Convertido en uno de los alimentos más consumidos, el pan forma parte de la dieta tradicional en gran parte del mundo. En España, suele estar presente en casi todas las mesas y forma parte del día a día de niños y adultos. Sin embargo, ni todos los tipos de pan son iguales, ni todos son igual de saludables.
Consumido desde la prehistoria, en los últimos tiempos son muchos los tipos de pan disponibles en el mercado. Unos panes que varían en función de los tipos de harina utilizados y con ello su calidad y precio. Así, en las panaderías podemos encontrar, por nombrar algunos, desde pan de trigo, avena y centeno a maíz, soja o espelta. Diferentes opciones al gusto del consumidor, y cada una con unas propiedades muy diferentes.
Sin embargo, y aunque durante muchos años ha sido el pan blanco el más popular y consumido, en los últimos tiempos, los expertos recomiendan sustituir estas opciones, elaboradas con harinas refinadas a las que se les quita el germen y el salvado, quedando únicamente el almidón que hace que los carbohidratos se conviertan rápidamente en glucosa, por los panes integrales.
En la elaboración del pan integral se mantiene el germen, en el que se localizan un buen número de vitaminas y minerales; y el salvado, que contiene la fibra, un valorado componente al que los expertos aconsejan prestar atención e incluir siempre que sea posible en la dieta diaria.
De esta manera, los estudios aseguran que, si buscas el pan más saludable para consumir en tu día a día, la opción está en el pan integral. Y hoy queremos hablarte de uno que, además de ofrecer importantes beneficios para la salud, es uno de los recomendados por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
El pan de centeno, la saludable opción que aporta fibra, tiene pocas calorías y ayuda a adelgazar
Hablamos del pan de centeno, una opción que ha ganado mucha popularidad en los últimos años, gracias a sus buenas propiedades que lo convierten en una excelente opción nutricional. De un color más oscuro que la tradicional harina de trigo, y con un sabor un poco más amargo, la harina de centeno es muy admirada por su alto contenido en fibra.
Aunque la cantidad puede variar según la marca, e incluso la receta utilizada, el pan de centeno suele contener alrededor de 6,8 gramos de fibra por cada 100 gramos. Algo que lo convierte en un gran aliado contra el estreñimiento que ayuda al buen funcionamiento y salud del intestino.
Además, el pan de centeno nos ayuda a sentirnos saciados durante más tiempo. Un aspecto que, unido a su cantidad de fibra y su bajo aporte en grasas (tan solo 3,3 gramos de grasas) ayudan a aquellos que buscan adelgazar sin renunciar al pan. Y es que, aunque no se trata de un alimento extremadamente calórico (cuenta con 259 calorías por cada 100 gramos), sí es una opción que aporta menos que el pan de trigo.
Convertida en una de las opciones recomendadas por la OMS, el pan de centeno también ofrece un buen aporte de proteínas de alta calidad, y es rico en vitaminas del grupo B, algo por lo que es el pan favorito de los deportistas. Pero aún hay más.
Además de que es rico en vitamina E, un poderoso antioxidante, también hay que destacar sus minerales, pues una ración de 100 gramos de pan de centeno cubre el 18 por ciento de las necesidades diarias de hierro y de fósforo, y el 11 por ciento de las de magnesio.
En cuanto a los hidratos de carbono, el pan de centeno aporta alrededor de 48 gramos de carbohidratos por cada 100 gramos, los cuales destacan por ser hidratos de carbono de liberación lenta, que ayudan a mantener unos niveles de azúcar en sangre mucho más estables.
Orgullo Castellano
El pan más saludable es el que no tiene sal.
SAMURAI
Mucho cuidado si lo dice la OMS que no es precisamente una organización que quiera lo mejor para nuestra salud