Los artistas, autores, editores y productores confían en que la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, frene la nueva Ley de Propiedad Intelectual, también conocida como Ley Lassalle (impulsada por el Secretario de Estado de Cultura) que ahora mismo se debate y tramita en el Senado.
El sector de la cultura ha hecho pública una carta en la que piden a la vicepresidenta su implicación en esta reforma que, “de llevarse a cabo, perjudicará directamente a cerca de medio millón de trabajadores destruyendo un sector estratégico para la economía española”.
El sector cultural español es clave para la economía española ya que factura cada año casi 37.000 millones de euros, lo que supone el 3,5 % del PIB español y da empleo a más de 430.000 persona, señala la misiva.
Pero además, la “Ley Lassalle” es contraria a la normativa europea, según han dictaminado tanto el Consejo de Estado como el Consejo General del Poder Judicial y el Consejo de Consumidores y Usuarios, además de haber sido cuestionada por el Tribunal Supremo, y se caracteriza por su absoluta falta de consenso, denuncian.
Por este motivo y por las consecuencias que tendría en términos económicos no solo para el sector sino para el conjunto de la economía española, los artistas, autores, editores y productores proponen a la vicepresidenta abrir un proceso de análisis y negociación entre todas las partes afectadas, con el objetivo de desarrollar un marco regulatorio estable, moderno, eficaz y justo.
Según los representantes de la cultura, la norma es "regresiva y nos aísla clarísimamente de Europa"
Al grito de 'Ley Lassallle no', responsables de las entidades de gestión de derechos de autor, así como actores, productores, y músicos ya pidieron, durante esta semana en el Círculo de Bellas Artes de Madrid, la retirada de la nueva Ley. "La propiedad intelectual es la clave que protege a la comunidad creativa" dijo Luis Cobos, presidente de la Sociedad de Artistas, Intérpretes y Ejecutantes (AIE).
Actores como Vicky Peña, Tina Sáinz, Pepe Viyuela, José Mota, Emilio Gutiérrez Caba y cantantes como Ana Belén, Víctor Manuel o Camela, entre otros muchos artistas, están detrás de esta iniciativa.
Junto al responsable de la Sociedad de Gestión autorizada por el Ministerio de Cultura para defender los derechos de los artistas intérpretes o ejecutantes, también acudieron para mostrar su negativa a la ley, Antonio Guisasola (Promusicae), Pilar Bardem, (AISGE), Pedro de Andrés (CEDRO), Enrique Cerezo (EGEDA), Juan Genovés (VEGAP), el presidente de SGAE, José Luis Acosta y Carlos López García (DAMA) entre otros.
Hiceron público un comunicado que reclama, además de la retirada del proyecto, que según los firmantes es "regresivo y nos aísla clarísimamente de Europa, destruye nuestros derechos y no tiene el consenso exigido para una ley de esta envergadura", la apertura de un proceso de debate con el apoyo de todos los sectores de la cultura. Acosta cree que las enmiendas presentadas por el grupo popular en el Senado son "insuficientes y parciales". Por último el comunicado pide "la implicación directa" de la vicepresidenta en "una reforma que ha sido usurpada por otros ministerios en detrimento de la cultura y los derechos de propiedad intelectual".