El sector de la automoción empleó a 2,7 de cada cien trabajadores en España el año pasado a pesar de los cerca de 4.000 despidos que se firmaron durante el último trimestre en comparación con los datos del año anterior, según el informe sobre el mercado de trabajo en el sector automovilístico realizado por Randstad Research.
En el caso de las fábricas de vehículos, se perdieron 2.600 empleos respecto al trimestre anterior y el sector de la venta y reparación perdió 1.250. No obstante, en 2023 la automoción dio trabajo a 589.000 personas en nuestro país, un 6,3% más que hace un año, a causa de un "dinamismo" que procede del subsector de la venta y reparación donde se experimentó un crecimiento del 7%.
En su conjunto, el empleo asalariado muestra un claro predominio, aunque mucho más pronunciado en el segmento de fabricación de coches donde la práctica totalidad de los puestos de trabajo se firman bajo esta modalidad.
En el caso de la venta y reparación, una cuarta parte de los empleos son de trabajadores por cuenta propia. Un total de 444.633 trabajadores asalariados desarrollaron su actividad durante el cuarto trimestre de 2023 mediante una relación laboral indefinida, lo que supone que el 90,2% del total de los empleados de automoción.
La tasa de temporalidad en automoción se situó en un 9,8%, tras haberse reducido considerablemente a raíz de la reforma laboral impulsada por el Gobierno.
Casi el 60% del empleo comprende a trabajadores de entre los 35 y 54 años. Destaca que los grupos de edad mayores de 45 años contienen el 53% del empleo de fabricación de vehículos, mientras que en la franja de edad de 16 a 34 años se encuentra el 28% del empleo de venta y reparación.
Preocupación por el envejecimiento
Sin embargo, el envejecimiento del sector es "evidente" tras registrar, desde el tercer trimestre de 2022, un incremento de los trabajadores de 45 a 54 años sobre los que tienen entre 33 y 44 años.
Otro gran reto que tiene que abordar el sector, es la formación y la profesionalización del empleo, dado que un 43% de los ocupados de este sector no han completado estudios profesionales.
Así las cosas, el sector afronta por delante el reto de la implementación en los procesos de producción de la inteligencia artificial por la que se esperan que se reduzcan en un 11% durante los próximos tres años las tareas realizadas por el ser humano.
Más de la mitad del empleo en el sector se concentra en Cataluña, Andalucía, Comunidad Valenciana y Madrid. En el caso de la fabricación, Cataluña está a la cabeza, aportando cerca del 31% del total de ocupados del país. Tras esta, País Vasco (13,1%), Aragón (9,4%) y Castilla y León (9,1%) son las regiones que más empleo proporcionan.
Asimismo, si se atiende a la venta y reparación, el peso de Cataluña y Andalucía es mayor comparativamente con el resto de comunidades autónomas con pesos del 17,3% y 15%, respectivamente.