Los Presupuestos Generales del Estado (PGE) presentados por el Ejecutivo tienen una carga tecnológica muy grande, con la digitalización de administraciones públicas y empresas privadas como puntal. Entre otras cosas, se contempla la formación de hackers en el sector público para luchar contra el cibercrimen.
Así, los PGE detallan que estos profesionales se formen dentro de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado (principalmente Policía Nacional y Guardia Civil) en habilidades contra el cibercrimen.
No debe confundirse a los hackers con los ciberdelincuentes. Los primeros se dedican a buscar vulnerabilidades pero no las explotan. No hacen uso o realizan ataques en base a esas debilidades. Los ciberdelincuentes son, por el contrario, aquellos que sí las explotan, que atacan los sistemas a través de sus debilidades. Un hacker nunca lo hace. Lejos de ello, avisará a los afectados por problemas de ciberseguridad.
Hackers y programas de capacitación
"Bajo el componente 19 se desplegará un programa de capacitación digital de las Administraciones Públicas, dirigido a la formación en competencias digitales de los miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, en concreto de los miembros del Cuerpo Nacional de Policía y de la Guardia Civil, con el fin de robustecer la capacidad en ciberseguridad, ciberinteligencia, hacking, ciencias forenses, IoT, inteligencia artificial, formando nuevos especialistas en estos ámbitos, además de mejorar la capacitación en la utilización y desarrollo de herramientas y dispositivos electrónicos de vigilancia y monitorización", desgranan los Presupuestos Generales del Estado.
El documento no desglosa el montante total de ayudas ni el número total de empleados públicos que serán formados como hackers, si bien explica que "el componente 19 del 'Plan Nacional de Competencias Digitales (digital skills)' (grupo de programas 32S), tiene una dotación por importe de 384 millones de euros, consignada con la finalidad de garantizar la formación e inclusión digital de la ciudadanía y los trabajadores, no dejando a nadie atrás en el proceso de transformación digital de la sociedad y la economía".
El Gobierno trata con la formación en habilidades en hacking dentro de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado de afrontar con más garantías la defensa del ciberespacio, con un nivel de amenazas creciente e imparable. Hace solo unos meses se producía un ciberataque de tipo ransomware al SEPE (Servicio Público de Empleo Estatal) que llegó a afectar al INSS (Instituto Nacional de la Seguridad Social), ralentizando, incluso, procesos de servicio al ciudadano.
El Gobierno es consciente de este incremento en las amenazas y, por ello, lanzó no hace mucho una licitación de 12 millones de euros a través del Instituto Nacional de Ciberseguridad (INCIBE) destinada a mitigar la problemática. El hecho de que se haya presupuestado en los PGE una partida para especializar a policías y guardias civiles en el mundo hacker habla de la dimensión que está tomando el problema.
Ciberataques desde China
Poco antes de la pandemia, a principios del año pasado, un estudio de El Real Instituto Elcano liderado por dos investigadores españoles dejaba claro que se había detectado un incremento en los ciberataques desde China. Esto no significa necesariamente que sean ataques ejecutados por ciudadanos chinos, sino que se realizan desde servidores y equipos en la región. Es decir, pueden ser utilizados por personas de cualquier otra nacionalidad.
"Hay quejas sobre los frecuentes ciberataques desde China contra empresas e infraestructuras públicas españolas, y una creciente conciencia de la amenaza híbrida. Además, el Centro Criptológico Nacional alertó en un informe de 2019 sobre cómo algunos de esos ataques apuntan a las infraestructuras críticas para recopilar información sobre sus vulnerabilidades y la suplantación de identidad para realizar labores de ciberespionaje", desveló en su día el estudio de El Real Instituto Elcano.
