolos y el uso de las nuevas tecnologías y servicios que potencien el aviso, la alarma, cuando alguien desaparece para que todos estemos atentos.
¿Existe el crimen perfecto?
El crimen perfecto es todo aquel que no está resuelto, pero felizmente en algunos casos esto no dura para siempre, al menos es lo que queremos intentar con los 8 casos que tratamos en Crímenes sin Resolver: Eva Blanco, Cristina Bergua, Yéremi Vargas, Susana Acebes... Sus familias necesitan justicia y es obligación de la sociedad colaborar para que la obtengan. La colaboración ciudadana es crucial en estos casos y debemos ser conscientes de que un crimen sin resolver es un asesino que está libre en la calle, que puede volver a actuar y quizá nos toque más cerca de lo que jamás hubiéramos pensado.
¿Existen modas en el imperio del mal?
Pueden existir modas pero estaría más orientado al crimen organizado: robos, secuestros, estafas... Pero lo que es el asesinato en sí es lo más primario que hay. En muchos de los casos ha sido algo no premeditado, una respuesta inmediata e irracional ante una circunstancia que se le ha presentado al asesino y que no ha sabido resolver de otra forma. Por lo que no lo piensan mucho antes de actuar y utilizan lo primero que tienen en sus manos. En otras ocasiones están más pensados, pero han estado dándole vuelta a matar, no a innovar. Lo cierto es que a veces la suerte les acompaña. Por ejemplo, en el caso de Eva Blanco, asesinada en Algete, la lluvia arrastró consigo muchas de las pruebas que podrían haber sido cruciales.
Parece que en algunas zonas se mata mejor...
Exactamente no es que se mate mejor, pero sí que es verdad que en las zonas turísticas hay más movimiento de personas y es más difícil que alguien se quede con una cara. Por ejemplo, en el caso de la investigación de Yéremi Vargas se hizo patente la cantidad de agresores sexuales y pederastas de otros países de Europa que encontraron un lugar donde refugiarse en estas zonas turísticas.
Cuando se investiga un caso... ¿se acaba obsesionando con el tema?
Pues en ocasiones sí. El crimen sin resolver, la desaparición sin ningún rastro, son cuentas pendientes en los investigadores, espinas clavadas a lo largo de su trayectoria que necesitan quitarse. Los investigadores de Homicidios desarrollan una gran empatía con las víctimas y también tienen que profundizar en cómo funciona la mente de los delincuentes, y evidentemente esto tiene un coste personal para ellos.
¿Por qué los medios de comunicación toman partido tan rápidamente por algunos casos?
Muchas veces no es una cuestión espontánea. La familia de la desaparecida Cristina Bergua creó la asociación Inter-SOS que a lo largo de casi dos décadas ha luchado porque se cambien los protocolos de investigación en los casos de desaparecidos inquietantes, es decir, menores, ancianos y mujeres u hombres en situación de riesgo. La búsqueda comienza inmediatamente, nada más se haya puesto la denuncia. No hace falta esperar 24 horas, de hecho, estas 24 primeras horas son cruciales.
¿Qué se siente cuando no se soluciona un caso?
Para las familias es un dolor crónico, seguirán con sus vidas, se ocuparán de los que tienen a su alrededor, pero la vida ya no es vida tal y como era entendida antes del crimen. Para los investigadores es una frustración, una cuenta pendiente. Y para la sociedad también debería ser una cuenta pendiente.
¿Puede acabar entendiéndose o justificando a un asesino?
Claro! Puede acabar entendiéndose a un asesino porque cualquiera de nosotros podemos acabar un día cometiendo un asesinato… No sabemos cuál es la tecla que nos tienen que tocar, pero es una posibilidad... En otras ocasiones, entiendes como razona el asesino, lo que no significa que lo compartas o lo veas razonable. Evidentemente, entender y justificar no son sinónimos y el asesinato jamás está justificado.
Me imagino que este libro libro puede ayudar a un asesino o ponerle nervioso
Pues sabemos que en algunos casos les ha puesto nerviosos. Para la elaboración del libro, además de la colaboración con la Policía y la Guardia Civil y las familias, hemos ido a por los sospechosos, sus familiares, les hemos pedido su versión... y ahí está reflejada.