El presidente de Telefónica, César Alierta, ha puesto punto y final a la relación de la operadora española con Telecom Italia. "Ya no nos interesa Telecom Italia, nuestro problema allí ha sido no ser italianos", ha afirmado el ejecutivo aragonés en un encuentro con periodistas en el marco del Curso de Telecomunicaciones que se celebra esta semana en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP).
Telefónica controla aún el 8,3% de la compañía italiana, pero ya ha ofrecido estas acciones a Vivendi. El grupo francés ha optado por Telefóncia para negociar la venta de su filial brasileña GVT, después de que la española presentara una oferta valorada en 7.450 millones de euros.
En la batalla que se libra en Brasil, la gran derrotada ha sido Telecom Italia, que estaba interesada en hacerse con GVT, pero ha sido excluida del proceso negociador.
La compra de GVT supone para Telefónica dar carpetazo a su aventura italiana, que desde sus comienzos ha estado envuelta en la polémica. El presidente de la operadora ha señalado que en Italia "hemos aprendido y ha sido interesante" la aventura, sin ocultar que ésta no ha sido satisfactoria.
Si Italia ya es agua pasada para Alierta, ahora sus esfuerzos están volcados en reforzar su posición en Brasil. Las negociaciones para comprar GVT se prolongarán unos meses. La compañía calcula que la integración de la filial brasileña de Vivendi podría reportarle "al menos" 4.700 millones de euros en sinergias.
La batalla en Brasil por el control de GVT ha terminado por romper las tensas relaciones entre Telefónica y su participada italiana
Del total de sinergias previstas, unos 3.200 millones de euros corresponden a ahorros en costes operativos (opex) y en inversiones en capital fijo (capex) y a sinergias en ingresos mientras que el resto, 1.500 millones, responde a mejoras fiscales y ahorros financieros.
La firma ha añadido en la presentación que se lograrán ahorros netos desde el primer año de operación y que la tasa de ejecución anual de las sinergias operativas y de ingresos será de al menos 450 millones de euros anuales desde 2020.
Telefónica prevé que la operación se cierre a mediados de 2015, una vez firmados los acuerdos definitivos tras ser la propuesta al consejo de trabajadores de Vivendi y tras la aprobación pertinente por parte de las autoridades y los accionistas de la filial brasileña de Telefónica.
La multinacional española considera que, tras la integración, la nueva compañía fusionada será líder en el mercado brasileño con casi 101,5 millones de accesos, frente a los 96,58 millones de la firma controlada por el empresario Carlos Slim, América Móvil, los 75,26 millones de la firma brasileña Oi, que se encuentra en proceso de fusión con Portugal Telecom, los 74,69 millones de la filial de Telecom Italia, TIM y los 5,48 millones de Sky.
En concreto, total de accesos de Telefónica tras la integración con GVT, 78,47 millones son clientes móviles, 15,1 millones son accesos fijos, 6,56 millones clientes de banda ancha y casi 1,4 millones clientes de televisión de pago.