Las sanciones impuestas por la Unión Europea y Estados Unidos a Rusia comienzan a hacer mella en las operaciones inmobiliarias financiadas por la banca. Los bancos españoles han dado la orden de extremar la vigilancia sobre el capital ruso, tanto en operaciones de financiación como en los ingresos para no tener que enfrentarse a futuras represalias, según han comentado las fuentes financieras consultadas por Vozpópuli.
El riesgo es máximo y toda precaución es poca en estos momentos. De hecho, no sólo la banca ha comenzado a hacer una 'auditoría' interna de dicho capital. Muchos fondos de inversión extranjeros, relacionados con el inmobiliario, también están analizando qué empresas rusas o ucranianas son inquilinas en sus portfolios europeos para ver posibles impactos a futuro.
Es importante recalcar que el cliente ruso tiene una presencia menor en el conjunto del mercado nacional. Representó solo el 1,89% de las operaciones de compra de vivienda por parte de extranjeros el último trimestre de 2021. En términos absolutos, unas 350 transacciones, según los datos del Colegio de los Registradores de la Propiedad. Sin embargo, su presencia se acentúa en las zonas de la costa mediterránea y en segmentos del mercado de obra nueva, generalmente con los precios más elevados.
“Estamos percibiendo que el conflicto está provocando que las operaciones que teníamos en marcha con inversores de estos dos países se están acelerando por el miedo a un posible cierre bancario, de Rusia principalmente”, afirma Gerard Marcet, socio fundador de la empresa barcelonesa de asesoría de inversiones inmobiliarias Laborde Marcet. “Hablando con colaboradores de estos países nos dicen que los bancos están colapsados con gente que intenta sacar dinero del circuito bancario ruso hacia otros países”.
La banca advierte a las inmobiliarias
Desde una agencia inmobiliaria que comercializa viviendas de lujo en la Costa del Sol inciden en que “los bancos están indicando que será muy difícil financiar al cliente ruso (casi imposible) y que antes de aceptar ninguna operación les contactemos”.
La urbanización más exclusiva de la Costa, La Zagaleta en Benahavís, tiene a personas de nacionalidad rusa entre sus principales clientes, con una cuota cercana al 15%. Existen publicaciones sobre una supuesta mansión en la urbanización que habría comprado el presidente Vladímir Putin, extremo que desde la promotora han desmentido achacándolo a una confusión por otro propietario con sus mismas iniciales. La misma compañía asegura no haber recibido hasta el momento instrucciones de parte de ninguna autoridad sobre sus clientes rusos.
“En lo referente a los visados y residencias aún no hay una información clara sobre las medidas que va tomar España al respecto”, señala Felipe Martínez del Mármol, socio de Real Estate en Andalucía de Martínez-Echevarría Abogados. “El impacto sobre todo sería sobre inversores nuevos con ingresos y fondos exclusivamente en Rusia, aunque estén en una cuenta de divisas. Los grandes empresarios, que no estén de alguna forma relacionados con el presidente, acostumbran a tener cuentas en el extranjero, y para ellos la limitación estaría sobre todo en su capacidad para viajar”.
La presión contra Putin ha aumentado después de que este lunes se impusieran sanciones que impiden al Banco Central de Rusia usar sus reservas para financiar la guerra contra Ucrania y fortalecer el rublo, que experimenta caídas récord
La presión contra Putin ha aumentado después de que este lunes se impusieran sanciones que impiden al Banco Central de Rusia usar sus reservas para financiar la guerra contra Ucrania y fortalecer el rublo, que experimenta caídas récord. Los esfuerzos se centran ahora en redactar la lista de bancos rusos que serán excluidos del sistema de comunicación interbancario internacional SWIFT, lo que aislaría aún más a la economía rusa del sistema financiero internacional.
Los ministros de las principales economías de la UE, el Banco Central Europeo (BCE) y la Comisión Europea (CE) destacaron este lunes «el impacto enorme» de la congelación de los activos del Banco Central ruso decretada el domingo.
«Los ministros subrayaron de manera unánime el impacto masivo, sistémico e inmediato de la medida adoptada ayer (domingo) de congelar los activos del Banco Central ruso, unos impactos que se han visto en los tipos de interés, la devaluación del rublo y los mercados bursátiles», indicaron fuentes del Ejecutivo galo tras una reunión por videoconferencia.