Polémica e indignación deportiva en Cataluña. Una carrera de montaña popular en Sant Pere de Torelló (Osona) llamada Na'dalt ha terminado con Quim Duran, de 48 años, como vencedora de la prueba, una participante asidua a este tipo de pruebas que, hasta la fecha, siempre había participado como hombre, según relata La Vanguardia.

Registrado como Quima, llegó a la cima como líder de la carrera y ahí se inició el revuelo. Algunos participantes le increparon y la protagonista de la historia aseguró tener derecho a sentirse mujer. De haber participado en la categoría masculina, hubiese quedado en el puesto 55, pero al apuntarse como mujer, consiguió ganar la carrera en categoría absoluta y, como premio, llevarse un jamón a casa.

Lo curioso es que según la información de La Vanguardia, Quima sigue federada como hombre y hasta el pasado 26 de diciembre había participado en este tipo de carreras como varón. El problema es que la Federació d'Entitats Excursionistes de Muntanya (FEEC) no cuenta con una reglamentación específica para competidores transexuales.

Tal y como ha publicado Vozpópuli, la ley trans en la que trabaja el Govern pretende que se reconozca el derecho a la identidad y expresión de género, por lo que bastará con sentirse de un sexo u otro para que figure así en el DNI. Y es así, precisamente, como está reglamentado en la mayoría de los deportes: se participa en la categoría en función del sexo que aparezca en la identificación.