Pese al pesimismo que rodea a los empresarios españoles de la mayoría de los sectores de la economía, los del sector del coworking o de espacios de oficina flexibles se muestran entre los más positivos en una encuesta internacional a empresarios de este mercado realizada por la consultora especializada en este segmento Coworkintel.
Según dicho estudio, los empresarios españoles del coworking confían en que este sector se recupere en España en solo seis meses, contra los siete en EEUU, ocho en Alemania u once en Inglaterra.
La crisis no habría golpeado tanto al coworking español como a otros. Los espacios de trabajo flexible españoles perdieron el 44% de sus miembros durante la crisis, contra el 49% de Francia y el 64% en Inglaterra.
En España, de hecho, los espacios de más de 4.000 metros cuadrados (16% del mercado) vieron incrementada su ocupación tras la crisis, del 23% al 44%.
Mercado con bases sólidas
El mercado actual español consta de 1.500 espacios de coworkings con unos 800.000 metros cuadrados.
"Se trata de uno de los principales países a nivel mundial por coworking por habitantes y uno de los países donde el sector está más desarrollado", según Coworkintel, incidiendo en la existencia de dos grandes empresas nacionales, Utopicus y Loom, respaldadas por dos socimis del Ibex, Colonial y Merlin respectivamente.
El 70% del mercado tiene una edad promedio de cuatro años. El 63% de las empresas españoles lograron renegociar sus contratos durante la crisis con sus inquilinos, en línea con el 64% en EEUU, el 83% en Alemania y el 100% en América Latina, los porcentajes más elevados.
Potencial
Desde Coworkintel entienden que el sector está llamado a "crecer mucho" en España en los próximos años por el influjo de dos tendencias.
"La población total capaz de teletrabajar va multiplicarse después de la crisis del Covid. En 2017 solo el 4% de la población trabajaba desde casa", enuncian desde Coworkintel. Según el Banco de España, esa cifra podría escalar al 30%. Fuentes de mercado inciden en que, en no pocas ocasiones, la persona que teletrabaja podría optar por alquilar una oficina de coworking al no tener su casa suficientemente preparada.
"En un contexto económico inestable, las empresas van a buscar soluciones flexibles para sus oficinas en vez de contratar alquileres con compromisos a largo plazo", añaden. Sin ir más lejos, una encuesta de la consultora Knight Frank ha revelado que una de cada tres empresas españolas prevé utilizar el teletrabajo para ahorrar oficinas.