Las estadísticas del INE han desvelado que los hogares españoles pagan el 50% de los impuestos ambientales. El último informe de la entidad sobre cuentas medioambientales recopila el dinero que se han registrado en las arcas del Estado a través de las aportaciones para hacer frente al cambio climático. Según las cifras, los impuestos ambientales alcanzaron los 20.529 millones de euros en 2022, un 3,2% menos que en el año anterior.
Una reducción ínfima que, al igual que en los años anteriores, un porcentaje alto del total de la paga ha sido asumida por la ciudadanía española. Es más, el propio INE ha explicado que durante el 2022 el pago de los hogares subió 3,2 puntos más que en el año anterior. En lo que se refiere al total de impuestos de la economía española, los ambientales representaron el 6,2%, frente al 7,1% de 2021. ¿Hasta qué punto es lógico que la repartición de los impuestos ambientales sea del 50-50?
La economía española emitió 304,4 millones de toneladas de gases de efecto invernadero en 2022, un 3,1% más que en 2021. Sin embargo, esta cantidad de emisiones se ha disminuido desde el 2008, año en el que se empezó a poner en el foco mediático y político la importancia de salvaguardar el planeta. El problema radica en la distribución del pago, ya que el 22,7% de las emisiones correspondieron a los hogares. Esto se traduce en que los ciudadanos de a pie produjeron un total de 69.098.800 toneladas de gases de efecto invernadero.
Un 22,7% de la contaminación de los hogares, frente el 49,9% de los impuestos ambientales que han pagado las familias españolas, según los datos del INE. En líneas generales, las empresas e industrias, que son las principales emisoras de los gases de efecto invernadero, se han visto beneficiadas por el Gobierno a la hora de pagar los impuestos de esta índole, asumiendo un mayor porcentaje los hogares españoles.
El 76,5% de los impuestos sobre el transporte los asume los hogares, según el INE
"Los impuestos de naturaleza ambiental representaron el 38,4% del total de Otros impuestos corrientes. Por su parte, los Impuestos sobre los productos, excluidos el IVA y los impuestos sobre las importaciones con finalidad ambiental, supusieron el 35,6% del total, y los Impuestos sobre la producción ambientales el 15,2%", explica el INE en su informe sobre las cuentas medioambientales.
Los impuestos ambientales del Gobierno se dividen en tres grandes ramas bien diferenciadas entre ellas: Impuestos sobre la energía (que en 2022 representaron el 80,6% del total), Impuestos sobre el transporte (14,7%) e Impuestos sobre la contaminación y los recursos (4,7%). Desglosando cada uno de ellos, los Impuestos sobre la energía se disminuyeron un 4,4%, mientras que los Impuestos sobre la contaminación y los recursos un 9,5%. El único que ha experimentado una subida durante el 2022 fue el Impuesto sobre el transporte, que aumentó un 6,8%.
Entrando en el caso particular de los hogares, la división de los impuestos es cuanto menos llamativa. Tal y como indica el INE las familias "abonaron el 76,5% de los Impuestos sobre el transporte y el 47,8% de los Impuestos sobre la energía". El Impuesto sobre el transporte ha sido el principal pilar de los impuestos ambientales que han tenido que pagar los hogares, un hecho que se entiende teniendo en cuenta el uso personal que se le da a medios de transporte como los coches o las motocicletas.
La otra cara de la moneda es las ramas de actividad. El sector -que engloba a las diferentes empresas e industrias que operan en España- pagaron el 50,1% del total de los impuestos ambientales, abonando un 97,3% de los Impuestos sobre la contaminación y los recursos, y el 52,2% de los Impuestos sobre la energía. Hay que recalcar que esta categoría fueron los responsables del 77,3% de los gases contaminantes que se emitieron a nivel nacional durante el 2022.
Para terminar, el INE recalca que el Transporte y Almacenamiento fue la actividad que más porcentaje de los impuestos ambientales tuvieron que abonar en el 2022: "Las ramas de actividad que pagaron más impuestos ambientales en 2022 fueron Transporte y almacenamiento (15,5% del total) y Suministro de energía eléctrica, gas, vapor y agua e Industria manufacturera (12,8%). Por el contrario, las que menos abonaron fueron Agricultura, ganadería, selvicultura y pesca y las Industrias extractivas y (con el 0,8% y 1,0% del total, respectivamente)".
