El pasado mes de febrero, durante la tradicional cena previa a los premios Oscar, una imagen y unas palabras entre dos de las personalidades más influyentes del cine se hicieron virales: el cineasta Steven Spielberg se fundió en un abrazo con Tom Cruise y le dijo unas emotivas palabras que dieron la vuelta al mundo. "Has salvado el trasero de Hollywood y es posible que hayas salvado la distribución en los cines. Maverick puede haber salvado a toda la industria cinematográfica", le dijo el célebre director en referencia a las cifras que su blockbuster Top Gun: Maverick había conseguido en taquilla, a pesar de los estragos de la pandemia y de la competencia voraz de las plataformas.
Con esta misma premisa, la de romper las cifras de la taquilla, llega ahora su Misión: Imposible- Sentencia Mortal Parte I, una nueva entrega que para esta redactora de Vozpópuli promete saciar los paladares más exquisitos del cine de acción con un buen espectáculo. Eso sí, sentado en la butaca y con una pantalla y un sonido difícil de emular en el salón de casa, tal y como el propio Tom Cruise y el director del filme, Christopher McQuarrie, animan en un vídeo previo a la proyección de la película. La situación ha vuelto a cierta normalidad en los cines, sí, pero no por eso hay que bajar la guardia.
La nueva entrega de 'Misión imposible' trata de saciar el apetito de los paladares más exquisitos con las imágenes más vertiginosas, unas persecuciones en coche sobresalientes a la altura de cualquier otra cinta del género y una trama con todos los ingredientes del cine de espías
Bien sabe el célebre actor y productor que el público, en especial el más curtido en el cine que busca la adrenalina y las emociones más fuertes, tiene que salir satisfecho y ese es su principal cometido en esta ocasión, saciar el apetito de los paladares más exquisitos con las imágenes más vertiginosas, unas persecuciones en coche sobresalientes a la altura de cualquier otra cinta del género y una trama con todos los ingredientes del cine de espías pero sin complicar demasiado al espectador y con algún "Tomsplaining" en su papel de Ethan Hunt para los despistados. No hay nada nuevo, nada es sorprendente ni innovador, pero todo entra bien.
Quien se haya perdido en la larga lista de entregas que esta franquicia basada en la serie de televisión homónima acumula ha de saber que Brian de Palma fue el encargado de dirigir la primera entrega en 1996, que dio a conocer a un implacable super espía capaz de llevar a buen puerto las misiones más arriesgadas para la agencia secreta de seguridad de Estados Unidos. Seis películas y varios directores después (J.J.Abrams, John Who, Brad Bird y Christopher McQuarrie), Ethan Hunt tiene una nueva tarea y un enemigo que engancha con los miedos y las amenazas actuales: la inteligencia artificial.
Misión imposible y las fuerzas todopoderosas
En esta ocasión, el espía y su equipo de Fuerza de Misión Imposible (FMI), la agencia de inteligencia ficticia del gobierno estadounidense, tratan de localizar una llave doble que pone en peligro a toda la humanidad y el destino del planeta. En su búsqueda, logra salvar a su compañera Ilsa (Rebecca Ferguson), se topa con una hábil y astuta ladrona, Grace (Hayley Atwell) que se interpone en sus planes, y una poderosa y adinerada mujer, Alanna Mitsopolis (Vanessa Kirby), a quien quiere convencer de situarse en el lado bueno de la historia. Su enemigo, una fuerza todopoderosa representada por el omnipresente Gabriel (Esai Morales).
No falta nada en esta séptima entrega de Misión imposible: saltos en paracaídas por las montañas más altas y escarpadas que uno pueda imaginar, persecuciones por las calles históricas de Roma, puentes que saltan por los aires y una trepidante persecución en el techo de un tren que circula a toda velocidad y sin frenos y que ofrecerá algunas de las imágenes más frenéticas del filme. Tampoco falta una buena dosis de diversión en tono de humor con algún gag en un pequeño y divertido Fiat amarillo difícil de gobernar, y aunque hay quienes han criticado su papel protector con las mujeres que le rodean en el filme, en esta Misión imposible hay más héroes de los que uno imagina.
Tom Cruise llega dispuesto a revalidar su poder en las superproducciones y su título como héroe de la cinematografía mundial
Con un elenco en el que se suman, entre otros, Ving Rhames, Simon Pegg, Pom Klementieff, Mariela Garriga, Henry Czerny, Shea Whigham, Greg Tarzan Davis, Charles Parnell, Frederick Schmidt, Cary Elwes, Mark Gatiss, Indira Varma o Rob Delaney, Tom Cruise llega dispuesto a revalidar su poder en las superproducciones y su título como héroe de la cinematografía mundial.
Precisamente, en 2022 recibió la Palma Honorífica en el Festival de Cannes, un reconocimiento en un escenario a priori tan hostil para el cine destinado al público más numeroso, ese que no recibió con demasiado calor el pasado mes de mayo la nueva entrega de Indiana Jones. El director del festival se la entregó por sorpresa, como también hizo lo mismo este año con Harrison Ford. Como él, Tom Cruise ha manifestado recientemente su intención de alcanzar su hazaña y envejecer al ritmo de su saga, aunque de momento nadie se haya dado cuenta de sus arrugas, si es que las tiene.
