¿Cuál es el desayuno más saludable? Esta es, sin duda, una de las preguntas más comunes en la consulta de un nutricionista. Y es que, en los últimos tiempos, los expertos han desmontado las costumbres que durante años hemos tenido para la primera comida del día. Un desayuno hasta ahora considerado sano, pero cargado de alimentos ricos en grasas y azúcares, y con un bajo aporte nutricional.
Aunque siempre se ha dicho que el desayuno es la comida más importante del día, lo cierto es que es igual de necesaria que las demás. Y al tratarse de la primera ingesta después del ayuno de la noche, es necesario elegir unos alimentos sanos que aporten los nutrientes y la energía que el organismo necesita para afrontar el día.
Ante esta realidad, son muchos los expertos que intentan descifrar las claves del desayuno perfecto. Pero además, desvelan los alimentos que debemos evitar, y entre los que se encuentra uno muy popular en las mesas de niños y adultos. Nos referimos a los cereales, durante décadas el desayuno más habitual que, según aseguran, es poco saludable para comenzar el día.
Los cereales, el alimento que los nutricionistas desaconsejan para el desayuno
Sabrosos y fáciles de consumir, los cereales siempre han tenido fama de sanos. Sin embargo, no todos lo son. O mejor dicho, muy pocos cuentan con buenos valores nutricionales. Algo que ha llevado a los nutricionistas a desaconsejar su consumo, al menos las versiones más comerciales.
Son cientos las opciones disponibles en los supermercados de este alimento, desde aquellas creadas para el público más joven, con llamativos colores y apetitosos sabores, hasta los dirigidos a los adultos, enmascarados detrás de reclamos saludables. Y además, prácticamente todos tienen algo en común: carencias nutricionales y un alto contenido en azúcar.
En plena guerra contra este ingrediente, los cereales suelen incluir importantes cantidades de carbohidratos simples, llegando incluso a suponer la mitad de una porción de alimento. Así lo confirma la Organización de Consumidores (OCU), que tras estudiar más de 300 tipos de cereales, asegura: “Solo el 15% de los cereales del estudio presenta niveles bajos de azúcar (inferiores al 5%), pero algunos de ellos recurren al uso de edulcorantes”. Y además, muchos incluyen elevadas cantidades de sal y otros aditivos poco saludables.
Y si los expertos advierten del alto contenido en azúcar de los cereales que habitualmente consumimos, también señalan el bajo aporte de fibra, siendo mínimo, incluso en aquellos que aseguran ser ricos en este nutriente, imprescindible para el buen funcionamiento del organismo y relacionado con la mejora de enfermedades y problemas de salud.
Según los estudios, en España, el consumo de fibra es de 12,5 gramos diarios, una cantidad muy inferior a los 25 gramos que recomienda la Agencia Europea de Seguridad Alimentaria.
¿Qué alimentos debe incluir un desayuno saludable?
Aunque los expertos recomienden evitar el consumo de cereales en el desayuno, existen excepciones. Y es que, aunque menos conocidas, hay versiones saludables de este alimento, cereales menos procesados, integrales y sin azúcares añadidos como los copos de avena, de centeno o de espelta que hasta ahora se vendían en tiendas especializadas y, afortunadamente, podemos encontrar cada vez más en los supermercados.
Un desayuno saludable debe ser equilibrado en hidratos, grasas y proteínas, e incluir alimentos de buena calidad. Así, podemos optar, por ejemplo, por tostadas de pan integral, frutas, yogures naturales sin azúcar, frutos secos, huevos, queso, aguacate, tomate, aceite de oliva…
Eso sí, además de desaconsejar el consumo de las versiones comerciales de los cereales, los expertos han incluido en su lista negra a otros habituales de nuestros desayunos. Es el caso de las galletas, la bollería, los zumos comerciales, las mermeladas o el pan blanco. Alimentos que también debemos eliminar de nuestro día a día.
