El economista José María Gay de Liébana intuye que la dirección y crecimiento que ha tomado la gestión de la Premier respecto a la Liga, es probable que el Messi y el Cristiano "que dentro de cinco años estén compitiendo no lo harán en España, y sí muy probablemente en Inglaterra". "Yo creo que Messi y Cristiano podrían acabar sus carreras en España, pero sus réplicas en grandes estrellas mundiales no los veo jugando ya la Liga, sino la Premier. Ni tan solo en la Bundesliga. La Premier tiene un poder de captación y atracción que será difícil que nosotros podamos rivalizar", ha destacado.
Gay de Liébana presenta estos días su nuevo libro, de temática económica futbolística, titulado "La gran burbuja del fútbol", editado por Conecta, en el que el notorio economista habla de la industria del deporte rey y se centra en las cinco grandes ligas europeas: Inglaterra, España, Alemania, Francia e Italia. 'La gran burbuja del fútbol' se presenta como un libro de referencia para entender cómo se gestiona la industria del fútbol, y el impacto que ha tenido el caudal económico que ha llegado desde la televisión.
"La Premier es el paquete que se está gestionando mejor. Mientras España está monopolizado por Madrid y Barça, en Inglaterra hay más competitividad y eso vende más"
"La Premier es el paquete que se está gestionando mejor", ha destacado en una entrevista a la Agencia EFE, en la que este doctor en economía y derecho de la Universidad de Barcelona sostiene que la Liga está dando pasos de crecimiento "muy buenos", pero considera que debe centrar su mirada "en cómo se organiza la liga inglesa y también en cómo lo están los clubes alemanes".
Ha subrayado un hecho que empieza a ser un mantra en España, acerca de la monopolización que se ha producido "con el Barça y el Madrid, aunque en estos últimos años tenemos que dar las gracias al Atlético de Madrid por haber interferido entre estos dos". La Premier, además de buena organización, vende competitividad, vende líderes, pero no está inclinado hacia ninguno como ocurre aquí, donde si no hablas del Barça o del Madrid parece que no tiene interés ni sentido escribir o ver algo diferente", ha insistido Gay de Liébana.
Por ello, cree que los clubes de la Liga -"que mejorarán las condiciones del contrato televisivo, gracias a la internacionalización del producto", ha precisado-, "fueron demasiado tibios en la negociación", pues cree que tendrían que haber puesto en un brete el torneo y al Madrid y Barça en la negociación de los derechos televisivos, para mejorar poco a poco "lo que ocurre en la Premier, donde no existen estas desigualdades".
"Si de Inglaterra tenemos que copiar su organización y la venta de competitividad que ofrece el producto, de Alemania tenemos que aprender cómo llevan a cabo una inversión comedida y cómo de austeros son con la deuda. No es preciso pagar tanto al futbolista, al margen de alguna excepción", ha añadido. No obstante, cree que alguna de las consecuencias de la crisis en el fútbol español y la burbuja que se ha producido "ha provocado que muchos clubes hayan tenido que recortar sueldos y tirar de la cantera".
"La burbuja no hará que el sistema se desplome, pues el fútbol no desaparecerá, pero ha corregido algunos comportamientos. Lo que pasa que ello no ha afectado a la clase alta, que cada vez es más rica, mientras que la clase media ha bajado a clase medio-baja, siendo más pobre que antes", ha dicho.
"Aquí en el fútbol también parece que exista una 'mano invisible', como la metáfora de Adam Smith sobre la autorregulación del mercado libre, que va haciendo que esto no se hunda y que mantiene las constantes vitales, pero hay un hecho que está claro: los ricos cada vez lo son más frente a los clubes con menos recursos, que cada vez acceden a menos. La burbuja del fútbol afectará más a estos últimos, sin duda", ha puntualizado.
Gay de Liébana sostiene que a España le iría "muy bien poder organizar un mundial, para poner en orden los estadios, pues hay que atender al principal protagonista de este negocio que es el aficionado, aunque esto puede chocar con la idea de intervenir en estadios y hacerlos más grandes, porque hoy no sabemos qué comportamiento tendrán los jóvenes de hoy respecto de su interés por el fútbol dentro de diez o veinte años". "Los niños de ahora tiene muchas más distracciones al alcance de la mano sin salir de casa, y el fútbol es una más, y a veces ni la más interesante", ha añadido.
Augura el economista que la Liga de Campeones "ha tocado techo en Europa y, aunque creo que se refundará sin llegar a convertirse en un torneo cerrado, pues sería la muerte de nuestra Liga, acabará saliendo del continente y jugándose partidos en Estados Unidos o en Asia".