A pesar de mostrarse en los últimos días un pequeño acercamiento entre la Comisión Europea (CE) y Grecia, el presidente de la CE, Jean-Claude Juncker, ha rechazado de nuevo reunirse con el primer ministro heleno, Alexis Tsipras -que se encuentra en Bruselas para participar en la cumbre entre la UE y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC)-, por considerar insuficiente la contraoferta de Atenas en materia de reformas.
Así lo ha reflejado este miércoles el portavoz del Ejecutivo comunitario, Margaritis Schinas, quien ha dicho que las últimas propuestas de Grecia “no reflejan el estado de las discusiones entre el presidente Juncker y el primer ministro Tsipras del pasado miércoles por la noche" ni las que mantuvo el comisario de Asuntos Económicos, Pierre Moscovici, y los negociadores griegos el lunes por la noche.
"La Comisión considera que la pelota está claramente en el tejado del Gobierno griego, que debe dar seguimiento a los acuerdos con el presidente Juncker del miércoles por la noche", ha subrayado el portavoz. El encuentro del miércoles, en el que también participó el presidente del Eurogrupo, Jerone Dijsselbloem, concluyó sin acuerdo, pero Tsipras se comprometió a presentar de inmediato una contraoferta que respondiera a las exigencias de los acreedores.
Schinas: "Todavía es posible avanzar, pero sería importante llegar a un acuerdo que refleje las discusiones previas entre Juncker y Tsipras"
Sin embargo, las nuevas propuestas se retrasaron hasta el martes y sólo se refieren a los objetivos presupuestarios, pero no cubren otras cuestiones que pedía Bruselas como las pensiones. Además, Grecia reclama de nuevo un alivio de la deuda, algo que los acreedores excluyen en esta fase de las negociaciones. "Todavía es posible avanzar, pero sería importante llegar a un acuerdo en los próximos días sobre los objetivos de superávit primario que refleje las discusiones previas entre Juncker y Tsipras", ha señalado el portavoz. "Hay flexibilidad para sustituir algunas medidas por otras fiscalmente equivalentes, especialmente en materia de IVA y pensiones", ha agregado. El IVA y las pensiones son ahora el principal escollo para lograr un acuerdo.
Tsipras contra las cuerdas
La presentación por parte de Atenas de una contraoferta que responda a estos parámetros es la condición previa que exige Juncker para reunirse de nuevo con Tsipras e intentar cerrar un acuerdo que desbloquee el último tramo de 7.200 millones de euros del rescate, según ha explicado el portavoz. "En el programa del presidente (Juncker) no hay ningún encuentro aparte de su participación en la cumbre UE-CELAC", ha dicho Schinas.
Sin la ayuda de la UE, Grecia no puede hacer frente a sus crecientes problemas de liquidez ni pagar el vencimiento de 1.500 millones de euros que debe al Fondo Monetario Internacional (FMI) el próximo 30 de junio. Ese día vence además la prórroga del actual rescate griego, y si no se alcanza un acuerdo a tiempo Atenas podría verse obligada a suspender pagos y a salir del euro.