Los edulcorantes son aditivos alimentarios que dan un sabor dulce a los alimentos. Mucho se ha hablado en los últimos años de los posibles efectos adversos de los edulcorantes en todas sus variedades sobre la salud general de las personas y también se ha comentado mucho sobre la ingesta de ASB, siglas en inglés de 'Artificiallly Sweetened Beverages', que se traduce como bebidas endulzadas artificialmente (sin azúcar).
No se consideran edulcorantes la miel, ni el azúcar común, la fructosa o la glucosa, ya que tienen otras funciones en los alimentos, además de la de conferir sabor dulce. Según un estudio en el que han participado investigadores de la Facultad de Ciencias de la Salud de VIU, este consumo estaría asociado a un mayor riesgo de padecer algunas enfermedades que pueden ser muy graves para la salud.
“Nuestra revisión de la literatura (Díaz et al. 2023) así como otra reciente revisión de un grupo de expertos de la Organización Mundial de la Salud concluyen que el consumo regular de edulcorantes se asocia a un mayor riesgo de obesidad, diabetes tipo II, hipertensión, incidencia de enfermedades cardiovasculares y mortalidad por todas las causas”, nos explica el doctor Juan Pablo Rey, doctor en Ciencias de la Actividad Física y del Deporte docente en el Máster en Nutrición y Salud de la Universidad Internacional de Valencia (VIU).
Sobre los efectos perjudiciales del uso de edulcorantes o de su inclusión en la dieta diaria de las personas, el doctor, que entre otras cosas ha realizado labores de Investigador Posdoctoral en la Universidad de Sídney, (Australia) y ha sido docente en el Grado de Enfermería de la Universidad San Jorge e Investigador Asistente en Nutrición en la Universidad de Bristol (Reino Unido), nos explica que “a largo plazo los estudios de cohortes muestran un mayor riesgo de obesidad, enfermedades crónicas no transmisibles, y mortalidad”.
Además, “a nivel experimental, según un reciente ensayo clínico en humanos publicado en la prestigiosa revista Cell, se ha demostrado que el consumo diario de edulcorantes modifica la microbiota intestinal y produce rápidos cambios metabólicos que producen una intolerancia a la glucosa”.
Resumiendo, entre los efectos de tomar a menudo bebidas edulcoradas o productos con edulcorantes serían:
-Deshidratación. Al consumir en exceso bebidas azucaradas se produce una gran cantidad de acidez en el organismo que hay que eliminar. Para ello, el cuerpo usa parte de su agua y provoca una deshidratación mucho más rápida de lo normal. Por esto, es mucho mejor beber agua o té durante el día, que nos ayudará a eliminar toxinas de manera natural y a la rapidez necesaria para un organismo sano.
-Riesgo de sufrir diabetes. El consumo diario de productos que contengan edulcorantes aumenta el riesgo de sufrir diabetes a corto y medio plazo.
-Daño en los dientes. Además de azúcar, muchos productos con edulcorantes contienen una gran cantidad de ácido cítrico, una sustancia bastante perjudicial para los dientes ya que lleva a que sufran una erosión en los mismos dañando así el esmalte natural.
-Ralentiza el metabolismo. Esto hace que sea más difícil quemar calorías y por lo tanto perder peso. La gran cantidad de azúcar que contienen hacen que el metabolismo se altere y se vuelva menos eficaz a la hora de quemar la grasa acumulada en el cuerpo. A esto hay que añadir que suelen contener ácido fosfórico, que aumenta ese efecto.
-Aumenta la grasa en el cuerpo. Tomar altas dosis de edulcorantes o azúcar durante el día lleva a sufrir un posible aumento de peso que puede favorecer además la aparición de enfermedades como la obesidad.
¿Hay edulcorantes ‘buenos?
El doctor Rey se muestra tajante ante esta duda que a muchos les puede surgir sobre si hay algunos edulcorantes que no sean tan malos para salud y se puedan consumir de manera habitual. “Desafortunadamente, a día de hoy no se conoce si hay diferencias entre diferentes tipos de edulcorantes sobre los efectos en la salud humana. La mayoría de estudios de cohortes (estudios de seguimiento de poblaciones durante varios años) no han evaluado los efectos de los tipos de edulcorantes, sino que evalúan el consumo total en la dieta de las personas”.
¿Podemos sustituir por otros ingredientes los edulcorantes?
Es probable que muchas personas se pregunten si hay alguna manera de sustituir los edulcorantes por otros ingredientes que nos ayuden a endulzar algunos platos. En julio de 2023, el Centro Internacional de Investigaciones sobre el Cáncer (CIIC) y el Comité Mixto FAO/OMS de Expertos en Aditivos Alimentarios (JECFA) de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización para la Alimentación y la Agricultura (FAO) publicaron los resultados de una investigación sobre los efectos del aspartamo, un edulcorante que no contiene azúcar, en la salud.
El CIIC clasificó el aspartamo como “posiblemente carcinógeno para los seres humanos”, tras establecer que “hay evidencia limitada sobre su carcinogenicidad en los seres humanos”, y el JECFA reafirmó que “la ingesta diaria admisible de este producto es de 40 mg/kg de peso corporal”.
El aspartamo es un edulcorante artificial (de origen químico) ampliamente utilizado en diferentes alimentos y bebidas desde la década de 1980, por ejemplo en bebidas dietéticas, chicles, gelatina, helados, productos lácteos como el yogur, cereales de desayuno, pasta de dientes y medicamentos como pastillas para la tos y vitaminas masticables.
“Un informe de la Organización Mundial de la Salud del año 2015 sobre consumo de azúcar y salud humana, así como el reciente informe de la OMS de mayo de 2023 sobre consumo de edulcorantes y salud humana, concluyen que el consumo regular y excesivo de azúcar y de edulcorantes se asocian a un mayor riesgo de enfermedades crónicas, obesidad y mortalidad prematura”, añade el profesor de la VIU.
Por lo tanto, “el mensaje para la población general es que debemos ingerir azúcar y edulcorantes en nuestra dieta muy esporádicamente para prevenir enfermedades y mejorar nuestro estado de salud. Es decir, deberíamos sustituir las bebidas azucaradas (o las zero o light) por otras fuentes tales como agua, té o café, así como evitar el consumo de alimentos con azúcar o productos llamados light con edulcorantes”, concluye el doctor Juan Pablo Rey.