El Gobierno ha presentado este martes su plan de seguridad energética para afrontar un invierno marcado por los problemas de suministro de precios en Europa y los altos precios de la energía. La estrategia busca ahorrar, aliviar la factura de los consumidores y ofrecer ayuda a los países vecinos. Para lograrlo, la estrategia de Teresa Ribera exige que tanto a la Administración como a las grandes empresas que se ‘aprieten el cinturón energético’ en los próximos meses. 

“Las grandes empresas podrán presentar planes de contribución al ahorro energético, basándose en los resultados de las auditorías energéticas que ya debían realizar”, expone uno de los 73 puntos de este plan. Esta solicitud se basa en el real decreto de 2016 que obliga a realizar estas auditorías energéticas para las grandes empresas de más de 250 trabajadores o más de 50 millones de euros de volumen de negocio. 

Estas auditorías energéticas deberán cubrir, al menos, el 85% del consumo total de energía del conjunto de sus instalaciones, y deberán realizarse al menos cada cuatro años. Desde el Ministerio para la Transición Ecológica detallan que esta recomendación es para las grandes empresas, que más consumo de electricidad y gas hacen, pero que recibe con los brazos abiertos cualquier empresa que quiera incorporarse al ahorro. 

Las exigencias para el sector privado pretenden respaldar al plan de ahorro de la Administración central que se aprobó en mayo. Un plan que el Gobierno quiere reforzar con exigencias de eficiencia energética en la contratación pública y sistemas de autoconsumo. En este sentido, antes del 1 de diciembre, las comunidades autónomas y las entidades locales publicarán sus respectivos planes de ahorro, despliegue del autoconsumo y actuaciones de ahorro para este invierno. 

Uno de los puntos que más foco mediático es cómo afectan estas exigencias a la instalación de luces de Navidad este invierno. El Gobierno no limitará esta instalación en ninguna ciudad, aunque sí consideran que es relevante que todos los ayuntamientos revisen si esta campaña navideña puede disparar su consumo en tiempos de ahorro. 

El Gobierno pide más transparencia en las facturas 

Para defender a los consumidores en esta crisis energética, el Gobierno obliga en este plan a que los emisores de las facturas de luz y gas den más transparencia a sus clientes. Una transparencia que llegará a través de información adicional para que los consumidores puedan saber cómo ahorrar en su consumo. 

En este sentido, las facturas de luz y gas de los consumidores con menos de 15 kW de potencia y un consumo inferior a 50.000 KWh anuales, respectivamente, incluirán una comparativa del consumo con clientes similares en el mismo código postal. También pide a las empresas que ofrezcan consejos para consumir de “un modo inteligente”, según lo define este plan.

El plan de ahorro para las grandes empresas y la transparencia en las facturas son dos de las medidas destacadas de este amplío paquete de medidas. Su apuesta también insiste en el impulso de la transición energética, la protección de consumidores, medidas fiscales, autonomía estratégica y solidaridad con los países vecinos.

¿Qué quiere conseguir Ribera?

El objetivo de las 73 medidas es conseguir un ahorro de gas natural entre el 5,1 y el 13,5%, un mayor alivio para los consumidores más vulnerables. También busca un ahorro en la factura de gas de las comunidades de vecinos, reducir la volatilidad de la tarifa eléctrica y mejorar la competitividad de la industria.

El otro frente que pretende conseguir este paquete de medidas es maximizar la capacidad de exportación de energía para los países vecinos más necesitados y cumplir los objetivos de ahorro de gas natural que ha marcado Europa. El Gobierno irá publicando cada mes la evolución de estas exigencias y objetivos ahorro que marca este plan.

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