Este 2022 ha sido un gran año para el cine español pero no tanto para el cine internacional que ha llegado a las salas del país, que concentra algunas de las peores películas del año. Los cines aún no levantan cabeza tras la caída de espectadores a causa de la pandemia por covid, aunque lo cierto es que algunos títulos -especialmente aquellos con superhéroes en sus tramas- han puesto su grano de arena para evitar la debacle. Ese es el caso de la recientemente estrenada Avatar: el sentido del agua, que ha recaudado 7,5 millones de euros solo en sus primeros tres días en los cines nacionales, por lo que aún queda margen para ser optimistas.

Además de la nueva entrega del taquillazo de James Cameron, también llegó a las salas este año Top Gun: Maverick, una digna secuela de la famosa película de los años 80, protagonizada por Tom Cruise, que sirvió como pugna entre lo viejo y lo nuevo, así como varias entregas de Marvel que dejaron buen sabor de boca y buenos resultados en la venta de entradas, entre ellas Thor: Love and Thunder o Black Panther: Wakanda Forever.

Sin embargo, otros estrenos no fueron tan afortunados. Ni entretenidos, ni acertados y, en algunos casos, ni siquiera rentables. En Vozpópuli hacemos un repaso por las películas más prescindibles del año. Si usted ha tenido que soportar alguna de ellas, es probable que coincida en el diagnóstico. Por el contrario, si aún está a tiempo de evitarlas, no lo dude, porque si de algo puede presumir este 2022 es de tener buen cine hecho en casa, con el que sí es fácil acertar

Morbius

Morbius, la entrega de los personajes de Marvel de Sony Pictures protagonizada por Jared Leto, llegó a los cines acompañada de una pregunta retórica. ¿Es esta la peor película de superhéroes de la historia? No sabemos si llega a tanto, pero lo cierto es que esta película no gustó ni a los fans de los cómics ni a los más fieles seguidores del cine de superhéroes. Este doctor brillante y superdotado que trata de hallar la cura para la enfermedad sanguínea que padece no depara sorpresas en una película simple y predecible, aunque más oscura de lo que el público está acostumbrado.

Black Adam

Black Adam, la nueva entrega del universo DC, es otro de los títulos más insustanciales entre los estrenos de superhéroes. Se trata de la segunda colaboración entre el director español afincado en Estaos Unidos Jaume Collet-Serra y el actor Dwayne Johnson, también conocido como "La Roca", que no logra funcionar del todo. En un juego de pirotecnia superlativo, entre peleas, persecuciones y combates, todo pierde el equilibrio. Entretiene, eso sí, pero se olvida de sacar jugo de su mayor activo, su actor protagonista, tan desaprovechado, anodino y demasiado serio.

Jurassic World: Dominion

Jurassic World: Dominion, la tercera y última parte de la segunda tanda de las famosas películas de dinosaurios, prometía ser una película emocionante y llena de aventuras, pero ha resultado ser una previsible película de acción que recurre demasiado a lo ya conocido, en un cada vez más habitual ejercicio de exprimir la nostalgia hasta agotarla por completo. Una de las peores películas de 2022.

Bardo, falsa crónica de unas cuantas verdades

Bardo, falsa crónica de unas cuantas verdades es el título de la reciente película de Alejandro González Iñárritu (Birdman, El renacido), una excesiva y agotadora consecución de elementos simbólicos que ahondan en la pura vanidad. Hay belleza y disfrute visual, también un puñado de conversaciones interesantes, no hay duda, pero también un ensimismamiento y una autocomplacencia que aún nadie ha entendido. Y todo en dos horas y media que en un principio iban a ser tres.

Amsterdam

El premio a la película más aburrida del año es para Amsterdam, cuyo mayor logro es el de desperdiciar un elenco tan brillante como el que componen Christian Bale, Margot Robbie, John David Washington, Anya Taylor-Joy, Andrea Riseborough, Chris Rock, Matthias Schoenaerts, Michael Shannon, Mike Myers, Robert De Niro, Rami Malek o Zoe Saldana, entre otros. Esta película es soporífera y enrevesada, da igual lo mucho que pueda gustar el trailer o lo atractiva que pueda resultar la historia real en la que está basada. Para esta redactora, la mayor decepción del año y una de las peores películas.

Veneciafrenia

En el terreno nacional, Álex de la Iglesia ha dirigido una de las peores películas de su carrera o, por decirlo de otra manera, una de las menos afortunadas. Se trata del slasher Veneciafrenia, protagonizado por Silvia Alonso, Ingrid García Jonsson o Cosimo Fusco, una batalla contra el turismo masivo en la ciudad de los canales. El viaje de diversión entre máscaras y trajes de época pronto se convierte en una pesadilla, pero la misión de entretener al espectador se queda un tanto descafeinada, y el brillo del escenario natural en el que está rodada pronto desaparece.

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