La diabetes es una enfermedad crónica que afecta a millones de personas en todo el mundo. Se caracteriza por niveles elevados de glucosa en sangre, lo que se conoce como hiperglucemia. Si bien la hiperglucemia es un problema en sí mismo, puede dar lugar a una complicación mucho más grave: el coma diabético.
¿Qué es un coma diabético?
Según los expertos en salud, un coma diabético es una emergencia médica que ocurre cuando una persona con diabetes pierde el conocimiento debido a una descompensación extrema de sus niveles de azúcar en sangre. Esto puede suceder tanto por niveles muy altos de glucosa (hiperglucemia) como por niveles muy bajos (hipoglucemia).
La Organización Mundial de la Salud (OMS) considera niveles normales de glucosa en sangre entre 70 y 100 mg/dl en ayunas. Niveles entre 100 y 125 mg/dL se clasifican como hiperglucamia.
Dos situaciones que pueden desencadenar un coma diabético
Si bien un coma diabético puede ser causado tanto por hiperglucemia como por hipoglucemia, existen dos situaciones especiales que pueden desencadenarlo:
1. Cetoacidosis diabética: esta condición se produce cuando el cuerpo no tiene suficiente insulina para utilizar la glucosa como energía. En su lugar, comienza a descomponer la grasa para obtener energía, lo que produce cetonas, unos ácidos tóxicos. La acumulación de cetonas en la sangre, junto con un nivel alto de glucosa, puede llevar a una cetoacidosis diabética, que si no se trata, puede derivar en un coma diabético.
2. Síndrome diabético hiperosmolar: esta complicación ocurre cuando la glucosa en la sangre es extremadamente alta (más de 600 mg/dl). El exceso de azúcar pasa de la sangre a la orina, lo que provoca una eliminación masiva de líquidos del cuerpo. Si no se trata, puede producirse una deshidratación grave que ponga en riesgo la vida y lleve a un coma diabético.
Prevención del coma diabético
La mejor manera de prevenir un coma diabético es mantener un buen control de la diabetes. Esto implica:
- Seguir las indicaciones del médico al pie de la letra: cumplir con la dosis y el horario de los medicamentos, ya sean antidiabéticos o insulina.
- Llevar una dieta saludable y hacer ejercicio regularmente: vigilar la alimentación y el ejercicio (tanto el exceso como la falta de ejercicio pueden ser perjudiciales).
- Controlar los niveles de glucosa en sangre con frecuencia: realizar determinaciones de glucemia para asegurarse de que los niveles están dentro del rango recomendado por el médico.
- Tener a mano un kit de glucagón y llevar consigo una identificación de diabético: esto permitirá a otras personas actuar con rapidez en caso de emergencia.
Conocer las causas y los síntomas del coma diabético es fundamental para prevenir esta grave complicación. Ante cualquier duda, consulta siempre con tu médico.